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Guzmán viajará a Washington para negociar el ajuste: los riesgos que enfrenta el ministro

Es probable que la negociación sea más dura de lo que el gobierno preveía el año pasado cuando presentó el Proyecto de Presupuesto 2022
17/11/2021 - 18:05hs
Guzmán viajará a Washington para negociar el ajuste: los riesgos que enfrenta el ministro

Por lo general en las elecciones primarias los oficialismos a nivel nacional, provincial y municipal han exagerado las victorias. Pero, por primera vez, el domingo pasado hubo un oficialismo que festejó como un triunfo una derrota electoral. El presidente Aborto Fernández invitó a la ciudadanía a festejar la derrota del Frente de Todos frente a Juntos, en la Plaza de Mayo.

Este espíritu de triunfalismo en la derrota es un mal antecedente frente a la probable nueva renegociación del acuerdo con el FMI que encarará el ministro Martín Guzmán que probablemente viaje a Washington este fin de semana o la semana próxima.

Aquí surge una gran duda: ¿cómo hará el presidente Alberto Fernández para convencer a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, y a los votantes del Frente de Todos, que ese ajuste que pide el FMI será para mejorar el futuro de la economía y de cara a las elecciones en el 2023?

El Frente de Todos perdió el domingo más de 5.000.000 de votos con respecto a la elección presidencial de 2019. Es un gobierno que en menos de dos años perdió el 40 por ciento de los votos.

El problema es que, por ahora, la gran discusión respecto de quién es el responsable de las recientes derrotas en las PASO y en las elecciones del domingo pasado no se ha resuelto.

"Si perdimos 5 millones de votos en dos años y volvemos a perder lo mismo en dos años más, nuestra perspectiva de supervivencia está muy puesta en peligro por la gestión de este gobierno", explica un intendente de los ganadores del FdT a iProfesional y agrega que "el centro del problema nuestro es que en estas condiciones no sabemos si es viable o no el ajuste que nos va a pedir el FMI".

Guzmán viajará este fin se semana o la próxima a Washington para negociar con los técnicos del FMI un ajuste de la economía argentina que hoy luce mucho peor que el 20 de septiembre pasado cuando el ministro presentó el Proyecto de Presupuesto Plurianual 2022.

Ese fue el nombre que utilizó el funcionario en el Congreso de la Nación en la presentación del mismo.

Existe el peligro de que cuando se cierre la renegociación con el FMI, Guzmán anuncie una especie de triunfo de Argentina frente al ajuste que pedía el organismo.

Guzmán viajará este fin se semana o la próxima a Washington para negociar con los técnicos del FMI 

Es probable que la negociación sea más dura de lo que el Gobierno preveía el año pasado cuando presentó ese Proyecto de Presupuesto 2022.

Guzmán y Sergio Chodos, el director argentino ante el FMI, son quienes llevan a cargo las negociaciones y los principales responsables de que Argentina esté pagando muy caro el costo de no cerrar el acuerdo.

Eso se puede ver al analizar las reservas internacionales líquidas netas del BCRA que de acuerdo a los distintos cálculos de las consultoras del mercado están entre menos 2.000 millones a más de 2.000 millones de dólares de acuerdo al criterio que se utiliza para calcularlas.

Ambos deberían comprender que, pese al mayor superávit comercial de la historia y la llegada de la ayuda de u$s 4.300 millones del FMI, las reservas caen.

Esto es consecuencia de las ventas de dólares que realiza el BCRA en un mercado cambiario oficial y sus intervenciones en los mercados de dólar CCL. Una especie de mercado cambiario ciclotímico porque el BCRA ha vendido dólares en momentos que podría comprar y compró en algunas oportunidades que debía vender.

Con el agregado que es el único mercado cambiario del mundo donde operan más de 15 variedades de dólar distintas.

Guzmán debería pensar que, ante esta dinámica que muestra la política, la economía y el mercado cambiario, tal vez no sea en el futuro el encargado de cerrar la negociación si la economía se complica.

Para ser claros: el FMI ya le dijo al Gobierno qué es lo que quiere para refinanciar los u$s45.000 millones de dólares que la Argentina debe pagar desde el 22 de diciembre próximo, unos u$s 1800 millones y tal vez pida un waiver hasta que se cierre el nuevo acuerdo.

El FMI se refirió el lunes al anuncio realizado por el presidente Alberto Fernández con respecto al proyecto de ley al Congreso que incluya el entendimiento entre su gobierno y el staff del organismo.

"Continuamos trabajando para lograr un entendimiento pleno sobre un plan integral que pueda abordar de manera duradera los desafíos económicos y sociales más urgentes de Argentina, incluida la alta inflación, que perjudica de manera desproporcionada a los más vulnerables", señaló un vocero del organismo internacional".

Y agregó además que "es importante que este plan cuente con un amplio apoyo político y social. Nuestro objetivo sigue siendo ayudar a Argentina y su gente".

Luego de que se conociera el resultado de las elecciones legislativas 2021, el presidente Alberto Fernández difundió un mensaje grabado en donde confirmó que en los próximos días convocará a la oposición para consensuar una agenda de trabajo y anticipó que en diciembre enviará al Congreso un proyecto de "Programa económico plurianual para el desarrollo sustentable", que contendrá los entendimientos alcanzados hasta el momento con el FMI.

De acuerdo a lo pudo averiguar iProfesional, de fuentes cercanas al Gobierno, la base de ese plan es el Proyecto de Presupuesto 2022 que Guzmán presentó en el Congreso de la Nación el 22 de septiembre pasado.

El mismo prevé para el próximo año un crecimiento del PBI de 4%, una inflación de 33%, un déficit fiscal primario sin contar los intereses de la deuda de 3,3% del PBI con un déficit financiero del 4,9%.

El crecimiento estimado para 2021 es ahora de 8% (el proyectado un año atrás era 5,5%).

La inflación llegará a diciembre con un alza 45,1%, un meta macro de precios muy por encima del 29% calculado hace doce meses. El dólar cerrará el año que viene en $131,1 y el salario real con un alza de 4% (38,3% nominal).

El superávit comercial del año que viene sería de u$s 9.323 millones, según lo estimado por el equipo técnico del Ministerio de Economía, en un contexto de "restricción externa" y cepo cambiario.

También considera un aumento de las tarifas de los servicios públicos que aumentarán, pero no se explicita cuánto. Pero con la caída de la resolución 46 (subsidio a la producción de gas) el peso de los subsidios en el PBI bajará automáticamente a 1,8 puntos del PBI, según calculan en Economía. Las subas segmentadas rebajarían ese peso a 1,5 puntos.

Esa segmentación es un proyecto que quería llevar adelante Guzman a través del subsecretario de Energía Eléctrica, Federico Basualdo. El funcionario que el ministro quiso echar del Ministerio y no pudo por su pertenencia a La Cámpora y las tarifas están congeladas.

Peligro absoluto de negociar un ajuste con el FMI con espíritu triunfalista: dólar, emisión, tarifas y subsidios

La novedad es que el proyecto de Presupuesto 2022 no contempla ningún pago de capital al FMI, ya que en ese entonces el ministro daba por descontado que el Gobierno lograría un acuerdo para postergar los pagos por u$s 18.000 millones que tiene que pagar el próximo año.

Guzman calificó el proyecto de presupuesto como el "corazón de la política económica" del Gobierno. Explicó en esa presentación del 20 de septiembre pasado que "la ley enviada a los legisladores no contempla nuevos impuestos ni más aumento de la presión tributaria y que tampoco volverá a estar en 2022 el impuesto a la riqueza".

En ese aspecto surgen muchas dudas. Una de las posibilidades que tiene el gobierno para aumentar los ingresos fiscales que pedirá el FMI, es volver a cobrar ese impuesto por el que recaudó este año más de 300.000 millones de pesos.

Es probable que ese Proyecto de Presupuesto 2022 deba ser modificado por el equipo económico ya que cuenta con muchas variables que no están alineadas:

  • 1. Ese proyecto no considera el pago de unos u$s 18.000 millones de deuda con el FMI que vence ese año, por lo tanto da por descontado que el acuerdo está cerrado el año que viene.
  • 2. Se considera una inflación anual del 39 por ciento mientras que las proyecciones del REM del BCRA dan que la inflación este año cerrará por encima del 50 por ciento y para el año próximo en el 45 por ciento.
  • 3. El déficit fiscal primario calculado en ese presupuesto era de 3,3 puntos del PBI mientras que para el año próximo la mayoría de las consultoras proyectan un déficit de 5,5 puntos del PBI.

Una de las palabras que menos le gusta mencionar al presidente Alberto Fernández es la palabra "ajuste", por lo que desde que asumió la evita pronunciar.

Pero si el mandatario se compromete políticamente y económicamente a cerrar la renegociación con el FMI, es probable que la Argentina debe pasar por un fuerte ajuste de su economía.

El economista Miguel Kiguel sostiene que "el acuerdo con el Fondo no se puede hacer sin cambios en la política económica" y eso requiere definir "cómo se hace para reducir el déficit fiscal, cómo se hace para ganar reservas o cómo se hace para bajar la brecha".

Kiguel agregó que "para encaminar y cerrar las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) se debe tener un horizonte definido, porque la verdad es que el día después lo encuentra al Gobierno teniendo que resolver los mismos problemas que tenía que resolver antes: inflación, brecha cambiaria, falta de reservas y de acceso al crédito, la pobreza, el crecimiento".

Además, explicó que el Presidente debe "decidir si seguirá haciendo desajustes económicos, como lo está haciendo con los precios o qué va a pasar con la economía. Yo creo que todavía no sabemos en qué camino se va, pero hay que considerar que este acuerdo no viene gratis, y no viene en la dirección que está diciendo el gobierno, sino que va a implicar ajuste".

Es probable que las medidas sean muy antipáticas, pero son las que tiene el manual del FMI para enderezar la economía de un país.

Un sinceramiento del mercado cambiario con una devaluación ordenada del peso y sin control de cambios, un freno a la mega emisión de pesos del BCRA para dejar de financiar el déficit fiscal y frenar la inflación, una fuerte reducción del gasto público, un importante aumento de los impuestos, una suba de los precios de las tarifas de luz y gas y de los combustibles que los técnicos del FMI consideran que están muy atrasados y que resuelva su problema de endeudamiento en particular con el FMI.

Con respecto a este último punto hay que mencionar que, de acuerdo a la información brindada por el ministerio de Economía, el gobierno aumentó la deuda pública en unos 35.000 millones de dólares.

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