CUIDADO Y PREVENCIÓN

¡Cuidado!: qué productos de consumo diario tienen altas cantidades de sodio

Algunos alimentos parecen inofensivos, pero pueden ser realmente perjudiciales para aquellas personas que tienen particular sensibilidad al sodio
SALUD - 25 de Enero, 2019

El sodio es un mineral que se encuentra en la mayoría de los alimentos, en mayor o menor porcentaje. Aunque muchas personas lo consideran categóricamente perjudicial para la salud, es importante considerar que cumple funciones centrales en el organismo, dado que aporta a su buen funcionamiento.

Una de sus principales funciones es mantener el volumen de líquido extracelular (LEC), que está presente de acuerdo al contenido total del sodio en el cuerpo. Además, debido a su acción en relación con los líquidos en el organismo de los seres vivos, ayuda a mantener la homeostasis celular normal. Así, contribuye al conjunto de reacciones que realiza una célula y que le permiten estar en equilibrio con el medio que la rodea.

Por otro lado, regula el equilibrio de líquidos y electrolitos, la presión arterial, el equilibrio ácido-base y la conducción de impulsos nerviosos. Al mismo tiempo, ayuda a controlar la contracción muscular y el transporte activo de nutrientes a través de la membrana celular.

Si bien es un componente necesario de la dieta por las funciones centrales que cumple en el cuerpo, también es necesario mencionar que si se consume en exceso puede provocar severos daños en la salud. Sin embargo, el consumo de sodio no es únicamente la sal que se le agrega a las comidas o a las preparaciones.

Es importante tener en cuenta que hay una gran cantidad de productos que se consumen frecuentemente que contienen altos niveles de sodio, pero no todos los consumidores lo saben. Así, es posible que contribuyan a una ingesta excesiva de sodio sin que la persona tenga conocimiento de ello. Ahora bien, ¿cuáles son los alimentos que más sodio contienen y se consumen con frecuencia sin saberlo?

Los caldos en cubos -de cualquier sabor- que se utilizan para saborizar las comidas tienen altas cantidades de este mineral como consecuencia de su concentración.

Algunos condimentos o aderezos que se suelen utilizar para darle sabor a las comidas también contienen sodio en porcentajes altos. La mostaza, la salsa de soja, el ketchup y la mayonesa son algunos de ellos, a menos que explícitamente el envase diga que son bajos en sodio.

Todos los productos enlatados -y también algunos congelados- entran dentro de este grupo de alimentos. ¿Por qué? Principalmente, por la alta cantidad de conservantes que requieren para mantenerse en buen estado dentro de los envases. Anchoas en lata, cualquier vegetal enlatado o congelado, atún, caballa, legumbres, son algunos de los ejemplos más claros.

Por su parte, los embutidos también se pueden encasillar dentro de este tipo de alimentos. Si bien parece una obviedad, es cierto que muchas personas no tienen en consideración los altos niveles de sodio que tienen el salame, las salchichas, el chorizo, la morcilla, entre otros productos. Del mismo modo, los fiambres son realmente salados y pueden contribuir a la cantidad de sodio que consume una persona.

Aunque parezca algo que la mayoría de las personas sabe, todos los snacks que se suelen utilizar para picadas o entradas de las comidas se pueden calificar como alimentos con altos contenidos de sodio. Papas fritas, palitos salados, nachos, maní con sal, entre otros. ¿Qué consecuencias puede traer el consumo excesivo de sodio?Este mineral en cantidades moderadas no resulta perjudicial para la salud, sino que por el contrario, es necesario para el adecuado funcionamiento del organismo. Sin embargo, su ingesta en exceso puede repercutir negativamente en la salud, sobre todo a largo plazo. Así, está asociado a diversas patologías que pueden afectar el estado general de salud.

La presión sanguínea alta -hipertensión-, las afecciones coronarias, irritabilidad, retención de líquidos y sobrecarga de trabajo para los riñones son algunos de los problemas que arroja la excesiva ingesta de sodio.

En condiciones normales de salud, los riñones tienen la capacidad de regular la concentración de este mineral y provocar una mayor producción de orina, lo cual provoca que ésta sea más diluida en caso de un consumo superior al requerido. No obstante, el exceso de sodio a mediano y largo plazo tiene efectos adversos en el organismo. El problema más grave es la retención de líquidos, algo que obliga al corazón, al hígado y a los riñones a trabajar por encima de sus posibilidades.

El riesgo más evidente del exceso de sodio es la mayor probabilidad de desarrollar hipertensión arterial, dado que al retener agua, aumenta el volumen de sangre y por tanto la presión de la misma.

Te puede interesar

Secciones