Peligra otra apuesta de Milei: en la previa al arribo de los F-16, podría caerse la compra de submarinos
La apuesta del Gobierno por recuperar la capacidad militar de la Argentina está a punto de recibir un golpazo por las complicaciones presupuestarias. Ocurre que la intención oficial de adquirir tres submarinos clase Scorpène choca de frente con la imposibilidad del oficialismo de efectuar pagos anticipados a Naval Group, la empresa francesa que fabrica esos sumergibles. De hecho, desde el seno de la compañía gala se expuso que para avanzar con el proceso debe efectuarse un pago anticipado del 15% del monto total. Y que Nación hasta el momento ha dado señales de que no podría cubrir ese porcentaje. Al mismo tiempo, se descartó la posibilidad de que el astillero Tandanor tome parte de la fabricación a raíz de deficiencias en su infraestructura.
Las complicaciones que proliferan en torno a la eventual incorporación de los Scorpène fue expuesta por Laurent Mourre, director de Ventas de Naval Group para Latinoamérica. El directivo reconoció que las negociaciones están "estancadas" y que La Libertad Avanza (LLA) no avanzó con "el acuerdo financiero por lo que el proceso no se inició de manera formal".
"La financiación es evidentemente una cuestión, y puede ser indispensable en el caso argentino. El Estado puede dar una garantía para permitir una financiación al comprador", declaró.
Para luego añadir que el inicio de la construcción de los sumergibles requiere de un anticipo del 15% del monto total, fijado en torno a los 2.000 millones de dólares. "Lo clásico es 15%. A veces es 30%, a veces es 15%. No es una ley, pero está muy articulado con la financiación", explicó.
Por el lado del Gobierno, fuentes oficiales también expusieron que hasta el momento tanto la compañía como el Ejecutivo francés se han mostrado reticentes a brindar facilidades de financiamiento para la compra de los submarinos.
"En todas las últimas reuniones que tuvimos, siempre insistimos con la habilitación del crédito, pero no hubo respuesta formal", afirmaron las voces consultadas.
Por otra parte, y a diferencia de lo que ocurre con Brasil —que viene de presentar el "Almirante Karam", su cuarto submarino convencional diseñado por Naval Group y desarrollado de forma local en el Complejo Naval de Itaguaí—, Francia descartó por completo la posibilidad de fabricar parte de los submarinos en los talleres y diques de la estatal Tandanor.
"Tandanor es un astillero que necesitaría inversiones importantes para poder construir submarinos", enfatizó Mourre.
Los tipos de submarinos que interesan al Gobierno
Con relación a las características de los Scorpène, se trata de sumergibles con presencia en las armadas de Chile, Malasia, India, Brasil e Indonesia. Y, de acuerdo a sendas plataformas militares, presentan estos aspectos generales:
- Desplazamiento en superficie: 1.600–2.000 toneladas.
- Longitud total: 72 metros.
- Velocidad sumergido: 20 nudos.
- Profundidad de buceo: 300 metros.
- Autonomía: 78 días en una misión de 80 días.
- Autonomía sumergida: 12 días.
- Tripulación: 31 personas.
- Carga útil total de armas: 18 (entre torpedos y misiles).
- Tubos de armas: 6.
- Sistema de gestión de combate: Subtics.
- Disponibilidad operativa en el mar: 240 días por año.
Los Scorpène y la posibilidad de recuperar fuerza submarina
Respecto de este tipo de submarinos, el Jefe del Estado Mayor General de la Armada, el contraalmirante Carlos María Allievi, declaró a mediados del año pasado que los Scorpène permitirán "recuperar la capacidad submarina en el mediano plazo. Es una capacidad que para nosotros es estratégica, es vital, una capacidad que la Armada tenía desde el año 1933, cuando llegaron los primeros submarinos".
"Si uno analiza el cono sur, Chile y Brasil tienen Scorpène y el resto de los países, estamos hablando de Perú, Ecuador, Colombia y Venezuela, tienen 209. Como submarino, operativamente tiene mayores aptitudes el Scorpène, la adquisición de ese submarino establecería un equilibrio estratégico, estaríamos nivelados con Brasil y Chile", agregó.
Por otra parte, el presidente Javier Milei afirmó recientemente que Argentina busca negociar con Francia la compra de buques patrulleros. En ese caso, corresponderá a cuatro embarcaciones OPV similares a las clase Bouchard que la Armada incorporó en los últimos años.
La intención oficial es que los patrulleros en cuestión resulten asignados a la Prefectura Naval y con el fin de reemplazar a 5 unidades clase Mantilla que llevan más de cuatro décadas prestando servicio a esa fuerza.