Las posibilidades de encontrar un nuevo empleo entusiasman a cada vez menos trabajadores argentinos. 

Así lo determinó la última edición del estudio Randstad Workmonitor, que mide a nivel global distintos indicadores que sirven como termómetro del mercado laboral.

En este caso, la consultora de Recursos Humanos detectó que el 67% todavía se encuentra en algún nivel satisfecho con su actual puesto y empleador.

Sin embargo, con ese puntaje la Argentina aparece en el extremo más negativo de la tabla de satisfacción que encabezan México (85%), Dinamarca (83%) e India (80%). En Brasil, por caso, el 75% respondió de forma positiva ante esta consulta, y el 69% hizo lo mismo en Chile. 

"Con una caída de dos puntos durante el tercer trimestre de 2017", indicó Randstad Argentina, el país "tiene el nivel de satisfacción más bajo de la región".

En ese marco los argentinos, si bien hay un 13% que declara estar buscando activamente, mostraron un marcado descenso de sus expectativas de cambio laboral.

La confianza de los locales en encontrar un nuevo trabajo en los próximos seis meses se ubicó en el 66% en el tercer trimestre, nueve puntos por debajo del nivel del mismo periodo del año pasado, aseguraron desde la consultora.

¿A qué se atribuye esa caída que ya acumula seis meses a la baja? "Sin dudas tiene que ver con la falta de señales claras de reactivación de la economía y el empleo, lo que impacta en un mayor pesimismo de los argentinos respecto del mercado laboral de corto plazo", dijo Andrea Ávila, CEO de Randstad para Argentina y Uruguay.

Sin embargo, la ejecutiva regional espera que esa perspectiva comience a cambiar: "En cuanto la coyuntura muestre que el mercado laboral está más sólido, que las empresas activan sus planes de contratación y la demanda laboral crece, las expectativas y la confianza se recuperan rápidamente".

Por el momento, los datos parecen darles la razón a los más pesimistas: solo el 16% de los locales cambiaron de empleo o de posición en los últimos seis meses, según el Randstad Workmonitor, mientras que el 84% permaneció en el mismo puesto.

Después de Luxemburgo (92%) y Austria (87%) la Argentina fue el país -de 33 analizados- con la menor cantidad de cambios de empleo en los últimos seis meses, empatado con Japón, Hungría y Dinamarca.

En Brasil, por caso, el 30% de los encuestados mudaron de empleo en ese período, y en México el 22 por ciento.

"Tanto la confianza como la búsqueda activa se retraen cuando el mercado laboral no se muestra sólido y con demanda sostenida", coincidió Ávila.

"Si los trabajadores perciben que las empresas no están incorporando personal o no se reactivan las búsquedas y el empleo privado formal no crece, aparecen las actitudes conservadoras, se toman menos riesgos y menos gente sale proactivamente a buscar un cambio de trabajo porque la percepción es que le va a costar encontrarlo", resumió.

Para la ejecutiva de Randstad, situaciones como la que vive la Argentina suelen tener en los talentos un "efecto de desaliento" y una baja en la rotación de personal en las empresas.

"Es el mismo fenómeno que se evidenció en el análisis de los datos de desempleo del segundo trimestre que se conocieron hace unos días, cuando se vio que la baja de medio punto del desempleo fue producto de una menor tasa de actividad, es decir, menor cantidad de gente que busca trabajo", resaltó Ávila.

En ese marco es que el Índice de Movilidad Laboral de Randstad en Argentina cayó nuevamente, por segundo trimestre consecutivo, para ubicarse en 114 puntos. En el primer trimestre del año había mostrado un importante crecimiento, y se ubicó en 116.

El Índice se calcula a partir de la confianza que tienen los trabajadores en encontrar otro empleo, el temor a ser despedidos y la búsqueda activa de un empleo nuevo. Se define la movilidad como la expectativa de los trabajadores sobre sus posibilidades de ser empleados en otros lugares u otros puestos en los 6 próximos meses.

A nivel regional, Argentina es el país que cuenta con menor Índice de Movilidad Laboral. Lidera Brasil (123), seguido por México (120) y Chile (115).

Formación permanente

Ante el amesetamiento de sus posibilidades de cambio laboral, la gran mayoría de los trabajadores a nivel mundial apuesta sus fichas a la capacitación y a la formación durante toda su etapa activa.

Por caso, el 97% de los argentinos indicó que el aprendizaje permanente es esencial, independientemente de la edad que se tenga, mientras que el 94% considera que la formación y el desarrollo de habilidades y competencias laborales son una responsabilidad individual, propia de cada trabajador.

A nivel mundial los resultados son similares: el 90% de los encuestados cree que es esencial la formación permanente, mientras que el 91% considera que la formación es una responsabilidad propia.

Sin embargo, el 66% de los encuestados indicó que las actividades de formación relacionadas con el trabajo son ofrecidas y pagadas por su empleador. En Argentina, el porcentaje de quienes así lo indicaron desciende al 55 por ciento.

En un contexto en el que la tecnología y la digitalización avanzan a un ritmo vertiginoso, el trabajo y las habilidades que se requieren de la fuerza laboral cambian a la par, generando una mayor necesidad de formación.

En este sentido, el 88% de los encuestados en Argentina siente que necesita más formación para estar al día en su campo de desarrollo profesional.

Sobre estos resultados, Andrea Ávila afirmó: "Las organizaciones tienen que trabajar para resolver el descalce que ya existe entre las habilidades y competencias que requieren de su fuerza laboral, y que tiende a ampliarse, mientras que los trabajadores deben invertir tiempo y recursos para formarse y desarrollar tanto sus conocimientos técnicos como sus habilidades blandas para mantenerse competitivos".

¿Hasta qué punto los trabajadores están dispuestos a procurarse y pagar ellos mismos su formación? Con un rotundo 89% que indica estar dispuesto a hacerlo, los trabajadores argentinos son más proclives que sus colegas del resto del mundo a completar su capacitación, ya que solo el 67% de los encuestados en los 33 países de la muestra se pronunció favorablemente al respecto.