Cuatro gendarmes prestaron declaración testimonial ante el juez federal de Esquel, Guido Otranto, este miércoles. Y, según trascendió, está previsto que otros 16 uniformados se presenten hasta el lunes para brindar sus testimonios.

De esta forma, la Justicia profundiza en la pista que apunta a la Gendarmería como responsable de la desaparición de Santiago Maldonado. Pero no es la única línea investigativa.

Este miércoles también comenzó a analizarse un movimiento de tierra “raro” cercano al río Chubut, a 16 kilómetros de la comunidad mapuche de Cushamen, donde la Gendarmería realizó un operativo el 1º de agosto. Según las denuncias, allí fue donde se vio por última vez a Santiago Maldonado.

A seis días de que comenzaran los rastreos en el río Chubut, un grupo de efectivos de la Policía Federal y la Prefectura descubrieron un movimiento de tierra y harán un procedimiento en esa zona para determinar qué pasó.

“El movimiento de tierras implica que vamos a hacer tareas para ver si en ese lugar hay alguien o algo enterrado”, aseguró una fuente cercana al expediente. "Aunque hay una posibilidad de que no sea nada", advirtió.

Gendarmes ante el juez

Luego de que surgiera en los últimos días la confirmación de una agresión de parte del uniformado Neri Robledo hacia uno de los manifestantes el 1° de agosto en el predio de la comunidad mapuche Pu Lof, el magistrado patagónico continuó escuchando los relatos de distintos miembros de la fuerza de seguridad.

En la puerta del Juzgado de Esquel, el secretario de Cooperación con los Poderes Judiciales, Ministerios Públicos y Legislaturas del Ministerio de Seguridad, Gonzalo Cané, indicó que este miércoles se presentaron cuatro gendarmes "que tuvieron diferente participación en los procedimientos".

Se trató de Hugo Fabián Díaz, Daniel Alejandro Gómez, Orlando Federico Yucra y Juan Rodolfo Prieto. El martes habían declarado otros tres agentes: Walter Ruiz Díaz, César Peralta y Juan Carlos Pelozo.

"Hay declaraciones programadas hasta el día lunes, incluso el sábado", manifestó el funcionario nacional, quien precisó que "cerca de 16 personas más" brindarán su testimonio ante Otranto.

Al respecto, el integrante de la cartera que conduce Patricia Bullrich aclaró que por el momento no hay declaraciones indagatorias, pero explicó que "cualquier declaración testimonial se puede convertir en indagatoria, si el juez o la fiscal (Silvina Ávila) consideran que los dichos de ese testimonio pueden ser incriminatarios para la persona que está bajo juramento".

Finalmente, en declaraciones a la prensa Cané evitó inclinarse por una de las versiones que se barajan en torno de la desaparición del joven artesano de 28 años: "No tenemos hipótesis, sino que nos dedicamos a investigar absolutamente todo lo que va surgiendo en la causa y lo que nos pide el juez".

Según se va esclareciendo en la pesqiusa, quedó establecido que un grupo de al menos 8 gendarmes llegó muy cerca del río. 

La versión fue publicada por Clarín. Esto choca con el testimonio de Juan Pablo Escola, el comandante segundo del Escuadrón 36 de Esquel, quien estuvo al frente de los 30 a 40 agentes que avanzaron sobre los militantes el 1º de agosto, quien negó desde el primer momento que eso haya sido así. Esa habría sido la última vez que se lo vio a Santiago Maldonado según las denuncias.

Fuera de reglamento La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, resaltó este miércoles que el accionar del gendarme que arrojó una piedra contra uno de los integrantes de la comunidad mapuche Pu Lof "está absolutamente fuera del reglamento" y "va a tener consecuencias", aunque subrayó que no quiere "estigmatizar" al uniformado.

"Lo que hizo está absolutamente fuera del reglamento, pero no quiero estigmatizar a Robledo”, dijo la funcionaria.

Y agregó: “Va a tener consecuencias, pero queremos terminar de analizar todo el panorama. En el momento en que tengamos que tomar decisiones lo haremos. Hay que analizar todo, eso incluye lo que se montó", sostuvo la funcionaria nacional.

En una entrevista con el diario La Nación, la integrante del Gabinete rechazó las acusaciones en su contra y señaló que "una cosa es que la Gendarmería esté en un plan de desaparición forzosa y otra es que un gendarme haya cometido una acción que va en contra de las normas".

"Todavía no podemos decir que lo que hizo Robledo tuvo consecuencias. Hizo algo que está mal, pero no sabemos si eso tuvo consecuencias", aclaró la dirigente oficialista, en alusión a la posibilidad de que esa pedrada haya sido contra el joven artesano de 28 años.

Asimismo, Bullrich advirtió que va a ser "muy dura contra los que hicieron acusaciones falsas y los que difamaron" tanto al Gobierno como a la Gendarmería Nacional.

Consultada respecto a por qué todavía no se ingresó al predio de la comunidad mapuche Pu Lof, manifestó que "fundamentalmente porque el juez (federal de Esquel, Guido Otranto) estaba esperando el ADN de las camionetas y los camiones".

"Nosotros queremos entrar al lugar, creemos que eso es muy importante. Hoy tenemos los ADN y hay prendas que dieron positivo el 16 (de agosto). Ese día los perros iban hacia dentro del Lof, nosotros queremos seguir ese rastro", agregó.

Bullrich también resaltó que el magistrado "está actuando con mucha prudencia" en la causa judicial.

Por otra parte, la funcionaria nacional respaldó al jefe de Gabinete del Ministerio de Seguridad, Pablo Noceti: "No tengo ninguna duda de él. No sólo lo digo yo, también lo dice el juez Otranto. No hablaron de lo que estaba pasando en la Ruta 40".

Finalmente, anticipó que está "pensando en cambiar el sistema sumarial de las fuerzas de seguridad", ya que advirtió que "son antiguos" y consideró que "un tema importante es que sean externos a las fuerzas".