iProfesional

El FMI visitó a la CGT: hablaron del bono a jubilados y paz social mientras gremios duros confirmaron paros

Los funcionarios del FMI admitieron a los sindicalistas que lo peor de la crisis todavía no pasó. En los próximos días, los gremios duros van al paro
16/11/2018 - 10:00hs
El FMI visitó a la CGT: hablaron del bono a jubilados y paz social mientras gremios duros confirmaron paros

La cúpula de la CGT le planteó al FMI la necesidad de un adelanto a los jubilados, un refuerzo de los planes sociales y medidas para preservar el empleo ante el empeoramiento del cuadro social. La dirigencia sindical expuso sus demandas este jueves durante la reunión que mantuvo con el representante del organismo en Buenos Aires, Roberto Cardarelli, quien reconoció que lo peor de la crisis llegará en los próximos meses y se desmarcó del ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, por sus recientes declaraciones sobre el ajuste.

Durante el encuentro mantenido por la mañana en la sede del sindicato de la construcción (UOCRA), la comitiva sindical encabezada por el dueño de casa Gerardo Martínez alertó por el “notorio deterioro de los indicadores sociales". Desde el primer encuentro mantenido en agosto pasado, la crisis -explicaron- impactó en los salarios, el empleo y la inflación, que en octubre ascendió al 46% interanual, según informó ayer el INDEC.

En contraste con el optimismo oficial, el gremialismo advirtió que las metas de ajuste acordadas entre el Gobierno y el organismo ponen en riesgo la paz social y reiteraron la falta de diálogo por parte de las autoridades.

Los dirigentes le plantearon a Cardarelli la necesidad de aplicar medidas económicas y políticas “urgentes” para preservar el empleo, recuperar mercado interno y reactivar la economía. Uno de los principales reclamos, como adelantó el viernes pasado iProfesional, fue el anticipo a enero del aumento a los jubilados previsto para marzo en la Ley de Movilidad, junto con un incremento extra de las partidas destinadas a los planes sociales y la Asignación Universal por Hijo (AUH).

En los últimos días, los movimientos sociales incrementaron la presión para recibir un “aguinaldo” –un aumento extra- y advirtieron con volver a retomar su plan de protestas.

El cónclave fue convocado un día después de la aprobación del Presupuesto en el Senado, con un ajuste de $400.000 millones compartido con las provincias. La sanción elogiada por el FMI contó con el respaldo del peronismo y, a diferencia del debate en Diputados, no se registraron mayores protestas. Un clima que fue favorecido por la decisión de la CGT de desactivar el paro previsto para estos días, tras acordar con el ministro de Producción y Trabajo Dante Sica un bono por única vez de $5.000 en dos tramos y un mecanismo por el que las empresas deben informar los despidos con 10 días de preaviso, ambos fijados por decreto.

Lejos de llevar tranquilidad, Cardarelli contradijo ayer las proyecciones oficiales ante la delegación de Azopardo, integrada por el triunviro Carlos Acuña, el estatal Andrés Rodríguez, el metalúrgico Enrique Salinas y José Luis Lingeri, del sindicato de aguas. Mientras el Gobierno pronostica que “lo peor ya pasó” en octubre, el funcionario del FMI auguró que los momentos más duros de la crisis se vivirán los próximos meses hasta mediados del 2019 por la inflación y las altas tasas de interés que según él “complican” el repunte de la economía y las inversiones productivas.

El economista coincidió con la CGT en lo desafortunadas que fueron las declaraciones del miércoles de Dujovne durante una charla con empresarios, en donde aseguró que “nunca se hizo un ajuste de esta magnitud sin que caiga el Gobierno”. Con todo, se mostró confiado en que la liquidación de la cosecha del campo podría traer una bocanada de divisas y quitarle presión al dólar, pero ratificó que por ahora la prioridad del plan es erradicar la volatilidad económica y financiera, una manera diplomática de dar por tierra con las aspiraciones gremiales.

"La reunión fue una oportunidad para continuar el diálogo que comenzó en junio y escuchar las opiniones de los participantes sobre la economía, como también sobre las cuestiones laborales y sociales en Argentina. La misión espera profundizar aún más su diálogo con los sindicatos argentinos y reunirse con ellos nuevamente en el contexto de la próxima revisión", dijeron fuentes del organismo a iProfesional.   

Tensión por bono y paritarias

La reunión del ala dialoguista con el FMI transcurrió en simultáneo con el plenario de la Confederación del Transporte (CATT), en el cual se acordó la convocatoria a asambleas el martes 27 de noviembre entre las 4 y las 7 de la mañana, tres días antes del inicio de la cumbre del G20.

La medida será una suerte de paro “virtual” que tendrá su mayor impacto en el sector aeronáutico (los servicios se restablecerán recién a las 10), en donde la mayoría de gremios integra la CATT, pero también repercutirá en menor medida en el transporte de carga, puertos, colectivos y trenes. Piden cambios en Ganancias, paritarias libres y, al igual que la CGT, un aumento para los jubilados.

Pese a la tregua sellada por la central obrera, son varios los sindicalistas que buscan revisar sus paritarias. Los aeronavegantes liderados por el moyanista Juan Pablo Brey, arrancarán este viernes con retenciones de tareas por la mañana junto a los controladores de ATE para exigir la aplicación de la cláusula gatillo a los empleados de Aerolíneas, junto con la defensa de los empleos en Andes y una recomposición en Latam, entre otros puntos. Brey integra la CATT pero está enfrentado a los otros gremios del sector enrolados en la entidad que el viernes pasado paralizaron cerca de 200 vuelos por reclamos similares.

La negociación abierta de una suma extraordinaria en el ámbito estatal generó una fuerte inquietud en los organismos descentralizados y empresas a cargo del Estado, en donde por ahora no se contempla la aplicación del beneficio. Ese es de Aerolíneas Argentinas y los ferrocarriles Roca, Mitre, San Martín y Belgrano Sur.

“No está sobre la mesa sino que cada empresa del Estado está llevando adelante su propia discusión paritaria. Son todas muy variables, muchas tienen varios gremios y cada una es una discusión diferente”, explicaron fuentes oficiales a este medio.

Por el momento, habrá un refuerzo para los empleados de la administración nacional. En las últimas horas, UPCN salió a informar que la negociación de un extra de $5000 junto con la incorporación de $4.000 pesos remunerativos y bonificables al sueldo básico llevarán la suba global del año al 25%, pero ATE salió a rechazar el acuerdo por considerar que representa solo un 20% de recuperación para los salarios más bajos, cuando la inflación esperada superaría el 50%. Los empleados de las provincias, los municipios y a los docentes, en cambio, deberán negociar por su lado.