Las imitaciones a Mauricio Macri que se vienen realizando el programa "ShowMatch" de Marcelo Tinelli generaron el enojo del Presidente y un fuerte cruce entre el conductor y los militantes de Cambiemos en las redes sociales.

"Tinelli me satiriza de mala manera ante 3 millones de personas en televisión y se ofende porque lo critican 30.000 tuiteros", dijo el mandatario en una entrevista este fin de semana.

El periodista había denunciado días antes que tras presentar en su programa una imitación del Presidente, un "ejercito de trolls" (perfiles falsos) lo atacó a través de Twitter y Facebook y culpó por ello al Gobierno.

Si bien esto fue negado por el propio Macri, militantes del PRO lanzaron el lunes una campaña bajo el hashtag #HoyApagonATinelli, que invitaba a no ver el programa como forma de repudiar las imitaciones que consideran agresivas o humillantes.

La estrategia no funcionó bien. La expectativa de la respuesta que daría Tinelli a Macri fue más fuerte y el programa de Canal 13 picó en el rating que, según Ibope, alcanzó los 20 puntos.

¿Pero cuál fue la reacción del conductor a las críticas de Macri?

Llamativamente Tinelli decidió no emitir opinión y más extraño aún, en el segmento de humor político. "Gran Cuñado", tampoco estuvo la imitación que Freddy Villareal hace de Macri.

En la ronda de chistes participaron "los dobles" de Horacio Rodríguez Larreta, Diego Santilli, Máximo y Alicia Kirchner, Margarita Stolbizer y Sergio Massa, pero el Presidente no formó parte del programa.

La producción de "ShowMatch" contó al portal Ciudad.com que la ausencia de debió a que antes del comienzo de la nueva temporada, Freddy había avisado que el lunes 25 de julio tenía un show privado arreglado en Capital Federal y que se iba a ausentar por ese día. Para hoy se espera su vuelta.

Lo cierto es que la pelea de Macri con Tinelli no es simplemente por las burlas que recibe el mandatario en el programa ni las críticas que el conductor escribe desde su cuenta en Twitter. Detrás de ello se encuentra también la batalla por la conducción de la AFA a la que aspiraba el directivo del club San Lorenzo de Almagro, pero el Gobierno se aseguró de que no llegara.

Lo neutralizó a él y al líder de la CGT y dirigente de Independiente, Hugo Moyano. ¿Cómo lo hizo? Con la intervención de la AFA. De esta manera, se suspendieron las elecciones donde ambos se iban a presentar como candidatos.

En vez de comicios, se armó una Comisión Normalizadora con gente de confianza de Macri: Armando Pérez, y los hombres del PRO en Boca Javier Medín y Daniel Angelici.

Por si fuera poco, se aseguró que Angelici, su voz en la AFA, fuera proclamado como presidente de la Liga Sudamericana de Fútbol.

Así, el rol de Macri en el presente de la AFA fue tomando fuerza. Lo único que le falta, sería elegir al nuevo entrenador de la Selección.