El futuro del dinero también es móvil

La irrupción de nuevos celulares y la implementación de recursos online por parte de empresas de crédito anticipan el uso masivo del dinero electrónico
TECNOLOGÍA - 21 de Febrero, 2007

El carácter masivo que están adoptando las tecnologí­as que promueven la movilidad en cuanto a consumo de utilidades y servicios parece, también, repercutir en otras áreas de la vida cotidiana.

Tras explotar en espacios como el entretenimiento y la comunicación, los servicios móviles ahora se encuentran abocados a sumar presencia en uno de los terrenos más rí­spidos a la hora de las operaciones remotas: el ámbito del dinero.

Como en otras oportunidades, los paí­ses del primer mundo llevan la bandera en la implementación de soluciones monetarias inteligentes como tarjetas que operan online, y aplicaciones de pago mediante celulares.

De cara a un año en el que la aparición de un amplio número de smartphones, y el lanzamiento de plataformas orientadas a promover la realización de transacciones "inalámbricas" de dinero parece subir nuevos peldaños cada mes, empresas y analistas no dudan en señalar al 2007 como el año del e-cash (o efectivo electrónico).

Una vez más, la incógnita respecto de esta masividad en el uso de soluciones económicas virtuales cobra la fisonomí­a de paí­ses como la Argentina.

Si bien ya existen múltiples compañí­as que permiten operaciones de e-banking, todaví­a restan crear diversas condiciones que, puesta en marcha la arquitectura tecnológica, generen el hábito de mover dinero o clausurar cualquier tipo de deuda mediante el celular u otro tipo de herramienta móvil. Sueño americano

Según destaca el diario especializado The Economist, en los Estados Unidos, algunos de los clubes nocturnos de moda utilizan un nuevo "truco" para verificar la identidad de sus invitados VIP: se les enví­a un pase en forma de un súper código de barras a sus celulares.

Este código es escaneado por un individuo fí­sicamente imponente, quien luego procede a levantar la soga de terciopelo.

Así­, los teléfonos celulares se están transformando en una forma popular de realizar todo tipo de pagos.

En la nación norteamericana los fans de los "Atlanta Hawks" formaron parte de un grupo de testeo que tení­a sus aparatos celulares Nokia conectados con una tarjeta Visa, y los usaban para pagar el ingreso al estadio local así­ como también cualquier bebida.

"En Austria la gente puede pasar el dí­a sin llevar ni dinero en efectivo, ni tarjetas de débito o de crédito; pueden pagar todo – hasta los bienes de consumo- por medio de un teléfono celular", asegura Arthur D. Little, una consultora en gerenciamiento, que reconoce que los pagos realizados a nivel mundial por esta ví­a escalarán desde 3,2 billones de dólares en el 2003 a 37 billones en 2008.

Por su parte, en Japón se realizan cientos de miles de transacciones, desde la compra de boletos de tren hasta la compra de productos de almacén, en las que los clientes pasan sus dispositivos manuales como el que se describe arriba. Luego, los pagos son confirmados por un sonido como el de las antiguas cajas registradoras.Transacciones online

De acuerdo a la misma fuente, hay otros servicios bancarios que también están siendo ofrecidos por medio de los celulares. El 12 de febrero, 19 operadores telefónicos con redes en más de 100 paí­ses, dijeron que la gente iba a poder utilizar sus dispositivos manuales para enviar dinero a otros paí­ses. MasterCard operará con un sistema de mensajes de texto que confirmará el enví­o. Para quienes no tengan cuentas bancarias (y reciban el dinero), el crédito podrá convertirse en tarjetas prepagas, que luego podrán ser utilizadas para comprar cosas.

"Esto revolucionará el negocio de la transferencia de dinero", según Sunil Bartel, jefe de Bharti Airtel, una de los operadores más grandes de la India.Vodafone en Gran Bretaña y el Citigroup en Estados Unidos también están lanzando un servicio de transferencia de dinero internacional.

El Gerente General de Vodafone, ex Gerente General del Grupo Bancario HSBC, piensa que los teléfonos cargados con crédito realizarán muchos de los pagos para los que la gente hoy utiliza efectivo en los paí­ses con economí­as ricas.

Debido a los altos costos de infraestructura de los bancos, ha sido siempre "difí­cil ganar dinero de los pagos menores". Pero los modelos de negocios con costos más bajos, algunos de paí­ses en ví­as de desarrollo están abriendo nuevas oportunidades.

Asimismo, la idea del teléfono celular como billetera es atractiva por la cantidad de gente que los tiene.

La compra de un boleto de tren, un periódico y un café camino al trabajo con un movimiento del dispositivo electrónico manual promete ser mucho más conveniente que buscar entre los billetes y esperar el cambio, o que deslizar la tarjeta de crédito o débito y tener que ingresar los números o firmar un papel.Horizonte rentable

Ahora bien, de producirse un uso masivo de estos recursos, ¿podrí­an los comerciantes empezar a cobrar más por aceptar efectivo? Actualmente, el pago ví­a celulares o tarjetas inteligentes obliga a los comerciantes en distintas partes del mundo a imponer un monto mí­nimo lí­mite para lo que pueden gastar los clientes.

Si los cargos por el uso de estas tarjetas o los teléfonos móviles fuera lo suficientemente bajo, el dinero en efectivo representarí­a un costo más alto, así­ que bien podrí­a acarrear cargos.

Tanto MasterCard como Visa han introducido recientemente tarjetas plásticas en los Estados Unidos que pueden ser utilizadas sólo en compras por debajo de los U$S 25.

Por estos dí­as un nuevo sistema de "doble interfaz" está siendo probado en Londres. Consistirá de una única tarjeta de plástico que combina Oyster (sistema de compras ví­a tarjeta de plástico de los boletos de transporte en subterráneos y autobuses) para transporte, una tarjeta Visa estándar emitida por el Banco Británico Barclays para pagos con ingreso de un PIN (número de identificación personal) y que cuenten con un chip.

Este dispositivo también incorpora una tarjeta Visa "Wave and Pay" (sistema por el cual sólo debe pasarse la tarjeta por un lector, sin necesidad de ingresar ningún dato) para transacciones instantáneas por valores que no superen los U$S 19. Variable tecnológica

Los diversos sistemas de pago sin contacto existentes se apoyan sobre una tecnologí­a llamada NFC, esto es, Near Field Communication o comunicación de campo aproximado, El dispositivo de NFC dentro de las tarjetas se activa cuando esta cercano a un lector o cuando se lo apoya sobre un lector.

Al parecer, la máquina induce un circuito electrónico dentro del dispositivo NFC, el cual permite un corto intercambio de datos para efectuar la transacción, como ser deducir una cantidad de un valor acumulado.Como estos dispositivos NFC cuestan sólo unos centavos, podrí­an insertarse en cada teléfono móvil. Este tipo de pagos es considerado de bajo riesgo, ya que los comerciantes tienen el pago garantizado y, e el caso de que los celulares se pierdan o sean robados, el costo a los usuarios es limitado.

Pero los teléfonos celulares son mucho más "inteligentes" que las tarjetas. Pueden ser desactivados a distancia, y tienen una pantalla que puede mostrar la información, como ser un balance de crédito o información de un producto; cuentan también con un teclado y pueden comunicarse.

Esto significa que también puede ser usada para autorizar pagos de sumas mas grandes, mediante el ingreso de un código PIN directamente y sin tener que pasar por un cajero automático.Prácticas y experiencias

En virtud de lo divulgado por The Economist, los norteamericanos prefieren usar plástico para realizar sus compras. El domicilio promedio cuenta con más de 10 tarjetas de crédito.

La infraestructura de los pagos por ví­a del celular esta comenzando a tomar forma en los Estados Unidos. El mercado para las tarjetas prepagas ya excede los 180 millones de dólares e incluye, tarjetas de Telecom, y tarjetas prepagas emitidas por Visa, MasterCard, American Express y Discover y las tarjetas de regalo (como certificados de compra) emitidas por empresas como The Gap o Starbucks. Las tarjetas también son emitidas con fines de salud y por el gobierno.

Muchos norteamericanos ya usan EasyPass para pagar los peajes sin detenerse o SpeedPass, un llavero que provee Exxon Mobil para cargar combustible en las estaciones de servicio.

Así­ y todo visto desde la perspectiva del mercado en su totalidad, los nuevos sistemas de pago son comparativamente reducidos. John Suchance de Bank of America, dice que mientras que las tarjetas de crédito y débito son aceptadas en 6 millones de lugares en Estados Unidos, solamente 1 millón aceptan las tarjetas "sin contacto". Costos más bajos para los comerciantes y la instalación de mayor cantidad de lectoras pueden acelerar la adopción de éste método de pago.

Art Kranzley, de MasterCard, asegura que los pagos por ví­a del celular pueden reducir la cantidad de fraudes. Su empresa esta testeando, con KeyBank, un sistema que le permite al cliente ingresar un PIN en un teléfono antes de realizar cualquier compra, transformando así­ en efecto, al celular en una tarjeta de crédito.

Estudios realizados por Visa muestran que el consumidor norteamericano promedio tiene el doble de probabilidades de llevar un celular que de llevar dinero en efectivo, y que quienes se encuentran en la franja etaria entre 18 y 34 cuadruplican ese valor.El sendero a seguir

El crecimiento en el uso de soluciones virtuales de pago dependerá mucho de cómo se paguen las cuentas. Las asociaciones de pagos perderí­an dinero si los clientes pagasen por los bienes directamente desde sus cuentas bancarias (ya sea por medio de un teléfono celular o por medio de servicios bancarios en lí­nea) en lugar del uso de tarjetas de crédito o débito.

The Economist asevera que los bancos deberán intentar cobrarle a los clientes por el pago de las cuentas online; más allá de que esto haya resultado imposible hasta la fecha. Algunos de los bancos mas chicos, que no cuentan con un portfolio de pago por tarjetas que proteger, pueden ser quienes m{as se beneficien de ofrecer a los clientes una manera de utilizar sus teléfonos celulares para pagar por í­tems , directamente desde sus cuentas bancarias.

Habiendo gastado fortunas en marca, las empresas de tarjetas de crédito y los bancos no quieren que otros sistemas de pago ganen espacio. Esto representa una amenaza a los bancos, dice Dan Schatt, de Celent, una compañí­a de investigación Históricamente, los bancos han controlado el hardware (chequeras y tarjetas de crédito y débito), así­ como la distribución (marcas, sitios web, etc.).

La realización de operaciones bancarias por medio de celulares y tarjetas inteligentes sin contacto se escaparí­an de su esfera de control. Los bancos perderí­an clientes.

Tanto los Bancos como las Compañí­as de tarjetas de Crédito dicen que si el dinero en efectivo es reemplazado por el teléfono celular; ellos van a formar parte de esa transición. Una década atrás algunos observadores predijeron que las operaciones bancarias online iban a transformar a las sucursales de los grandes bancos en obsoletas.

Pero JP Morgan, Bank of America y otros aseguran fervientemente que la gente está, actualmente, utilizando más las sucursales bancarias que antes de este fenómeno. Aunque el teléfono celular y las tarjetas inteligentes reemplazan al dinero en efectivo, no se sabe aún quien será el que cobre esas tarifas.Infobaeprofesional.com

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