Luego de cuatro meses del dictamen que desautorizaba la fusión de ESPN-FOX en manos de Disney, el Gobierno finalmente aprobó la desinversión propuesta por la propia compañía. Así, MediaPro se queda con los "11 contenido fundamentales" que había objetado la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia.

La aprobación de la desinversión y también de la fusión ESPN-FOX con estos "remedios" tuvo la firma del secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti, y la anuencia del ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas.

¿En qué consiste la resolución del Gobierno?

Lo más importante es que Disney debe transferir la lista de licencias de derechos a MediaPro, una empresa fundada por los catalanes Tatxo Benet y Jaume Roures. En el año 2018, la compañía aterrizó el Orient Hontai Capital con la compra del 53,5% del paquete accionario.

MediaPro tomará el control de las tres señales básicas de Fox

En Argentina, la multinacional de origen catalán tomará el control de las tres señales básicas de Fox, que en simultáneo al avance del acuerdo ya dejaron de transmitir solo archivo (en estas semanas, la Libertadores se transmite en Fox, Fox 2 y Fox 3).

Qué vas a poder ver en los canales de Fox

De acuerdo a la resolución, en esas pantallas se podrán ver "la Copa CONMEBOL Libertadores (Torneos de fútbol donde participan los equipos de la primera división de la Liga Profesional del Fútbol Argentino); UEFA Champions League (Torneo de fútbol internacional donde no participan equipos de la primera división de la Liga Profesional del Fútbol Argentino); NFL (Fútbol Americano); MLB (Béisbol); Fórmula 1 (Automovilismo); UFC (Lucha); WWE (Lucha Libre); Premier Boxing Champions (Boxeo); Liga ACB Basketball (Básquet); World Rugby Sevens (Rugby); y el ATP World Tour 250 – ATP Córdoba (Tenis)".

El Grupo MediaPro se queda con Fox Sports

La venta de Fox que había anunciado Disney

En febrero, la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (CNDC) había emitido dictamen sobre el alcance local de la compra que The Walt Disney Company realizó a nivel global por los activos de Twenty-First Century Fox.

El ente controlado por el Ministerio de Desarrollo Productivo había dispuesto condiciones para autoriza el deal en el país con el objetivo de equilibrar la competencia en el mercado de comercialización de canales deportivos del servicio básico de TV por cable.

En aquel momento, la totalidad de los derechos fueron traspasados al Grupo Mediapro, multinacional de origen español, con mayoría de capitales chinos y considerado uno de los conglomerados audiovisuales más importantes de Europa con presencia en todo el mundo a través de 55 centros de producción en 36 países.

De este modo, Dinsey da por cumplida la demanda del Gobierno para aprobar la fusión teniendo en cuenta que, de acuerdo a la mirada oficial, infringía el artículo 8º de la Ley de Defensa de la Competencia (Nº 27.442).

Por este motio, la CNDC subordinaba la autorización de la operación al cumplimiento de ciertas limitaciones "dado que la misma disminuye, restringe o distorsiona la competencia de modo que perjudica el interés económico general".

En su "Informe de Objeción", el ente alertó sobre los efectos perniciosos sobre la competencia de la operación y le reclamó a Disney que transfiera a un nuevo competidor todos los derechos de transmisión relacionados a competencias deportivas de los cuales Fox era licenciante al momento de notificación de la operación de fusión.

"Esta medida tiene por objetivo restaurar la efectiva competencia en el mercado de comercialización de señales deportivas básicas, es decir, los canales deportivos de cable ordinario -no señales premium o pack fútbol", señalaba el dictamen que también aclaraba que "el condicionamiento de transferencia de derechos será suficiente sí, como mínimo, alcanzan a los denominados contenidos fundamentales".