La Copa del Mundo de fútbol se vive intensamente en cada grupo de amigos o familiares, en la casa, en la oficina y en cada rincón del país. El Mundial, Messi y las distintas cosas que pasan en Brasil son tema de conversación y no cansa tratarlos una y otra vez.

A los argentinos les encanta vivir el Mundial y la mina de Veladero es uno de esos lugares donde el fútbol también se palpita.

Allí, en Veladero, a 4.300 metros de altura, durante dos horas se paralizó todo. Más de 1.500 trabajadores mineros vivieron la pasión mundialista igual que en cada rincón del país.Nadie trabajó durante el transcurso de los partidos. En ocho diferentes sitios de la mina, los mineros siguieron los partidos a través de pantallas gigantes y leds, estratégicamente acompañados por parlantes que amplificaban el sonido que aportaba la señal satelital que llegaba a lo alto de la Cordillera, casi al límite con Chile. 

El frío de esta época, el viento de la zona y la altura de la imponente cordillera de los Andes no fueron impedimento para detener la pasión durante estos tres primeros partidos de la Argentina. Se hizo una pausa en las tareas, se siguió con nerviosismo y se hizo el aguante desde la altura sanjuanina, pero se disfrutó y se pudo festejar.

Esta mina, que comenzó a ser operada por Barrick en octubre de 2005, es una pequeña sociedad en sí misma, con más de 3.800 trabajadores de diversas profesiones trabajando en el medio de la montaña, tales como: ingenieros, geólogos, geofísicos, bioingenieros, contadores, licenciados en sistemas y muchos más. Todos ellos, a más de 4.000 metros de altura, combinan su rutina de trabajo con distintas propuestas de recreación.

Veladero es la única mina en el país con una amplia propuesta de actividades recreativas, que van desde clases de teatro, música y fotografía hasta actividades físicas que incluyen un torneo de fútbol. Los torneos de fútbol son la actividad más solicitada por los diferentes profesionales.

Hay una copa en juego y el orgullo de ser campeón, al menos, una vez cada tres meses. Una copa que genera casi la misma ilusión que tienen Messi, Higuaín y Mascherano en ganar la Copa del Mundo de la FIFA, en Brasil. Y las imágenes que llegan desde Veladero muestran que el fervor por el evento futbolero más grande del mundo no tiene límites ni fronteras.