Argentinos importaban cargadores para autos eléctricos: hoy fabrican en el país y van a exportar
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En 2016, el emprendedor Cristian Carrea vió un cargador para autos eléctricos en una calle de Londres y pensó en una oportunidad de negocio: la movilidad eléctrica estaba llegando, y en Argentina y América latina harían falta cargadores para la nueva generación de vehículos sustentables.
Dos años más tarde, firmó un acuerdo con la compañía neerlandesa EVBox, con sede en Amsterdam, para empezar a importar cargadores eléctricos de autos. Y tras un año de parálisis por la pandemia, en 2021 vendió su parte en esa compañía para fundar otra cuya actividad principal es producir los cargadores localmente.
Se sumaron al proyecto Christian Socin y Sebastián Maggio, presidente de Grupo Arcángel Maggio, dedicado a la industria gráfica. E invirtieron unos u$s5 millones en ingeniería inversa para diseñar y desarrollar localmente la matricería y prototipos de tres modelos de cargadores: domiciliarios, comerciales y para vía pública.
Cargadores para todo tipo de autos eléctricos e híbridos
Los cargadores, que sirven para todo tipo de vehículos eléctricos e híbridos, contienen un 80% de componentes locales (solo un 20% son piezas electrónicas importadas).
En su versión domiciliaria, permiten programar la carga del vehículo durante la noche o cuando hay un menor consumo eléctrico hogareño. Y las versiones comercial (para shoppings, hoteles, restaurantes y otros comercios) y de vía pública permiten una carga semi rápida (en una hora, se obtiene una autonomía de 120 kilómetros).
También desarrollaron un software para administrar y programar la carga de vehículos desde el móvil, disponible para sistemas tanto Android como IOs. Para el diseño exterior de los cargadores, se inspiraron en los antiguos surtidores de YPF de los años 40 y 50, con una esfera luminosa arriba del tótem.
Producir para exportar
En marzo de este año, Etia colocó un cargador en el acceso al Hotel Hilton de Puerto Madero, para ser usado por huéspedes y visitantes. "Más allá de la coyuntura, que está difícil para producir y vender, el futuro es la movilidad sustentable y hacia allá nos movemos", apunta Carrea.
Antes de fin de año, la firma tiene previsto inaugurar su planta industrial en el barrio porteño de Barracas, para fabricar cargadores en serie, tanto para el mercado local como para exportar, principalmente a países del Mercosur.
En 2023, Etia participó junto al Instituto Tecnológico de Buenos Aires (ITBA) en el desarrollo del primer bus eléctrico y autónomo en la Argentina, que actualmente funciona en el Parque de la Innovación del barrio porteño de Núñez. El vehículo, que no tiene chofer, ni volante ni caja de cambios, puede transportar hasta 15 personas y hace un recorrido limitado, dentro del predio, de 1.100 metros, con distintas estaciones. Este proyecto experimental se puede visitar en forma gratuita, de lunes a viernes en el Parque de la Innovación.
Asímismo, la compañía tiene una unidad de negocios llamada Retrofit, dedicada a la conversión de vehículos a combustión en eléctricos. Con este cambio, el vehículo prescinde del uso de nafta, aceite de motor, tanque de combustible y circuito tradicional de refrigeración. Todo esto es reemplazado por un motor eléctrico, una unidad de control y baterías de litio. Esto permite darle una segunda vida a los automóviles convencionales, siguiendo los principios de la economía circular (reutilizar, reciclar y reducir el impacto ambiental).
Eléctrico y autónomo, el auto del futuro ya arrancó
Si bien en la Argentina la movilidad eléctrica es incipiente, la tendencia a nivel mundial ya está instalada. Las ventas globales de vehículos eléctricos pasaron de 130.000 unidades en 2012 a más de 10 millones en 2022. Aunque todavía representan menos del 15% de las ventas anuales de autos, aumentaron más de tres veces respecto de 2020 y cada año superan la proyección del año anterior. Para 2030, se proyecta que superarán el 35% del total global.
La "Ley de Movilidad Sustentable" presentada al Congreso en 2021, establece que a partir de 2040, todos los autos que se fabriquen en el país deberán ser híbridos o eléctricos. Esta transición hacia la movilidad sustentable podría crear unos 12.500 puestos de trabajo en terminales automotrices, con inversiones estimadas en u$s5.000 millones.
También se podrían crear unos 6.000 puestos de trabajo en sectores autopartistas e inversiones por u$s1.500 millones, y 2.500 puestos de trabajo en fabricantes de baterías de litio con inversiones por u$s1.800 millones. Sin embargo, la ley aún aguarda su sanción e implementación.
Pese a la ausencia de una normativa para el sector, según la Asociación de Concesionarios de la República Argentina (ACARA), en 2023 se patentaron 9.601 autos eléctricos e híbridos (21% más que en 2022). Junto con ellos, crece la necesidad de contar la infraestructura necesaria, y cargadores eléctricos que permitan y promuevan la utilización de estos vehículos.
Hasta julio de 2023, la Argentina contaba con unos 230 cargadores eléctricos públicos, ubicándose la mayoría de ellos en CABA (44) y en la Provincia de Buenos Aires (87). Sin embargo, este número debería duplicarse este año. Esta es la oportunidad a la que apuestan los fundadores de Etia.