Brasil sigue expandiendo multinacionales
Gerdau informó en un comunicado que el Consejo de Administración de la siderúrgica estadounidense aprobó por unanimidad el negocio y decidió recomendarle a los accionistas de la empresa que voten en favor de la oferta.La compra será hecha mediante Gerdau Ameristeel Corporation, subsidiaria en Estados Unidos del grupo brasileño, que es el mayor productor de aceros largos de América y que tiene una capacidad para producir 19,6 millones de toneladas anuales de acero en sus plantas en Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Estados Unidos, México, Perú, Uruguay y Venezuela.Gerdau también tiene una participación del 40 por ciento en la española Sidenor; un acuerdo de asociación con una siderúrgica en República Dominicana y una asociación de riesgo compartido con el grupo Kakyani de India.Sus acciones son negociadas en las bolsas de Sao Paulo, Nueva York, Madrid y Toronto.Chaparral Steel Company, con plantas en Texas y Virginia y una capacidad instalada para producir 2,9 millones de toneladas métricas anuales, es la segunda mayor productora de acero estructural en América del Norte e igualmente una importante fabricante de barras de acero."La adquisición es consistente con la estrategia de Gerdau Ameristeel de diversificar la oferta de productos de mayor valor agregado", afirmó el presidente de la subsidiaria del grupo brasileño, Mario Longhi, citado en el comunicado de la empresa.Gerdau Ameristeel informó igualmente de que, tras la negociación, pretende hacer una emisión de acciones para "alcanzar un nivel prudente de capitalización y un balance sólido".El negocio, que aún depende de la aprobación de los accionistas de la siderúrgica estadounidense, así como de las agencias reguladores, puede ser concluido antes de finalizar el año, según las previsiones del grupo brasileño.Gerdau cerró el año pasado con ganancias líquidas de 869,4 millones de reales, unos 457,6 millones de dólares al cambio actual, con un crecimiento del 4,4 por ciento con respecto a 2005.La producción total de acero bruto del Grupo Gerdau en el primer trimestre de este año llegó a cuatro millones de toneladas, en un 7,7 por ciento superior a la del mismo período del año pasado, en tanto que la producción de laminados fue de 3,4 millones de toneladas, con un crecimiento del 11,7 por ciento.CrecimientoPor esta y otras operaciones, Brasil ya tiene derecho a ser considerado entre las grandes potencias emergentes, y una de sus economías más dinámicas.No es ociosa la clasificación de los principales mercados emergentes en BRIC (iniciales de Brasil, Rusia, la India y China), aunque algunos también agregan a México en este selecto club receptor de inversiones extranjeras directas.Hoy en día, muchas de las principales empresas brasileñas son las más grandes de América latina (tal el caso de Petrobras, Companhia Vale do Rio Doce, Embraer o Gerdau). El país ha tenido éxito en su desarrollo industrial, a tal punto que varias compañías son verdaderas multinacionales latinas (o multilatinas), con fuertes inversiones en países vecinos.Según un estudio realizado por la consultora Economática, Brasil es líder indiscutido en la región: de las 50 principales compañías latinoamericanas que cotizan en bolsa, 22 son de origen brasileño. Y las dos más grandes también, medidas en nivel de ganancias: Petrobras (energía) ganó u$s3.250 millones en el tercer trimestre de 2006 y Compañía Vale do Rio Doce (minería) obtuvo u$s1.800 millones de ganancia.La consultora internacional The Boston Consulting Group ("The New Global Challengers") publicó en 2006 un informe que identifica las 100 compañías emergentes que disputarán el liderazgo mundial en los próximos años, donde el 12% es de origen brasileño:
- Braskem (petroquímica)
- Companhia Vale do Rio Doce (minería)
- Coteminas (textil)
- Embraco (metalmecánica)
- Embraer (aeronáutica)
- Gerdau (siderúrgica)
- Natura (cosméticos)
- Perdigao (alimentos y bebidas)
- Petrobras (hidrocarburos)
- Sadia (alimentos y bebidas)
- Votorantim (construcciones)
- WEG (metalmecánica)
CausasLas causas de este desarrollo hay que buscarlas en primer lugar en el tamaño de su mercado interno: con 185 millones de habitantes, representa más de la mitad del mercado sudamericano (330 millones). Por lo que las empresas brasileñas han contado durante muchos años con un territorio suficientemente grande como para "ejercitar sus músculos", crecer y prepararse para la competencia internacional, gracias a una política proteccionista llevada adelante por el gobierno federal bajo el paraguas del Mercosur. Pero también estas "multilatinas" llevaron adelante una estrategia de crecimiento mundial para acceder a las tecnologías y conocimientos de los países desarrollados.Al tratarse de empresas que se encuentran en la primera etapa de expansión, la estrategia inicial consiste en ingresar a los mercados vecinos, como se dio con la ola de compra de empresas argentinas por parte de sus competidoras brasileñas (Quilmes-Brahma, Acindar-Belgo Mineira, Loma Negra-Camargo Correa o Swift-Friboi). "Creo que en el caso brasileño va a seguir, y diría que no sólo por un tema de tipo de cambio sino por un tema de integración regional y de entendimiento del folklore argentino. Los brasileños nos entienden más que lo que nos puede entender un canadiense. Por lo que creo que todas estas inversiones multilatinas hace que ellos tengan un poco menos de temor y nos entiendan más", afirmó a infobaeprofesional.com Ignacio Aquino, Associate Partner de PriceWaterhouse & Co. BNDESOtro de los ases en la manga que poseen las empresas brasileñas es el Banco Nacional de Desenvolvimento Econí´mico e Social (BNDES), organismo público encargado de financiar proyectos de inversión de Pyme y grandes empresas, así como exportaciones de compañías brasileñas. Con un presupuesto superior a los u$s21.000 millones, el BNDES financia a tasas subsidiadas desde proyectos de infraestructura en los que participen empresas brasileñas en el resto de América latina hasta la compra con apalancamiento de compañías competidoras en otros países de la región. Tal fue el caso de la compra de Loma Negra por parte del grupo Camargo Correa, que contó con créditos blandos de más de u$s1.000 millones de la entidad. O la compra de Swift (principal exportadora de carnes de la Argentina) por Friboi, donde el BNDES le brindó una línea por u$s80 millones. Hoy, el grupo brasileño pasó a convertirse en el abastecedor del 50% de los productos cárnicos industrializados que se consumen en el mundo. BiocombustiblesSin embargo, si uno se focaliza en el tamaño de mercado y en las multinacionales que crecen a nivel local, tenderá a perder de vista el fenomenal potencial que representa para Brasil el mercado mundial de energías renovables. "La Arabia Saudita de los biocombustibles" es un calificativo que bien puede convertirse en realidad en Brasil para la segunda mitad del siglo XXI. Con precios del barril de crudo que difícilmente vuelvan a niveles de u$s10 (como sucedió por última vez en 1999) por el progresivo agotamiento de las reservas existentes, y ante el creciente impacto del calentamiento global, el país está muy bien parado para convertirse en el principal proveedor mundial de biocombustibles. De hecho, Brasil ya es el principal productor (50% de la producción mundial) y exportador de bioetanol, que desde el último discurso del presidente Bush sobre el estado de la economía estadounidense se ha convertido en el combustible "estrella" para todo el mundo. Incluso, el presidente Bush piensa realizar una visita de Estado a su par Lula da Silva a partir del 8 de marzo para firmar acuerdos de cooperación en materia de biocombustibles. En la visión de Tom Trebat, especialista en economía brasileña de la Universidad de Columbia, "Washington necesitará un socio confiable, con condiciones tecnológicas y capacidad de expandir la producción de etanol. En el mundo no existe ningún país tan adelantado como Brasil". Por otra parte, el país tiene 33.000 estaciones de servicio que venden etanol (en EEUU, el segundo productor mundial, hay solamente 600). Y la empresa Dedini es el mayor fabricante de destilerías de alcohol del mundo, con más del 30% de la producción mundial.Además, el país cuenta con un parque automotor con un 70% de vehículos impulsados por motores flex, es decir que pueden funcionar con naftas cortadas con biocombustibles. Y hasta la empresa aeronáutica Embraer ya fabrica aviones de pequeño porte impulsados por etanol. Lo que da la pauta de que Brasil está bien preparado para competir en el mundo sin depender de otros países en el abastecimiento de commodities estratégicos. El gran mérito de Brasil es haber visto antes que todos el fabuloso potencial de los biocombustibles, y de convertirlo en una política nacional estratégica. Cuando se lanzó en 1975 el Programa Proalcohol, el interés del Gobierno era reducir la dependencia de las importaciones de crudo, que en ese momento eran un tema muy conflictivo por el primer shock petrolero que se había vivido en 1973. AdelantoEn una medida que muestra la importancia que el gobierno brasileño le da al desarrollo del sector, el responsable del Programa Nacional de Producción y Uso del Biodiesel, Arnaldo de Campos, anunció este martes que se adelantará en tres años la meta oficial de sustituir las importaciones de diesel para el año 2013, gracias al aumento en la producción de biocombustibles. De esta manera, a partir de 2008, los consumidores y empresas brasileños tendrán en el mercado un gasoil cortado con un 5% de biodiesel. Actualmente, el consumo nacional de diesel es de 40.000 millones de litros por año. La producción brasileña se hace en base a aceite de soja, de girasol y de palma.