La petrolera brasileña Petrobras anunció en las últimas horas el descubrimiento de un nuevo yacimiento de crudo liviano a grandes profundidades en el lecho del océano Atlántico, en un área que según el Gobierno podría cambiar la historia energética de Brasil.El yacimiento, cuyo volumen de reservas probables no ha sido divulgado, también está localizado en el horizonte geológico de "pre sal" y al lado del famoso campo de Tupí, que fue anunciado por Petrobras entre 2006 y 2007.Ambos pertenecen al bloque BM-S-11, de unos 100 kilómetros cuadrados.En una de las dos áreas exploratorias de ese bloque fue localizado el yacimiento de Tupí, que podría contener entre 5.000 y 7.000 millones de barriles, según dijo oportunamente la petrolera estatal.El nuevo yacimiento vecino fue identificado por el mismo consorcio que descubrió Tupí, formado por Petrobras (como operadora y con 65% de participación), la británica BG Group (25%) y la portuguesa Galp Energía (10 por ciento).El pozo, bautizado como "Iara", todavía está en fase de exploración "en busca de horizontes más profundos", y se encuentra a cerca de 230 kilómetros del litoral de la ciudad de Río de Janeiro, bajo aguas de 2.230 metros de profundidad.Este petróleo es liviano, de 30 grados API (una medida internacional de densidad), lo que significa que tiene alto valor comercial.El reservorio fue encontrado a una profundidad total de 5.600 metros y el descubrimiento fue notificado también este jueves al organismo regulador estatal Agencia Nacional de Petróleo (ANP), explicó Petrobras.A finales de 2007 el consorcio encabezado por la petrolera brasileña completó nuevas pruebas y confirmó a Tupí como uno de los mayores yacimientos descubiertos en el mundo en la última década, capaz de casi duplicar de una vez las reservas probadas de Brasil.Ese pozo y anuncios posteriores de nuevos indicios también confirmarían que en el horizonte del "pre sal", que se extiende por un área de 800 kilómetros de largo y 200 de ancho, habría mucho más crudo por descubrir.El Gobierno del presidente Lula Da Silva estima que el "pre sal" puede contener unos 80.000 millones de barriles de crudo, suficientes para catapultar a Brasil a la categoría de nueva potencia petrolera exportadora.Por su parte, Petrobras explicó este jueves que una vez completado este nuevo pozo el consorcio seguirá con sus inversiones para verificar las dimensiones del yacimiento y las características de los hidrocarburos localizados.Además, enviará a la ANP un plan de evaluación, paso previo a la elaboración de un proyecto de explotación comercial.
En mayoEn tanto, el pasado 21 de mayo Petrobras anunció el descubrimiento de un nuevo yacimiento de crudo también en la capa pre-salina de la Cuenca de Santos pero sin divulgar su capacidad.La explotación quedaría en manos
de un consorcio que integran Petrobras (líder, con 66% de participación) Shell (20%, Holanda) y Galp Energía (14%, Portugal).En el área pre-salina de esa cuenca Brasil realizó, como se detalló hasta ahora, sus principales descubrimientos petrolíferos.Así, en noviembre de 2007 Petrobras anunció un nuevo y gigantesco yacimiento, en el campo Tupí, con reservas a gran profundidad estimadas entre 5.000 y 8.000 millones de barriles y que podrían aumentar en 50% las reservas de crudo del país.Ya en abril de este año Brasil estudiaba el potencial de los dos bloques descubiertos en el campo Carioca el cual, según estimaciones iniciales,
tendría una capacidad de 33.000 millones de barriles, por lo que sería uno de los mayores del mundo.
Elevar las reservasPor otro lado, el gobierno brasileño lanzó recientemente un programa de u$s5.000 millones para la compra de 146 embarcaciones para la explotación de reservas petroleras off shore. La petrolera estatal Petrobras dijo que también pretende contratar naves-sonda, plataformas de perforación semisumergibles y naves de gran porte,
que podrían incrementar el costo de la operación en u$s20.000 millones."Cuando asumí la presidencia, la industria naval brasileña estaba reducida a poco más de 1.900 trabajadores, y apenas cinco años y medio después, la industria naval tiene más de 40.000 trabajadores", declaró el presidente Luiz Inicio Lula da Silva en una ceremonia en Niteroi, ciudad aledaña a Río de Janeiro, al lanzar el programa naval.Un comunicado de Petrobras indicó que entre 70% y 80% de la fuerza laboral ocupada en la construcción de los barcos debe ser brasileña para asegurar la generación de empleos y revitalizar la industria naval del país.
Agregó que cada barco crearía unos 500 empleos en las tareas de construcción, y cuando la flota esté completa generaría empleo para 3.800 tripulantes.La estatal pretende tener las nuevas embarcaciones listas para el 2017. El plan de construcción naval está dirigido a ayudar a Petrobras a explotar los grandes descubrimientos petroleros de mar profundo cera del litoral de Río de Janeiro.
Otra empresaRecientemente el ministro brasileño de Minas y Energía, Edison Lobao, dio cuenta de la creación de una nueva empresa petrolera cuya finalidad será administrar la exploración y explotación de reservas en pleno océano Atlántico.
La iniciativa ostentará un perfil 100% estatal, y parte de su puesta en marcha responde a un intento del gobierno que encabeza Lula Da Silva por establecer un control a los movimientos de Petrobras, que registra una participación de capitales extranjeros cercana al 40 por ciento."La nueva petrolera estatal sería dueña de las reservas y contrataría empresas como Petrobras, Esso y Shell para explotar esas áreas como prestadoras de servicios. No va a perforar pozos. Apenas va a contratar los servicios", sostuvo Lobao.El funcionario admitió que la creación de la compañía será una de las sugerencias que le hará al presidente brasileño en el informe que entregará en unos 60 días y en el que
propondrá un nuevo modelo de explotación de petróleo a fin de convertir al país en una gran potencia petrolera.La decisión llega en simultáneo con los últimos dichos de Lula Da Silva respecto del potencial brasileño en cuanto a producción de hidrocarburos. Lula Da Silva comunicó hace escasas semanas que su país al menos triplicará sus reservas petroleras con la exploración de un nuevo sector marino que, según su visión,
incluye el mayor descubrimiento del continente americano desde 1976.