A principios del año pasado, los reclamos de los principales hombres de negocios de la Argentina tenían que ver con prioridades como disminuir el déficit fiscal, bajar el porcentaje de inflación, impulsar sectores estratégicos, eliminar la brecha cambiaria y frenar la pérdida de reservas del Banco Central.

Los datos habían sido relevados por la encuesta que todos los años publica la Union Industrial Argentina (UIA), organismo que se ha convertido en la voz activa del empresariado.

Encuesta de la UIA: pese al ajuste de Milei, empresarios afrontan dificultades

En aquella oportunidad, ocho de cada 10 ejecutivos (80%) consideraron que la prioridad debía ser reducir el gasto del Estado; otro 64% combatir en serio la inflación; un 48% votó porque el Gobierno le de impulso a sectores estratégicos como la energía; la minería; la industria automotriz, entre otros, a la vez de unificar los tipos de cambio para, de ese modo, terminar con la diferencia de valores entre los más de 12 dólares vigentes.

Un año después y a casi tres meses del desembarco del gobierno libertario en la Casa Rosada, el panorama no ha variado en cuanto al escenario en la era Milei.

Si se registra un dato positivo en el nuevo relevamiento recientemente difundido por la organización empresarial que lidera Daniel Funes de Rioja y que se refiere a que cada vez menos empresas creen que es buen momento de invertir en maquinaria y equipo y desarrollar proyectos de largo plazo (54% de las empresas), más allá de la coyuntura.

De todos modos, pocos de los encuestados (28%) aseguran que que es un momento macroeconómico propicio para invertir, además de que un 74% de las empresas indicó que no obtuvo acceso al Mercado Unificado y Libre de Cambios (MULC) en los últimos días.

Según la encuesta de la UIA, cientos de empresas no lograron acceder a dólares para importaciones.

Es más, de la encuesta surge que "existe una disparidad significativa entre las grandes sociedades y las PyMEs, ya que 71% de las primeras pudo hacerlo, mientras que solo el 24% de las Pymes lo tuvo".

Acceso limitado al MULC

Incluso, a nivel general, el 73% del total de los empresarios que participaron del relevamiento indicó que continúan las dificultades para acceder a compras de insumos del exterior.

Al respecto, la mayoría licitó para mantener el acceso al MULC y para vender el bono en el mercado secundario; otro 79% lo hizo por deuda de bienes, el 21% por deuda de bienes y servicios y sólo el 1% por deuda de servicios.

Según la encuesta, los principales motivos en torno a la decisión de no licitar surgieron por incertidumbre respecto de la paridad/volumen del bono en mercado secundario, y porque la amortización ocurre en un plazo muy lejano. A partir de este escenario, las empresas esperan un fuerte impacto de la caída de la demanda, ya que el relevamiento muestra que esta predicción negativa alcanza al 81% del total.

En este sentido, esperan que su producción caiga ante un menor dinamismo de la obra pública; que su producción se reduzca por menor consumo familiar (73% de las empresas) y por la menor demanda de otras industrias (53%).

El trabajo también señala que las empresas esperan impacto de la caída de la construcción y el y sector automotor y, en cambio, hay mejores perspectivas entre las empresasvinculadas al sector minero (el 34% cree que el sector minero favorecerá a su producción).

Sólo un 28% de los empresarios cree que es un buen momento macroeconómico para invertir.

Mejores expectativas de cara al futuro

En el primer relevamiento del año, el Monitor de Desempeño Industrial (índice MDI) volvió a encontrarse en niveles de contracción (por debajo de 50).

Ocurre que se trata del nivel más bajo de la serie y tuvo una caída de -6,9 p.p respecto al mismo mes del año pasado en el marco de esta encuesta que fue realizada entre el 1 y 19 de enero pasado y a la cual respondieron 712 empresas de diversas actividades, regiones y tamaño.

El relevamiento registró además los niveles más bajos de la serie en las variables de producción y ventas, indicando una agudización de las dificultades en el entramado productivo industrial, especialmente en las PyMES (participación del 96% en la muestra).

Esta situación redundó en más empresas con dificultades para hacer frente a los pagos; marcó un cambio de tendencia en la serie de empleo, que hasta el momento era la que evidenciaba mayorestabilidad.

Ahora se registró el porcentaje más alto de empresas con caída del empleo y un deterioro notable en relación a relevamientos previos.

Consumo cada vez más dudoso

Las empresas también consideraron que su situación económica está peor que hace un año y esperan el impacto de la calidad del consumo, la obra pública y la menor actividad de otras empresas.

La última encuesta de la UIA refleja que las empresas se preparan para un menor consumo en los próximos meses.

Sin embargo, en cuanto a las expectativas para dentro de un año, aproximadamente el 50% de las empresas espera que su situación, la del sector y la del país, mejore en el próximo año.

En el caso del MDI, se encuentra en el nivel más bajo de la serie, con 50 puntos y que indican contracción de la actividad por séptimo relevamiento consecutivo.

Según la UIA, el 61% de las empresas mostró caídas (vs el 45% en enero 2023); solo el 9% tuvo subas, el nivel más bajo de la serie.

La merma predominó en los 12 sectores industriales relevados, mientras que elíndice de difusión se ubicóen -52 p.p y fue negativo porsexta vez consecutiva.

Además, un 69% informó caída en sus niveles de ventas internas (vs el 46% en enero 2023); otro 41% que sufrió caída de exportaciones, además de un deterioro en los indicadores de empleo.

Mayores atrasos en los pagos

Para el 53% de las empresas encuestadas, hubo dificultades para afrontar al menos uno de los pagos (salarios, proveedores, compromisos financieros, servicios públicos, impuestos).

En este contexto, la cantidad de empresas queno pudieron enfrentar ninguna de esas erogaciones (6,9%) se duplicó desde el último relevamiento, mientras que el empleo cayó en el 21% de las empresas encuestadas y, por segundo mes consecutivo, más empresas reducen su nivel de empleo que aquellas que lo aumentan.

Especial impacto entre las PyMEs

En el caso de las pequeñas empresas, el 61% registró una baja en la producción, mientras que solo el 8% registró subas, lo cual muestra un peor escenario en comparación al mismo mes del año pasado.

La misma tendencia se observó en las ventas tanto al mercado interno, como externo.