Cuántas veces nos preguntaron ¿dulce o salado? ¿picante o amargo? ¿Alguna vez te planteaste la posibilidad de que esas preferencias, que creías sencillas, en verdad pueden revelar algunas cosas de tu personalidad?

La personalidad se manifiesta prácticamente en todas nuestras preferencias y en las pequeñas decisiones diarias, desde nuestro color favorito hasta el tipo de música que nos gusta y, por supuesto, los sabores que preferimos.

Las preferencias por un sabor pueden estar determinadas por lo que comieron nuestras madres, pero también están influenciadas por nuestra psique.

Salado

 

Si sos del grupo de los que prefieren los alimentos crujientes y salados, sos de las personas que suelen tener grandes sueños y metas ambiciosas. Generalmente tienen una gran sensibilidad a los alimentos amargos o picantes, pero disfrutan mucho de los sabores salados y generalmente no son grandes fanáticos de los dulces.

Dulce

 

Si sos una de esas personas que disfrutan el postre más que la cena, es probable que tengas una personalidad mucho más "dulce", literalmente. Las personas que les gustan los alimentos dulces tienden a ser más amables o cariñosas, según un estudio realizado en Gettysburg College.

Otra investigación llevada a cabo en la Universidad Estatal de Dakota del Norte confirmó que quienes prefieren lo dulce tienden a ser más amistosas, compasivas y empáticas. Estas personas tienden a involucrarse más en actividades de voluntariado y es natural que compartan y ayuden a los demás desinteresadamente.

Picante

 

Si este es tu sabor favorito tenes una tendencia a ser una persona aventurera. Esto es porque, por lo general, son personas que se aburren rápidamente con el día a día y necesitan una dosis de adrenalina en sus vidas, por lo que siempre están dispuestos a probar nuevas experiencias. Aman ser elogiadas, pero también tienden a ser más tolerantes.

Amargo

 

Si sos de los que disfrutan del café negro, es probable que tengas algunos rasgos de personalidad narcisista y con rasgos antisociales.

Ácido

 

Los sabores ácidos no son exactamente los preferidos, pero si sos de los que aman los cítricos es más probable que seas reflexivo y racional. Por lo general quienes prefieren este tipo de sabores están más abiertas a nuevos estímulos y pueden volverse muy creativas si logran controlar su tendencia a la racionalización. Aunque también pueden volverse muy críticos y duros con los demás porque establecen estándares muy altos.