La cadena estadounidense NBC confirmó que ya tiene vendidos en 95% los espacios publicitarios para el entretiempo del Super Bowl, el partido final del campeonato de la Liga Norteamericana de Fútbol Americano (NFL, por sus siglas en inglés), que junto con la entrega de los Oscars, es el evento televisado más importante en el calendario publicitario. 

Este año, de acuerdo a ejecutivos de la cadena, los anunciantes abonaron aproximadamente unos u$s4,5 millones por spot de 30 segundos. 

Seth Winter, vicepresidente ejecutivo de ventas y marketing de NBC Sports Group y NBCUniversal News Group, dijo en declaraciones relevadas por The Wall Street Journal, que ese precio es "una ganga" y confirmó que 15 anunciantes nuevos harán su debut en el próximo Super Bowl, que se jugará el próximo domingo 1 de febrero. 

La NBC no transmitía este evento desde 2012, pero es la decimoquinta vez que lo hace en su historia.

De acuerdo a la cadena, se vio este año un creciente interés por anunciar de parte de las marcas de bebidas alcohólicas, de compañías de seguros, de gaseosas, de juegos y aplicaciones, de restaurantes de comida rápida y de películas.

Sin embargo, hubo menos demanda de parte de firmas de la industria automotriz, de tecnología y de proveedores de servicios inalámbricos.

Por otra parte, la venta de anuncios digitales de la Super Bowl se duplicó desde 2012, para captar la atención de los aficionados de la NFL que presencien la transmisión por streaming.

NBC comunicó que los anunciantes que querían espacios digitales también compraron un componente en televisión, por lo que prácticamente todos los que tienen publicidad durante el juego también tendrán anuncios en las plataformas online de la NBC.