El Estado boliviano asumió control de refinerías de Petrobras
El Estado boliviano asumió ayer el control de las dos refinerías de Petrobras en Bolivia, tras el acuerdo alcanzado el jueves entre los gobiernos de Evo Morales y Luiz Lula Da Silva para la compra-venta de la petrolera brasileña.Morales firmó esta mañana el decreto por el que el Estado boliviano recupera la soberanía sobre las refinerías Guillermo Elder, en Santa Cruz, y Gualberto Villarroel, en Cochabamba, y que autoriza al presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) a comprar por 112 millones de dólares las plantas, según informaron la agencia ABI y la Red Erbol.El mandatario y su gabinete tomaron luego posesión simbólica de las plantas durante un acto efectuado en dependencias de la refinería de Santa Cruz.Morales señaló que con la recuperación de ambas refinerías se está cumpliendo con el mandato del pueblo boliviano y se dignifica el país sentando soberanía sobre los recursos naturales, según consignó Erbol.El jefe de Estado descartó que la recuperación de las plantas de Petrobras y de otras empresas sean un "botín político", y garantizó la estabilidad laboral de los trabajadores, con cuyos representantes dijo haber conversado para asegurar el funcionamiento de las refinerías y nuevos proyectos que permitan ampliar la producción."Falta mucho todavía por hacer, no me siento aplazado en los 16 meses de Gobierno. Bolivia es ejemplo en como tomar decisiones políticas oportunas para recuperar los recursos naturales", enfatizó.Por su parte, el ministro de Hidrocarburos y Energía, Carlos Villegas, dijo que tras la recuperación de las refinerías, el otro paso es asumir control en las empresas Chaco, Andina y Transredes, informó ABI.Según la agencia estatal, el proceso de transición administrativa y operativa para transferir el control total de las instalaciones durará 30 días, y se realizará con el apoyo técnico de Petrobras.Con esta finalidad, y para establecer la forma de pago, representantes de la empresa brasileña y de YPFB comenzarán a reunirse en los próximos días, según informó Télam. Ayer, el ministro de Minas y Energía brasileño, Silas Ronedeau, adelantó que el gobierno brasileño aceptaría que parte de los 112 millones de dólares pactados por la operación sean cancelados con la exportaicón de gas."Es un producto que nos interesa y nosotros tenemos un contrato de suministro de 30 millones de metros cúbicos diarios. Por lo tanto allí tenemos una buena garantía", aseguró en declaraciones difundidas por Ansa.El director financiero y de Relaciones con los Inversores de Petrobras, Almir Barbassa, consideró hoy que es un "precio razonable" los 112 millones de dólares acordados para la transacción."Compramos las refinerías en el país en 1999 con la intención de permanecer allí. La idea no era vender, pero conseguimos un precio justo por los activos que teníamos", dijo en declaraciones divulgadas por la agencia Brasil.Barbassa aclaró que "no fuimos expropiados de Bolivia" sino que "compramos para quedarnos pero cambiaron las reglas del juego y nos fuimos" y no descartó, por lo tanto, nuevas inversiones de Petrobras en el país andino.