El empresario Elon Musk ha cerrado su cuenta de Instagram, con más de 8 millones de seguidores en medio de un extraño episodio que también tiene a la cantante Grimes y la rapera Azealia Banks como protagonistas.

En respuesta a una pregunta que le hizo un seguidor en Twitter, Musk dio una explicación críptica. Se limitó a responder que “Instagram tiene tanta sed, te da muerte por agua”, en lo que parece una cita a un poema de T. S. Elliot titulado "Death by water". En otro tuit, añadió simplemente que Instagram “no me gustaba”.

La respuesta de Musk no aporta mucha luz al extraño episodio que tuvo lugar en los últimos días y que le llevó presuntamente a cortar con su novia, la cantante Grimes, y finalmente también a cerrar su cuenta de Instagram.

Los hechos se remontan a mediados de agosto cuando, al parecer, la rapera Azealia Banks estuvo en casa del fundador de Tesla. Allí fue testigo de cómo Musk estaba tratando de encontrar inversores, cuando pocos días antes había tuiteado en su perfil que tenía “fondos asegurados” para retirar la compañía Tesla de bolsa.

Banks también vio a la ex pareja de Musk, la cantante Grimes, en actitud de consolarle. Pocos días más tarde, Musk y Grimes dejaron de seguirse el uno al otro en Instagram, y Musk dejó de seguir a la cantante en Twitter, lo que provocó rumores de que su relación podría haber terminado.

A principios de esta semana, Azealia Banks empezó a publicar mensajes crípticos sobre Musk en su cuenta de Instagram. La rapera etiquetó a Musk en su historia de Instagram, escribiendo “necesito contactarte lo antes posible”, seguido de “Necesito mi teléfono ahora”. 

En otra historia de Instagram, que fue borrada, la rapera aseguraba que el abogado de Musk pagó a su abogado para que le quitara su teléfono y eliminara la evidencia. Un portavoz de Musk explicó al diario digital Bussiness Insider que “Elon no conoce a Azealia Banks. Ni él ni sus abogados tienen su teléfono”.  La rapera se lamentó públicamente asegurando que sólo “quiero mi teléfono y quiero irme a casa. Esto no tiene nada que ver conmigo”.