La conducción de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) dio el puntapié inicial para la paritaria 2023-2024 que formalmente comienza en abril. Vale recordar que el gremio que lidera Abel Furlán cerró la última negociación con un aumento anual del 110 por ciento, que incluyó cruces con los empresarios y medidas de fuerza. En un contexto inflacionario sin miras de descender, la UOM pretende incrementos trimestrales y, para el período abril-mayo-junio ya tiró un piso del 20 por ciento.

Fuentes gremiales señalaron a iProfesional que "las proyecciones del Gobierno de una inflación anual del 60 por ciento quedaron atrasadas, teniendo en cuenta que, de mínima, el primer trimestre del año tendrá un alza que rondará el 20 por ciento". Agregaron que "desde la llegada de esta nueva comisión directiva, le dejamos en claro a los empresarios que necesitábamos recuperar el poder adquisitivo de los salarios".

El propio Frulán sostuvo que la UOM acompaña las medidas antiinflacionarias del Palacio de Hacienda, pero "estamos para defender los ingresos de nuestros compañeros y compañeras, con los alimentos y los artículos de primera necesidad que no dejan de aumentar".

El sistema trimestral no es nuevo, ya que lo han impuesto varias organizaciones gremiales, entre ellas el sindicato de Mecánicos (SMATA) que encabeza Ricardo Pignanelli que lo implementó en el 2010. En este caso, ya se aplica en forma automática sobre los índices inflacionarios, para que no haya caída de los salarios.

Los directivos de las cámaras empresarias -Adimra, AFAC (autopartistas), Camima (PyMEs), Afarte (electrónicas de Tierra del Fuego), Caiama (aluminio) y Fedehogar (electrodomésticos)- recibieron la petición pero no hubo una respuesta. Voceros de las patronales señalaron que proyectaban un acuerdo semestral que podría rondar por debajo del 30 por ciento con una cláusula de revisión a los tres meses. Señalaron que comparten la preocupación del sindicato por la cuestión inflacionaria y temen que una combinación de caída del consumo con recesión afecte a la industria.

Paritaria metalúrgica: ¿diálogo o conflicto?

Estos primeros encuentros fueron algo así como un sondeo entre las partes, pero el lunes 27 será una reunión más formal donde quedarán plasmadas las posiciones. Allí se sabrá si la paritaria metalúrgica transita por el camino de diálogo o se torna conflictiva, como algunas de las negociaciones que se dieron en los primeros meses de este año (bancarios, televisión… por citar solo dos ejemplos).

La conducción de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) dio el puntapié inicial para la paritaria 2023-2024

Furlán adelantó que "las negociaciones no se pueden dilatar, porque los aumentos salariales siempre corren detrás de la inflación; entonces, es imprescindible llegar a un acuerdo con cierta rapidez, porque con esta inflación, cada día que pasa el que pierde son los trabajadores y trabajadoras" y añadió que "los ingresos están muy deprimidos; en muchas actividades tenemos personal bajo convenio que no llega a fin de mes".

El secretario general agregó que "sabemos que el ministro de Economía está haciendo todo lo posible para mejorar los índices, pero de esta manera no habrá paritaria que pueda resolver la recuperación del poder adquisitivo".

En diciembre pasado, la UOM logró revisar acuerdos anteriores y cerrar la paritaria con un 110% de aumento salarial, con nuevos cuatro tramos que se terminan de abonar en marzo. Y en abril comenzará el nuevo período paritario, que se extenderá hasta marzo de 2024.

Los aumentos que logra este sindicato siempre tienen una gran influencia en las negociaciones de otros sectores, ya que se trata de uno de los gremios más emblemáticos y el más importante del sector industrial.

Inflación: un dato clave en la discusión de paritarias

Del mismo modo tendrá un peso enorme en cada discusión el dato de la inflación de febrero, que la semana pasada el INDEC informó que fue del 6,6%.

Se trata de un número que superó lo que habían estimado las consultoras privadas en la previa, y que significó que la variación interanual llegara a 102,5%, la más alta en 32 años.

La categoría que más aumentó en febrero fue la de alimentos y bebidas

La última vez que había llegado a esos niveles fue en octubre de 1991, durante el menemismo, cuando era ministro de Economía Domingo Cavallo y ya regía el plan de convertibilidad.

De acuerdo con lo informado este martes por el INDEC, la categoría que más aumentó en febrero fue la de alimentos y bebidas, que acumuló un incremento de 9,8%.

Se trata de prácticamente el triple del 3,2% que autorizó la Secretaria de Comercio para los productos que no están incluidos en los 2.000 productos congelados del programa Precios Justos.