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"Si es por resultados económicos, todos los gobiernos argentinos tienen saldo negativo"

El jefe de Gabinete arrancó la cuenta regresiva y hace una autocrítica sobre su gestión, aunque destaca cómo elevó la vara el gobierno de Macri
30/11/2019 - 06:45hs
"Si es por resultados económicos, todos los gobiernos argentinos tienen saldo negativo"

El 10 de diciembre Marcos Peña habrá cumplido 1460 días como jefe de Gabinete. Así, a días de dejar el cargo, ya piensa en su nuevo rol en el poder.

"Me voy a correr de las decisiones políticas, no voy a tener un rol ejecutivo", dice la mano derecha del presidente Mauricio Macri.El ministro coordinador tiende puentes con la mirada puesta en el futuro. El desafío que viene es mantener la unidad de Juntos por el Cambio con el objetivo de volver al poder. Y, después del golpe de la derrota, de la cual asume parte de la culpa, lanza un mensaje para los socios del macrismo en clave electoral. "Todas las categorías en el 2021 y 2023 tienen que ir a internas", adelanta.

Peña piensa en los errores que cometieron y los aciertos, y asegura que dejaron la vara bien alta. Destaca que "Mauricio y Cristina Kichner son dos dirigentes que tienen una representatividad y una legitimidad muy importante" y se defiende por las críticas sobre la gestión económica: "Si es solamente por los resultados económicos todos los gobiernos argentinos tienen un saldo negativo", dijo en una entrevista a La Nación.

Además, le deja una advertencia a Alberto Fernández y su equipo: "Guarda con creer que son expertos en el Estado y que ya conocen la botonera. Cambiamos la botonera por un Ipad".

Sobre su responsabilidad en fracaso electoral, dice que la asume de la misma manera que asumía que decían que era el artífice de los triunfos, con tranquilidad y perspectiva. "No creo que sea así. Somos un equipo que ha logrado cosas importantes en la Argentina en los últimos 15 años, lo importante es tener equilibrio y humildad", asegura.

También dice que se hace cargo del resultado y reconoce que siempre está la tentación de buscar un culpable de los males. "Perdimos y eso implica no haber cumplido el objetivo, pero sacamos casi 41% de votos, tenemos 119 diputados, 28 senadores y un enorme futuro político", explica Peña.En cuanto a la economía, admite que no pudieron generar resultados en el día a día de la economía de la gente y en esas variables, que son las más sensibles como lo son la inflación y la pobreza, pero cree que avanzaron en muchos temas estructurales en los que era necesario avanzar y que hoy hacen que estén en una mejor situación que en 2015. Tipo de cambio competitivo, una balanza comercial superavitaria, y energía, que antes no tenían.

En cuanto a la pobreza, que también fue parte de sus objetivos y no se alcanzó, separa el tema en dos partes: una parte que tiene que ver con los ingresos y que está muy atado a la inflación. "Y en lo que tiene que ver con la inflación claramente no logramos los consensos económicos y políticos necesarios para poder salir de esta dinámica en las que estamos hace muchas décadas. Eso impacta directo en el indicador de pobreza", comenta.

Por otro lado, admite que hubo una sobreconfianza en que el mejor escenario iba a ocurrir, así se subestimaron dificultades locales e internacionales.

Consultado sobre su responsabilidad en el hecho de que haya vuelto, según lo que ellos dijeron, el gobierno más corrupto de la historia, Peña explicó que hay una idea subyacente, no siempre expresada con esa claridad, de que nuestra tarea era meter presa a Cristina, eliminar al kirchnerismo como fuerza política y ayudar a crezca una alternativa moderada.

Si bien era un reclamo de Cambiemos, explica que mucha gente lo pedía, pero eso era incoherente con una mirada de valores republicanos y de entender que son los ciudadanos los que eligen a los representantes y no al revés.

"Mauricio y Cristina son dos dirigentes que tienen una representatividad y una legitimidad muy importante. La responsabilidad que nos toca, en todo caso, es que no logramos construir una mayoría que permitiese continuar la tarea de transformación", afirma.En cuanto a la evaluación que tendrá la gestión de la cual formó parte, sostiene que será recordado como el Gobierno que ancló una referencia de una forma de gobernar distinta en la Argentina. Hay una valoración de Mauricio Macri como demócrata, en un país en el que hubo pocos demócratas. Una persona que promovió la paz y el diálogo, con errores y aciertos.

Tampoco acepta que se diga que su gobierno terminó mal. "Este es un gobierno que se va con 40% de aprobación, con dos millones de personas en la calle, que tiene un vínculo emocional y de afecto que hace que mucha gente que no vaya a comprar ese discurso", asegura Peña.

"Si uno tiene que ser evaluado por los resultados económicos solamente todos los gobiernos argentinos tienen un saldo negativo. A los argentinos le importan los valores, no es verdad que solo votan por el bolsillo. Eso tiene que llevar a la reflexión a todos porque la vara quedó muy alta", agregó.

Sobre el resultado electoral y quién es el dueño del 40% de los votos, el jefe de Gabinete expresó que no hay dueño de los votos, sino que la representación la elige el ciudadano, no el dirigente. "Si no estaríamos llenos de campeones del mundo que, de acuerdo a su autoestima, tendrían un montón de votos que después no los sacaron. Macri es parte de una categoría en sí misma, al igual que Cristina, de argentinos que llegaron a presidente", explicó.Sobre el futuro, dijo que Macri va a dar lugar a un montón de liderazgos que quieren crecer. El desafío número uno para Juntos por el Cambio pasa por la unidad como proyecto de poder con el objetivo de volver al poder.

¿No es un riesgo impulsar la marcha del 7 teniendo en cuenta el antecedente de la multitud en la 9 de Julio?, fue una de las últimas preguntas.

"El miedo es un mal consejero en política, si fuese por miedo no hubiésemos hecho ninguna marcha del "Sí se puede". Esta marcha nació en la gente, nosotros nos estamos sumando. No se trata de cantidad de gente ni de comparar. La marcha del 24-A fue más chica que la del Obelisco, pero fue más determinante", dijo contundente.

Sobre su futuro, Peña tomará un período de reflexión para analizar y procesar lo que viivó y hacer sy aporte político desde ese lugar. Se correrá de las decisiones políticas, y hará consultoría externa.

En cuanto al futuro gobierno, le desea lo mejor, asegura que la Argentina entra en una etapa inédita de bicoalicionismo en lugar de bipartidismo. Son dos coaliciones que tienen la enorme proporción de la representación y ninguna teniendo todo el poder. Es una enorme oportunidad para encarar una democracia negociada. El que gobierna será Alberto Fernández, y cómo administre su relación interna será un tema de él.

También concluyó que en un futuro político se reunirán con todos los dirigentes, y que todas las categorías en el 2021 y 2023 tienen que ir a internas. La competencia tiene que estar totalmente abierta para mantener la unidad. Tiene que generarse un espacio de competencia.