Uruguay determinó que, a partir de ahora, la importación de autos clásicos no tendrá costo impositivo alguno. Así lo determinó en una modificación de la Ley Aduanera, con el objetivo de convertir a ese país en un polo de atracción para grandes colecciones de autos clásicos, que movilizan una importante economía en servicios de mantenimiento y restauración, a cargo de pequeños talleres y artesanos.

La noticia llegó en un momento clave si se compara con la Argentina, ya que, al mismo tiempo, el mes pasado, el secretario de Industria, Ariel Schale, estableció un cepo con nuevas trabas para la importación de autos clásicos. Además, a nivel local, quienes deseen importar un auto clásico deben pagar hasta 186% de impuestos aduaneros y otras cargas tributarias. Además de la carga impositiva de Argentina, se suma la complejidad del trámite burocrático.

Después de establecer cupos y trabas aduaneras para el ingreso de vehículos 0km, el nuevo foco de los funcionarios está puesto en uno de los nichos más pequeños del negocio: la importación de autos clásicos.

Autos clásicos, libre de impuestos en Uruguay.

Los vehículos de colección (categoría a la que pertenecen todos los autos con más de 30 años de antigüedad) tienen desde hace dos décadas su propio régimen de importación. Es un trámite burocrático que fue simplificado con una resolución de junio de 2018 y que permitió -en los últimos dos años- el ingreso de una gran cantidad de vehículos históricos al país. Es fácil identificarlos en las calles y exposiciones: son autos con más de 30 años, pero con patentes de 0km.

Ahora, los interesados deberán completar dos nuevos formularios, donde tendrán que brindar mayor información sobre a quién le compraron el auto y todas sus características técnicas. Además, deberán explicarle al Estado cuáles son "los motivos de la importación" de ese auto en particular. Los funcionarios se tomarán un tiempo prudencial para analizar, responder, aprobar o rechazar ese pedido.

En el caso del país vecino, la importación 0% de Uruguay abarcará a todos los autos clásicos con 50 o más años de antigüedad. Es decir: todos aquellos que se hayan fabricado antes de 1971. De esa manera, este beneficio impactará de manera especial sobre los vehículos clásicos más costosos del mercado, que no deberán pagar ningún tipo de impuesto para ingresar a ese país. El objetivo de la Banda Oriental es incrementar su parque nacional de autos clásicos, atraer a coleccionistas y revitalizar la economía que gira en torno a esta actividad.

Los autos clásicos, un gran negocio.

También hay novedades para los autos usados, pero que no son clásicos. En un sentido similar, en mayo pasado Uruguay decidió exonerar de tributos a todos los vehículos de menos de 50 años que hayan sido ingresados a Uruguay por "residentes y migrantes del Mercosur".

Esto permitió que muchos ciudadanos argentinos que se mudaron al país vecino en los últimos meses pudieran regularizara sin costos impositivos la radicación de sus autos comprados originalmente en Argentina, según Autoblog.

Las nuevas dos normativas para la importación de vehículos usados y clásicos en Uruguay, se pueden descargar acá abajo.