Con fuertes críticas a Scioli y al Presidente, el kirchnerismo aceptó las PASO: el oficialismo se llamará Unión por la Patria
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En el cierre del plazo para inscribir a las alianzas de cara a las elecciones primarias (PASO) el oficialismo decidió dejar de llamarse Frente de Todos y el nombre elegido es Unión por la Patria. La definición se tomó en medio de la negociación en la que el kirchnerismo terminó por aceptar las reglas para la competencia interna que propuso Daniel Scioli, aunque el clima quedó caldeado.
Con el presidente Alberto Fernández en la vereda opuesta a la vicepresidenta Cristina Kirchner y el ministro de Economía, Sergio Massa, la coalición oficialista empezó a madurar la decisión del cambio de nombre el último martes, cuando la idea de eliminar la palabra "Todos" de la marca electoral cobró fuerza.
La decisión de cambiar el nombre del frente electoral responde a que la marca Frente de Todos estaba, a criterio de distintos sectores del oficialismo, desgastada por los cuatro años de una gestión sumergida en una crisis económica y cruzada por las fuertes peleas internas.
De la misma manera que Cambiemos pasó a llamarse Juntos por el Cambio en 2019, cuando el entonces presidente Mauricio Macri intentó ser reelecto, lo que se intenta es refrescar la marca electoral para tomar una distancia simbólica del gobierno en curso al momento de afrontar la pelea electoral.
Al cambio en la marca de la coalición le siguió el acuerdo sobre el reglamento interno para la competencia en las PASO que el eje kirchnerismo-massismo intenta evitar pero hasta ahora no puede, debido a la resistencia de Scioli y su precandidata a gobernadora bonaerense, Victoria Tolosa Paz, a abandonar la carrera.
El oficialismo cambia de nombre y Scioli se planta ante las presiones internas
Más allá del nombre que tendrá la alianza oficialista en las boletas, el punto más importante de la negociación fue el reglamento para establecer el "piso" de votos que se debe alcanzar en las PASO para meterse a la lista final. A partir de allí, el Sistema D’Hont establece el reparto de los lugares para diputados y concejales.
En esa discusión apareció Scioli de un lado, con un apoyo indirecto del Presidente y con el ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, como apoderado de su línea interna, mientras del otro estuvieron Massa y Cristina Kirchner, junto al líder de La Cámpora y del PJ bonaerense, Máximo Kirchner. Este sector todavía no tiene un candidato presidencial definido y tiene tiempo hasta el 24 de junio para confirmarlo.
Desde principios de la semana el kirchnerismo dejó trascender que quería un piso de 40%, muy superior al 25% que, según explicó el apoderado del partido, Eduardo López Wesselhoefft, suele aplicar el PJ. En el ala albertista-sciolista leyeron esa propuesta como un intento de forzarlos bajarse de la competencia. Aníbal Fernández amenazó con judicializar el tema.
En ese contexto, Scioli y Tolosa Paz se plantaron. "En la carta orgánica se habla de un piso del 25%. Y nosotros creemos en ese piso", indicó la ministra de Desarrollo Social en Casa Rosada y agregó: "Pero escriban el reglamento que escriban, nosotros vamos a ser precandidatos, y vamos a explicar el programa de gobierno y las ideas que tengamos".
Finalmente, hubo acuerdo y el piso se estableció en 30%, algo más cercano a lo que quería Scioli. El encargado de comunicarlo fue el PJ bonaerense que preside Máximo Kirchner, dado que es en ese distrito donde se centra la discusión.
Sin embargo, el entendimiento fue a regañadientes, como lo dejó en claro el PJ bonaerense al acusar al "sector encabezado por Daniel Osvaldo Scioli y Alberto Ángel Fernández" de incurrir en una "victimización artificial", al tiempo que mostró su molestia por la amenaza de recurrir al "Partido Judicial", como lo llama el kirchnerismo.
Un acuerdo cargado de tensión entre Scioli y el kirchnerismo
El PJ bonaerense que lidera Kirchner remarcó que Scioli rechazó sus propuestas para el reglamento interno y no dudó en pegar al ex gobernador bonaerense con Alberto Fernández, lo que confirmó la pelea.
Tras resaltar la tesis de que "quien mayor consenso genera hacia adentro y hacia afuera del peronismo se encuentra proscripta", el kirchnerismo informó que aceptó la propuesta de Scioli, pero remarcó: "Llama la atención la especial dedicación que han puesto en la discusión sobre 'un diputado nacional más o uno menos'.
"La victimización artificial generada en relación a la 'democratización del peronismo' resulta un recurso semántico mediocre que no hace más que alimentar a quienes quieren la desaparición del peronismo, la estigmatización y proscripción de Cristina Fernández de Kirchner", disparó el sector.
Por si fuera poco, también le apuntaron a la gestión de Fernández. "Ojalá hubieran puesto la misma dedicación y esfuerzo en recuperar el poder adquisitivo de ciudadanos y ciudadanas, en la administración de las reservas del Banco Central o en el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, que quedó muy lejos de las bondades que el Presidente anunciara una mañana de enero de 2022".
La tensa negociación por las PASO
En el medio del tironeo entre ambos sectores estuvo Gildo Insfrán, el gobernador de Formosa designado por el PJ nacional como único encargado de firmar la alianza que se presentará ante la Justicia Electoral.
La pelea por el piso de votos para las PASO se debe a que, si se subía mucho más del 25%, el sector de Scioli -más débil que el kirchnerismo y el massismo juntos- hubiera tenido mayores dificultades no solo para meter diputados en la lista final, sino también para contar con dirigentes que le dieran apoyo.
Y es que los dirigentes que buscan ser diputados o concejales no tendrían incentivo para formar parte de una lista que corra el peligro de no alcanzar el piso establecido en las primarias.
"Si explota todo, es por el lado del albertismo, Scioli y su tropa, pero que hay bardo con la letra chica, hay", había afirmado un operador del oficialismo consultado por iProfesional. Finalmente, el espacio oficialista no explotó en lo formal, pero sí en los hechos. La rivalidad que quedó planteada es total.
Esa rivalidad, hasta ahora, se canalizará en las PASO. Y es que la decisión de Scioli de plantarse y la aceptación por parte del kirchnerismo de las reglas muestran que el eje Cristina-Massa no puede hasta ahora evitar que la candidatura presidencial se dirima en una interna. Por el momento, nadie ve posibilidad de que aparezca la lista única que reclamó Massa durante semanas.
La PASO tendría a Scioli de un lado y al candidato que reciba el ok de Cristina Kirchner del otro. Eduardo "Wado" de Pedro busca ese lugar y Massa parece cada vez más lejos, pero la alquimia por la que se decantará la ex presidenta es impredecible para propios y extraños.
El otro lanzado es el jefe de Gabinete, Agustín Rossi. Del lado de Scioli esperan poder sumarlo a su armado cuando llegue el momento de confirmar las candidaturas.
Firmas en la sede del PJ: ¿qué partidos integran la alianza Unión por la Patria?
La sede del PJ nacional de la calle Matheu del centro porteño es el lugar por el que desfilaron los titulares de los distintos partidos que integran el hasta ahora llamado Frente de Todos y donde se llevan a cabo las negociaciones sobre las reglas de juego.
Por allí pasaron a estampar su firma los representantes de Forja; Unidad Popular; Patria Grande, de Juan Grabois; el Partido Conservador Popular; el Partido Intransigente; el Partido Comunista y el Partido de la Victoria, entre otros.
Muchos de los dirigentes que se acercaron a la sede justicialista dejaron su adhesión al frente antes incluso de conocer el nuevo nombre Unión por la Patria, una muestra de que la denominación no es lo más importante. Lo central es el acuerdo entre los sectores en pugna.
No obstante, a 10 días del cierre de las listas tampoco se conoce la totalidad de los candidatos. Lo que todos en el oficialismo esperan saber como lo que realmente importa es quién será el elegido de Cristina Kirchner, la dirigente con mayor peso de votos dentro de la alianza, y cuántos serán finalmente los que irán a las PASO.