El mercado de los SUV suma, cada día, nuevos jugadores. Las ventas han sido tan exitosas en los últimos tiempos que eso motivo a las marcas a tomarlo como uno de los segmentos más importantes de su oferta.

En este sentido, la categoría que gana más compradores es la de modelos compactos, es decir, los más chicos. Y es aquí donde también se concentra la mayor preocupación por saber cuándo un producto puede ser alcanzado por el famoso impuesto interno y cuándo tiene la ventaja de quedar exento.

¿Por qué esta preocupación?. Sucede que, pasando la barrera de los $2.000.042, los vehículos ya tienen que pagar el tributo del 20% (25% en términos reales), que le hace pegar un gran salto y alejarse del pelotón, por lo cual, nadie quiere que eso sucede. Y el incremento de precios que se dio en los últimos meses, impulsado por inflación más devaluación, los ha llevado a muchos de ellos a acercarse al límite.

Volkswagen T-Cross, el más vendido.

Para evitarlo, muchas marcas deciden frezzar sus autos en ese valor, aún perdiendo rentabilidad. El mejor ejemplo es el caso del Volkswagen T-Cross, el modelo más vendido entre los chicos, que tiene las versiones más equipadas en el mismo precio.

Pero no es el único que corre tras el impuesto interno para moderar los valores y saber qué hacer cada mes que pasa y los precios de los 0km suben. 

Así aparecen dos niveles. Por un lado, el segmento de los chicos, donde dos jugadores ya fueron afectados; y por el otro, el de los medianos, donde casi todos están golpeados por el gravamen.

Repaso por segmento

En el caso de los SUV chicos, uno de los más afectados es el Jeep Renegade. Este producto es, hasta ahora, uno de los pocos que lo alcanza el impuesto interno, junto con el Honda HR-V.

Jeep Renegade, el SUV chico que lo alcanzó el impuesto interno.

En el primer caso, los valores van desde $1.627.300, en la versión naftera 1.8 litros de 130 cv, asociado a una caja manual de 5 y a otra automática de 6;  hasta $3.377.100 en la versión turbodiésel Trailhawk 2.0 AT9.

En el caso del modelo de Honda, sucede lo mismo. Los precios van desde los $1.976.300 en la versión con motor naftero 1.8 litros de 140 cv y caja automática CVT, hasta la EXL CVT, que llega a 2.640.200 pesos.

Honda HR-V, otro chico alcanzado por el impuesto interno.

Dentro del segmento de los chicos el resto de los modelos de marcas masivas logran quedar exentos del gravamen. Entre ellos, los más vendidos y reconocidos son los siguientes:

- Volkswagen T-Cross: el valor del más vendido va desde $1.504.126 hasta $2.065.500.

- Chevrolet Tracker: este modelo va desde los $1.527.900 hasta los $2.036.900.

- Nissan Kicks: va desde los $1.580.600 hasta los $1.995.200.

- Ford Ecosport: tiene un precio que va desde los $1.314.000 hasta $1.950.000.

- Renault Duster: va desde los $1.368.700 hasta los $1.781.900.

- Renault Captur: su precio va desde los $1.601.300 hasta los $1.906.400

- Peugeot 2008: tiene un valor que va desde los $1.464.100 hasta los $1.995.000.

- Citroën C4 Cactus: esta propuesta va desde los $1.493.800 hasta $1.987.700.

Entre los modelos de marcas coreanas, los competidores del segmento chico son el nuevo Kia Seltos, además del Hyundai Kona, que es chico pero más completo en tecnología y seguridad.

En el primer caso, el nuevo Seltos tiene un precio que arranca en $ 2.512.125 (u$s31.500).

Nuevo Kia Seltos, llegó con impuesto interno.

En el caso del Hyundai Kona, tiene cuatro versiones, todas alcanzadas por el impuesto interno. El precio más barato arranca en $2.831.125 (u$s35.500).

Hyundai Kona, otro afectado por el gravamen.

Los medianos

En el caso de los SUV medianos, es donde el impuesto interno más golpeó la oferta y dejó secuelas que afectaron las ventas.

En general, los más vendidos y de marcas más populares, han sido todos afectados por el impuesto interno. Las únicas alternativas que todavía se pueden elegir y que tienen una versión sin impuestos de entrada de gama son Jeep Compass y Chevrolet Equinox. El resto, tanto Honda CR-V, Toyota SW4 y RAV4, Hyundai Tucson y Santa Fe, Kia Sportage y Sorento, todas fueron golpeadas por este gravamen.

Lo mismo pasa con Ford Kuga, Chevrolet Trailblazaer y Equinox, Renault Koleos, entre otras.

En el caso de Jeep, el Compass arranca en $2.053.800 hasta los 4.150.000 pesos en su versión diésel con caja automática de 9 marchas.

Jeep Compass, el mediano con algunas opciones sin impuesto.

En el caso de Chevrolet, la Equinox se ofrece en la versión 1.5 Turbo FWD en $2.125.900, mientras que la Equinox 1.5 Turbo Premier AWD salta a 3.676.900 pesos.

En el caso de Toyota, desde el modelo inicial, el CH-R, que se ofrece en tres versiones híbridas, ya lo alcanza el impuesto interno. El precio arranca en u$s44.100 o 3.334.500 pesos.

El que le sigue, RAV4, tiene un valor que arranca en u$s48.400 o 3.671.100 pesos.

Por último, otra de las más vendidas del mercado total y líder en su categoría, la SW4, tiene un precio que arranca en 3.899.500 pesos.

En Ford, por su parte, la nueva Kuga híbrida tiene un precio de u$s48.400 o 3.847.800 pesos, mientras que la nueva Territory arranca en arranca en 3.300.000 pesos, y tiene sus dos versiones afectadas.

Ford Territory, uno de los últimos en llegar al mercado.

Así, pasando el segmento de los chicos, todos los SUV, los más vendidos, son afectados por el tributo. También pasa con el nuevo Citroën C5 Aircross, el Peugeot 3008 y el 5008.

Para las marcas, el impacto es grave y preocupante, porque si bien se salvan en el segmento de los chicos, no logran hacerlo con los medianos, que representan una categoría importante para el público. 

Además, también preocupa que los chicos estén al borde del precipicio.

Precio sugerido en USD $ 48.400