Uno de los símbolos de los pasajes aéreos baratos para volar en avión fue el equipaje en la cabina de clase económica. Viajar solo con una valija "carry on" en escapadas cortas se instaló como el camino ideal para ahorrar en tiempo y especialmente dinero.

Sin embargo, en medio de lapandemia del coronavirus​ y los protocolos de seguridad aflorando en todo el mundo, el equipaje de mano podría tener sus días contados, según  las instrucciones publicadas por la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI).

El organismo, que depende de las Naciones Unidas y es el responsable del estudio de los problemas de la aviación civil internacional y de la promoción de la normativa de la aeronáutica mundial, ha elaborado una serie de documentos en los que detalla cómo deben ser los viajes de avión tras la crisis de la Covid-19.

Las medidas, que deben ser aplicadas de forma temporal en todos los países, pretenden evitar el contacto físico entre las personas y minimizar los riesgos de contagio.

El coronavirus provocará la transformación de la forma de viajar en avión.

La OACI insta a subir a bordo con el mínimo equipaje y considera que la tripulación debe inducir a los pasajeros a facturar la totalidad de las maletas, con la excepción de las mochilas o bolsas que puedan ser colocadas debajo de sus respectivos asientos delanteros.

Con ello aduce que se evitarán roces con otros viajeros o con el personal auxiliar de cabina en el momento de colocar o sacar el equipaje de los compartimentos superiores. Se busca evitar roces con otros viajeros o con el personal auxiliar de cabina en el momento de colocar o sacar el equipaje de los compartimentos superiores.

Medidas preventivas en los aviones

Además de regular el equipaje de mano y de insistir en el uso imprescindible de tapabocas tanto en el aeropuerto como a bordo del avión, el organismo hace hincapié en la necesidad de generalizar el check-in online -algo cada vez más habitual sobre todo en vuelos de corta y media distancia-, y aumentar el autoservicio en todos los procesos en los que esto sea posible con el fin de evitar la expansión del virus.

Asimismo, recalca la conveniencia de utilizar procedimientos de identificación digital, incluida la biometría sin contacto, como el reconocimiento facial o de iris.

Estas medidas, unidas a los controles de temperatura corporal y exámenes visuales por parte de profesionales del sector de la sanidad, la monitorización de flujos de pasajeros y los ajustes de procesos como el de embarque para evitar aglomeraciones deberán ofrecer mayores garantías a la hora de volar.

En el avión, la OACI recomienda que a la hora de asignar asientos, las aerolíneas contemplen un distanciamiento físico adecuado entre los pasajeros, siempre que la ocupación de la aeronave así lo permita, y que se limiten en lo posible las interacciones entre las personas.

En la post pandemia aumentarán las restricciones para moverse dentro de la cabina del avión.

También restringe o suspende -según los casos- las ventas a bordo, y el servicio de alimentos y bebidas en vuelos de corto radio; elimina la oferta de periódicos y revistas, y acota el acceso a los baños en función del asiento de cada pasajero.

Estas instrucciones dictadas por la Organización de Aviación Civil Internacional son de gran importancia, puesto que recogen todos los aspectos que posteriormente cada estado miembro debe regular, y cuyas normas deben ser cumplidas por todas las aerolíneas y los aeropuertos ubicados en su territorio.