Rosendo Fraga: "Muchos errores se han cometido por dar por terminada a Cristina Kirchner"
El analista político Rosendo Fraga se mostró escéptico al creer que el ciclo de la vicepresidenta Cristina Kirchner "está terminado". "Muchos errores de predicción política en la Argentina se cometieron en los últimos años por darla por terminada", resaltó.
Fraga fue consultado sobre el destino de la vicepresidenta en base a los dichos de la diputada de Juntos por el Cambio, Mariana Zuvic. La legisladora aventuró la "muerte política" de la vicepresidenta en base a su imagen y figura actual. "El final de ella (Cristina Kirchner) va a ser real y definitivo", sostuvo.
Sin embargo, para el analista político no ocurrirá de la misma manera. Tras remarcar que la expresidenta no cumplió con su ciclo político, opinó que "ella está demostrando una eficacia como líder político notable" e insistió en la necesidad de "diferenciar lo que a uno le gusta de lo que es".

"Cristina Kirchen perdió imagen como el grueso de los dirigentes del oficialismo pero mantiene una cuota de poder, que es sentar agenda", sostuvo Fraga, a diferencia de Zuvic, quien precisó que Fernández de Kirchner se encuentra bajo "una pérdida de poder absoluta" y que, poco a poco, "va a ser aislada del peronismo".
Algunas diferencias
Sin embargo, Fraga realizó una distinción que llevaría a un quiebre. "Los conflictos existentes podrían terminar con todo eso", dijo y procedió a enumerarlos: "Hay conflicto institucional. Está el Ejecutivo por un lado, la Corte Suprema por el otro y el Congreso en el que nadie tiene mayorías".
"También, hay un conflicto político por liderazgo, entre el presidente [Alberto Fernández] y la vicepresidenta", añadió, y completó: "Por último, un conflicto institucional. Por ejemplo, acatar o no acatar una decisión del Máximo Tribunal de Justicia es algo institucional. Todo esto tiene un costo".

En las últimas instancias del diálogo televisivo en Comunidad de Negocios, por LN+, el analista político se pronunció de cara a las elecciones presidenciales de 2023. Ante una potencial fractura y división del Gobierno en instancias electorales, pronosticó: "En política, no hay impensables. Hay improbables o probables. Yo diría que esto puede pasar".
Fraga extrapoló el ejemplo a la oposición al decir que "es algo que puede pasarles a otros también". "La Argentina está en momentos de ebullición, son momentos difíciles para todos", calificó.
El analista cerró la entrevista con un diagnóstico sobre lo que ocurriría en las urnas. "Me preguntas hoy quien va a ser el próximo presidente y te digo que no sé. Realmente, no sé que puede suceder. Pero hay algo que está claro y es que nuestro país quiere un cambio. La gente está frustrada y, mirando el escenario político, el futuro parece estar más cerca de la oposición que del oficialismo".
Las órdenes de Cristina
Cristina Kirchner considera que Alberto Fernández tiene "cosas para hacer". Por lo menos la adopción de cinco medidas que la vice cree que resultan clave para sostener la actividad económica. La condición que cree necesaria para que el oficialismo gane las elecciones del año que viene.
Algunas de las propuestas chocan directamente con el plan que, por ahora, sostiene el Presidente: el cumplimiento de lo acordado con el FMI. Éste es el camino que Alberto Fernández se comprometió a seguir hasta el final de su mandato.
En cambio, la vicepresidenta mantiene la idea de que si la Argentina se enrola en el plan firmado con el Fondo, la crisis se profundizará rápidamente. Obviamente, pretende desligarse de ese eventual fracaso.
Por eso deja trascender, a través de economistas afines, un conjunto de medidas que la Casa Rosada debería poner en marcha más temprano que tarde. Augusto Costa, uno de los economistas preferidos de Cristina, que es mano derecha de Axel Kicillof en la provincia, expuso con toda crudeza la disconformidad de los referentes del kirchnerismo. "Hay que tener voluntad política para generar respuestas. No se puede decir que el mercado es así y la economía es así", dijo Costa.
Qué medidas le exige Cristina Kirchner al Presidente
Son cinco aspectos que Cristina le exige al Presidente.
1. Impuesto a la renta extraordinaria para financiar IFE: Por ahora, se trata de la única que cuenta con el aval de Fernández. Aunque en ninguno de los lados de la grieta interna muestran un borrador sobre los detalles.
La idea es que el Estado, como sucede con las retenciones, se apodere de una parte del precio de las materias primas que exporta la Argentina. Lo que habría que ver es el porcentaje de ese adicional que ahora se buscaría recaudar para poner en marcha un nuevo IFE (Ingreso Familiar de Emergencia), tal cual existió al comienzo de la pandemia, hace dos años.
2. Bono para empleados para compensar inflación: Va en contra de lo sugerido desde el Gobierno. En vez de poner las fichas a las paritarias -el Gobierno acaba de consensuar un adelantamiento de las negociaciones con sindicatos y patronales-, desde el kirchnerismo reclaman una compensación urgente por la inflación acumulada en los primeros meses del año.
El argumento es que sólo una porción de los trabajadores tiene la posibilidad de mejorar sus ingresos a través de una paritaria -aquellos que están en la formalidad-, y que entonces es necesario dar una señal para el resto. En el inicio de su mandato, Alberto Fernández sacó un decreto para darles un bono a los estatales e invitando a las empresas privadas a hacer lo mismo. Es lo que reclama ahora Cristina. Desde el kirchnerismo reclaman una compensación urgente por la inflación acumulada en los primeros meses del año
3. Bono para beneficiarios de la AUH: La semana pasada, el Gobierno anunció una mejora del 50% para la Tarjeta Alimentar, que reciben cuatro millones de mujeres. Fue una actualización por la inflación del último año. Esa tarjeta sirve exclusivamente para comprar alimentos.
Sin embargo, la AUH quedó afuera de esa mejora. El beneficio, como las jubilaciones, se actualiza cada trimestre. La última vez fue en marzo, el 12,3%. Hasta junio no habrá otra suba. Sin embargo, los jubilados y pensionados de la "mínima" recibieron un bono de $6.000 que comenzaron a cobrar antes del feriado largo de Semana Santa. Los beneficiarios de la AUH no recibieron ningún adicional, con lo cual la pérdida contra la inflación será cercano a los diez puntos.
4. Más acuerdos de precios y fijación de "Precios Máximos": Kicillof marcó el camino la semana pasada, con un anuncio en la localidad de Ensenada, junto al secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti. Además de la construcción de mercados comunitarios, el gobernador dijo que se potenciará el relevamiento y fiscalización de precios de las canastas que establezca el gobierno nacional. "Son ley y la vamos a hacer cumplir", prometió.
"Digo que hay instrumentos porque me tocó con Cristina ser ministro de Economía y trabajar para alinear las variables básicas de forma tal que los consumos de los sectores populares y medios se sostuvieran y no se vieran afectados", completó el gobernador. Los "precios máximos" funcionaron entre marzo y diciembre de 2020, el primer año pandémico, como forma de contener la suba de los precios de los alimentos mientras la gente tenía serias dificultades para seguir trabajando con normalidad.
Ahora es diferente: la actividad económica volvió a la normalidad. Pero Cristina Kirchner cree que los acuerdos de precios y el congelamiento por un tiempo determinado pueden ser un arma poderosa para equilibrar las cosas hasta que termine la guerra y, se supone, los precios internacionales vuelvan a estabilizarse.
5. Más emisión de pesos para financiar ayuda social: Los economistas kirchneristas sostienen que, en medio de la incertidumbre y el salto de los precios internacionales por la guerra, el acuerdo con el FMI es incumplible. De hecho, lo dijo el propio Feletti cuando directamente manifestó que era "letra muerta".
En ese contexto, la salida es que el Gobierno no puede cumplir con el mandato de emisiín de apenas 1% del PIB. Y que el financiamiento de parte del paquete deber ser a través de una mayor emisión monetaria.