El Senado aprobó a mediados de mayo una iniciativa que fue girada poco después a la Cámara de Diputados. Desde entonces la iniciativa para crear un fondo para pagarle al FMI, presentada por el senador Oscar Parrilli, avanzó y desde junio tiene dictamen de mayoría para llegar al recinto. Ahora podría salir del sueño eterno a partir del acuerdo que esta por firmar la AFIP con su homólogo IRS de los Estados Unidos para perseguir a todos los argentinos que tienen bienes en ese país y no lo han declarado al fisco.

Tal como contó iProfesional, el acuerdo de intercambio de información tributaria está por ser rubricado entre la semana próxima y el 2 de diciembre para que empiece a regir desde el primer día hábil del año que viene.

Le permitirá a la AFIP contar con acceso a esos datos de forma automática y, de acuerdo a los cálculos que manejan en el Palacio de Hacienda, duplicar la base imponible que tiene el organismo fiscal que conduce Carlos Castangeto.

La rúbrica del acuerdo no vendrá sola, sino con una oportunidad para que los evasores con bienes en Estados Unidos puedan acogerse a un nuevo blanqueo que les permita evitar castigos fiscales, aunque el motor para garantizar ese nivel de adhesión dependerá de que prospere el trámite que lleva seis meses sin ningún movimiento.

El dictamen es de fines de junio y hay dos de minoría, uno de rechazo impulsado por Juntos por el Cambio y otro diferente redactado por la diputada Graciela Camaño, del bloque Identidad Bonaerense.

Esa multiplicidad de iniciativas refleja dos datos del derrotero legislativo: que es una reforma fiscal de alto calibre que desata polémicas con la oposición y que el oficialismo no cuenta con los apoyos suficientes para llevarlo al recinto y transformarlo en ley.

El proyecto le permitirá a la AFIP contar con acceso a esos datos de forma automática

El proyecto que saldría del cajón si AFIP firma el acuerdo con EE.UU.

El dictamen de mayoría fue posible con el respaldo de Diego Sartori, del Frente de la Concordia Misionero, uno de los aliados del oficialismo, que integra el interbloque Provincias Unidas. Tiene cuatro voluntades que se sumarían a las 117 que tiene el oficialismo. Le faltan, al menos, ocho respaldos que hasta ahora no aparecen fáciles de conseguir.

Sin embargo, con el acuerdo firmado con el IRS el debate parlamentario puede reactivarse. Hay que ver cómo y con qué argumentos el oficialismo puede relanzar la negociación con los aliados esquivos y si aparece algun matiz dentro de Juntos por el Cambio, aunque difícilmente alguna banca se salga del mantra electoral que, en forma de promesa, reza que no apoyarán ningún aumento de impuestos.

En el caso de Camaño, también hay una crítica de forma. Sostiene que es un nuevo impuesto y que debería haber sido iniciado su trámite en Diputados, que es la cámara originaria para temas tributarios, y no en el Senado.

Las 41 firmas que tiene el dictamen de junio son la base del poroteo que podría ponerse a prueba durante diciembre. El texto crea un Fondo que recibirá la recaudación de "un pago que se aplicará sobre los bienes situados y/o radicados en el exterior que se localicen o detecten desde la entrada en vigencia de la ley y no hayan sido declarados ante la AFIP".

Esos bienes tendrán que pagar un aporte del 20% de sus bienes no declarados y tendrá que ser cancelado en dólares. Si los evasores declaran los bienes seis meses después de la promulgación de la norma, la alícuota crece del 20% al 35%.

También incluye otro elemento que, con la aprobación del acuerdo entre la AFIP y el IRS, tendrá otro peso, ya que incluye el sistema de delación premiada que se utiliza en Estados Unidos, a partir de la figura del "whistleblower". En inglés significa soplón o aquél que sopla el silbato.

En el horizonte no aparecen señales de que prospere un intento para llevar el dictamen de mayoría al recinto de Diputados

El camino del proyecto en Diputados

En el texto de Parrilli aparece detrás de la figura del "colaborador", definido como "cualquier individuo, sea persona humana o jurídica, residente en el país o en el extranjero, que actuando en forma personal o conjuntamente, proporcione información relacionada con una violación de las leyes impositivas y de lavado de activos".

La delación tendrá un premio: se pagará el 30% del monto total que la AFIP haya podido recaudar. La iniciativa define que se considerará como acreditada la información siempre y cuando no sea menor al medio millón de dólares (500.000) en efectivo o bienes no declarados.

Por ahora en el horizonte legislativo no aparecen señales de que prospere algun intento para llevar el dictamen de mayoría al recinto antes de fin de año. En Economía ya confirmaron que tienen ese texto en el radar y la movida permitiría que, como mínimo, el oficialismo avance unificado para sumar aliados.

Algunas fuentes del Frente de Todos sostienen que los términos de la discusión cambiarían si se firma el pacto con Estados Unidos. En el Palacio de Hacienda lo dan por hecho. Si la rúbrica se concreta, la pelota estará en la cancha del oficialismo para que defina cómo jugará un hito tributario que hace seis meses la oposición consideraba "imposible".