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Para fanáticos del yogur: una receta fácil para hacerlo en casa sin máquina

Hacer yogur en casa es mucho más fácil y rápido de lo que pensabas, además de que te ayudará a ahorrar en la compra de estos productos
18/02/2021 - 16:37hs
Para fanáticos del yogur: una receta fácil para hacerlo en casa sin máquina

El 2020 nos dejó nuevos hábitos que seguramente se quedarán con nosotros mucho tiempo más.

Uno de ellos es dedicarle más tiempo del que acostumbrabamos a la cocina, y hacer con nuestras propias manos aquellas cosas impensadas que antes sólo comprábamos en el supermercado.

Un caso que tuvo mucho éxito durante la cuarentena fue el yogur natural, que aunque no parezca muy fácil a simple vista, siguiendo los trucos de esta receta queda perfecto y se puede hacer en cantidad para que dure varios días.

Hacer yogur en casa es mucho más fácil y rápido de lo que creías
Hacer yogur en casa es mucho más fácil y rápido de lo que creías

Qué ingredientes lleva el yogur casero

Para hacer yogur en casa sólo necesitamos un yogur natural, un litro de leche entera y 50 gramos de leche en polvo para que quede más cremoso y tenga una textura consistente. Agregarle algún endulzante es opcional, aunque si lo que buscas es algo muy sano, no es lo más recomendables. Una opción mejor será sumarle después un poco de miel, pasta de dátiles, o mermelada si no estamos acostumbrados al yogur natural sin azúcar.

Cuando se estén acabando los yogures que hicimos, podemos usar uno para hacer una nueva tanda de 8-10 yogures nuevos, pero evidentemente este proceso no es eterno, y solo podemos repetirlo 3-4 veces y sin dejar pasar demasiados días. Además de ahorrar en yogures, también ayudamos a reducir el consumo de plástico, así que todo son ventajas.

La leche: Aunque podemos usar leche descremada o semidescremada, la textura no será la misma que usando leche entera (puede ser sin lactosa). Así que, para que los yogures no queden demasiado líquidos, aconsejamos usar leche entera y de buena calidad. También podemos usar leche entera fresca.

El yogur de origen: Tenemos que asegurarnos de que el yogur que compremos sea yogur de verdad y no algún tipo de postre lácteo sin fermentos. Necesitamos un yogur natural hecho con leche de vaca, sin azúcar y con fermentos vivos. También podemos prescindir del yogur y comprar directamente fermentos, pero el yogur es un buen punto de partida para hacer los primeros yogures caseros.

Las cantidades: Las cantidades tienen que ser exactas para llegar al resultado que queremos. Usaremos un litro de leche por 120 gramos de yogur natural y 50 gramos de leche en polvo. Con esta fórmula sacaremos 8-10 yogures perfectos.

Necesitaremos entre 8-12 horas para que los yogures estén listos, y es muy importante no moverlos durante todo ese tiempo.

La temperatura: La temperatura correcta para convertirse en yogur es de 20-25º. Si usamos yogurtera no tenemos que preocuparnos, porque la máquina se encargará de mantener durante todo el proceso los yogures a la misma temperatura. Pero la yogurtera es bastante prescindible, sobre todo si vivimos en una casa donde la temperatura ambiente suele ser siempre la misma. Lo único que tenemos que hacer es buscar un sitio seco y cálido.

El truco del horno: Si hace un poco de frío o queremos asegurarnos de tener una buena temperatura, podemos encender el horno 15 minutos, apagarlo y, cuando apenas quede calor residual, introducir los yogures sobre una bandeja (tapados con un trapo limpio). Cerramos el horno y los dejamos allí las 8-12 horas que dura el proceso.

Una vez preparada la base del yogur podés combinarlo con frutas
Una vez preparada la base del yogur podés combinarlo con frutas, cereales o hastan convertirlo en un gran postre

El paso a paso para hacer esta preparación

En una olla a fuego medio ponemos la leche entera. Cuando esté caliente, y antes de que rompa a hervir, apagamos el fuego. La dejamos templar. Mientras la leche esté templada, agregamos el yogur natural y la leche en polvo. Mezclamos bien. Vertemos la mezcla en 8-10 vasos, tarros o recipientes de yogur de cristal. Los dejamos en un sitio plano sin moverlos y tapados con un trapo limpio.

Una vez que tengamos la base del yogur natural ya podemos ponernos creativos, agregar trozos de frutas, cereales o incluso convertirlo en un postre que deslumbre a tus invitados y a los miembros de la casa.

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