Caputo defendió las bandas cambiarias ante empresarios, pero advirtió: "No nos agrandemos"
En medio de las versiones sobre posibles ajustes en el esquema cambiario, el ministro de Economía, Luis Caputo, volvió a respaldar la estrategia oficial de mantener una flotación entre bandas.
Lo hizo durante la 31ª Conferencia de la Industria, organizada por la Unión Industrial Argentina (UIA) bajo el lema "El futuro se produce hoy", en el Centro de Convenciones de Buenos Aires.
"Hay que graduarse primero antes de flotar libremente. La mayoría de los países no flota libremente, no flota nadie. No nos agrandemos tampoco, porque ya nos pasó en el pasado que intentamos flotar y no estaban las condiciones y cuando tenemos un shock tenemos que poner cepo", señaló el ministro frente a empresarios, funcionarios y economistas.
Caputo defendió el control cambiario y pidió prudencia: "Hay que graduarse antes de flotar"
Caputo sostuvo que la estabilidad monetaria aún es frágil y que liberar completamente el mercado podría generar nuevas tensiones. "Cuando las cosas empiezan a ir mejor queremos correr más rápido de lo que nos dan las piernas", dijo, en alusión al debate sobre si mantener o eliminar las bandas cambiarias.
Caputo advirtió sobre la fragilidad en la demanda de pesos, que —según precisó— se reflejó en los últimos meses, cuando más del 40% del M2 privado se dolarizó.
Y agregó: "Para el que todavía no está convencido con todo esto: el mercado de cambios nuestro está operando u$s200 millones por día. Pero si alguien cree que se puede flotar libremente, en un mercado que lo hace en u$s90 millones, u$s200 millones por día, creo que nunca operaron un mercado".
También defendió la política de acumulación de reservas y aclaró que las compras del Gobierno no se ven reflejadas en las arcas del Banco Central porque se destinaron al pago de deuda externa. "Fuimos a Estados Unidos a garantizar el pago de los próximos años (...). Vamos a acumular reservas y más de lo que cualquiera puede estar pensando", afirmó.
Caputo advirtió, además, que el Gobierno no busca intervenir comprando dólares con pesos excedentes, ya que eso obligaría a una esterilización que generaría "un déficit cuasi fiscal fenomenal".
El contexto: actividad en baja y reclamos empresariales
La conferencia se realizó en un clima de caída en la producción industrial, aumento de importaciones y cuestionamientos al denominado "costo argentino". La nueva conducción de la UIA, encabezada por Martín Rappallini, reiteró los pedidos de siempre: mejorar la infraestructura, reducir la presión tributaria y facilitar la inversión.
Caputo reconoció que la economía sufrió un freno "a partir de los ataques que sufrimos en el Congreso", aunque se mostró optimista: "La parte positiva de esto es que después de las elecciones parece haber habido una recuperación fenomenal, esperamos un tercer trimestre bastante positivo y para el año que viene una proyección optimista", indicó.
Expectativas del sector y señales políticas
Previo al discurso del ministro, los empresarios esperaban anuncios específicos para la industria, similares a los realizados en otros sectores. Si bien el presidente Javier Milei no participó por cuestiones de agenda, envió como representantes a Caputo y al ministro del Interior, Diego Santilli, en lo que fue leído como un gesto de acercamiento con la UIA tras meses de tensión.
Caputo, por su parte, destacó el nuevo escenario político que se abrirá tras las elecciones legislativas: "Se combina un factor económico, social y finalmente uno político porque el 10 de diciembre vamos a tener un cambio de Congreso que nos va a permitir tener un Congreso alineado con lo que la gente votó", sostuvo.
"El futuro se produce hoy": el llamado de la industria
La apertura del evento estuvo a cargo de Martín Cabrales, quien instó al empresariado a asumir un rol activo en el proceso de transformación productiva. "Es el momento donde más tenemos que apostar", afirmó.
Cabrales remarcó que el país atraviesa "un momento bisagra" y que existen condiciones inéditas para que la industria lidere el cambio. "El futuro se produce hoy, vivimos un momento de cambio, un momento bisagra en la Argentina. Tenemos una gran oportunidad por delante", concluyó.