Tras los fuertes aumentos detectados en algunas cadenas mayoristas y, sobre todo, en el Mercado Central y en el Mercado de Hacienda de Liniers, el Gobierno incrementará los controles de precios en esos canales.

Habrá inspectores en los salones comerciales y también en los mercados mayoristas, con el objetivo de tener bajo la lupa a la mayor parte de la cadena comercial.

La decisión se tomó luego de constatar fuertes incrementos en los precios de las frutas y las verduras en el Mercado Central. Y también en el kilo vivo de hacienda en Liniers.

Las frutas y verduras registraron incrementos de entre 15% y 30% entre la tercera y la cuarta semana de este mes, de acuerdo a un relevamiento de la asociación Consumidores Libres.

En el caso de la carne, el aumento promedio resultó del 10% en los últimos diez días ante la caída de la oferta en Liniers. Se trata de incrementos que se dieron durante la semana de paro por parte de las organizaciones del campo. Tras la medida de fuerza, los valores no volvieron a los precios iniciales.

Ante la inquietud oficial, en el Mercado Central salió la propuesta de publicar, desde los próximos días, un listado con precios máximos -o sugeridos-, de manera tal de evitar abusos por parte de algunos comerciantes y productores.

De todas formas, desde algunas empresas de logística anuncian que esas subas de precios resultan justificadas: "En medio de la pandemia, la distribución se complicó. Y esas demoras, que se traducen por ejemplo en horas extra para los choferes o mayor consumo de combustible, hay que pagarlas", dice un empresario del transporte a iProfesional.

Lo cierto es que este fenómeno no es exclusivo de la ciudad de Buenos Aires o el conurbano. Distintos medios de las distintas provincias reportaron fuertes alzas en los alimentos en los últimos días.

Por ahora, estos movimientos no se trasladaron a otros productos. La consultora Elypsis midió que en la tercera semana de este mes, los alimentos y bebidas registraron una baja de los precios del 0,1%. Contra una inflación promedio de apenas el 0,2% en el promedio.

Es más: según Elypsis, tan sólo el 3% de los 50.044 productos relevados subieron de precio en la tercera semana de marzo. Un mínimo movimiento que no se percibía desde el año pasado.

Ese comportamiento tiene que ver, justamente, con la dureza mostrada por el Gobierno en relación a la inflación. La publicación de 2.300 precios de referencia fue clave para enfriar la dinámica inflacionaria.

De acuerdo a las estimaciones de Elypsis, este mes cerrará con una inflación del 2%, por debajo al 3% que el propio Gobierno esperaba hasta hace algunas semanas, en medio del inicio de las clases.

La pregunta, en todo caso, es cuánto tiempo durará la calma. Ya está comprobado que -a largo plazo- la inflación tiene más que ver con las inconsistencias macroeconómicas que con los controles propiamente dichos.