Junto al presidente Javier Milei, la ministra de Seguridad Patricia Bullrich presentó el proyecto del nuevo Código Penal, que busca imponer "tolerancia cero". Entre los puntos más destacados, la funcionaria subrayó el agravamiento de penas para distintos delitos, como así la imprescriptibilidad para otros más graves.
También reiteró la intención de bajar la edad de imputabilidad a 13 años.
Estos fueron los principales puntos que mencionó Bullrich al presentar el nuevo Código Penal:
"La pena por homicidio simple aumenta de 10 a 30 años".
"Penas perpetuas para los barrabravas en lugares masivos donde ponen en riesgo la vida de todos, como estamos viendo en tantos lugares del mundo".
"Incorporamos completamente laley anti mafias y la ley anti barras".
"Se condenará la portación de armas. La sola portación va a tener una pena no excarcelable. Y si la persona tiene antecedentes, va a ser un agravante. También el uso de armas blancas".
"Para los policías, ampliamos el concepto de legítima defensa para el cumplimiento del deber y legítima defensa en algunos casos".
"El hurto en nuestro país era una vergüenza: ahora va a haber una pena de hasta tres años. El robo era un mes y hasta tres de mínima".
"El que roba y es motochorro, va a ser un agravante: va a tener una pena de hasta 15 años. Ahora las van a pagar", subrayó.
"También se agravan los robos y hurtos para teléfonos celulares. Lo que más se roba en el país. Carteras, portafolios, mochilas. Te vas a quedar adentro de tres a 12 años", señaló.
"Los delitos como entraderas, estafas piramidales o viudas negras. La pornovenganza, eran contravenciones. Ahora son delitos graves"
"La usurpación: antes pasaban años antes de que el dueño pudiera recuperar su inmueble. Ahora va a ser inmediato", agregó la Ministra.
"Ahora los delitos graves serán imprescriptibles: homicidios o abuso sexual, la corrupción de menores, la explotación sexual de menores, la trata de personas, los secuestros extorsivos. Se los persigue de por vida. A los 10 años no se salvan más".
También dijo que el Gobierno busca bajar la edad de imputabilidad a los 13 años