El dólar cerró la última rueda del mes en baja, a $38 promedio en los bancos, dándole un poco de paz al mercado tras las escaladas desorbitantes en su precio durante el resto de la semana, que lo llevó a un máximo de $42 el jueves. 

La mano del Banco Central estuvo presente durante toda la jornada, mediante la ejecución de tres licitaciones, en las que vendió un total de u$s250 millones para intentar frenar su alza, calmar a la City para que no se le salga de control la situación y, a la vez, que cierre por debajo del valor del jueves, sobre todo porque al ser la última jornada de agosto no quería convalidar precios mayores por los pagos de posiciones de futuros. 

Esta "vigilancia" oficial sobre las operaciones tuvo su correlato en el volumen total operado, que cayó 13% frente a los datos del día previo, para totalizar u$s648,4 millones.

El resumen igual deja preocupado al mercado respecto a lo que vendrá los próximos días, ya que en toda la semana el tipo de cambio se devaluó 19% (subió $6), en el mes acumula 34,5% ($9,5) y en todo el año el peso ya se depreció 97,6 por ciento.

Datos que realmente generan un gran interrogante sobre el impacto que esta suba tendrá en los precios de la economía, sobre todo en aquellos productos y servicios atados al dólar, como por ejemplo son los combustibles.

La clave para los analistas que puede generar una calma en la corrida cambiaria, está centrada en dos aspectos fundamentales: confianza y billetera verde.

Por un lado, en la City hace mucho ruido las contradicciones e, incluso, falta de detalles por parte del Gobierno respecto a qué política económica desea establecer y llevar a cabo. Algo que genera incertidumbre en todos los niveles. 

Es que más allá del respaldo que recibió el Ejecutivo durante la jornada, al menos desde lo discursivo, por parte del Fondo Monetario Internacional (FMI), queda poco claro respecto a cómo el Gobierno piensa reducir el déficit fiscal, reactivar la economía y parar la salida de divisas a través de un método que no sea una debastadora devaluación -como la de estos días-, en un entorno donde no hay ingresos genuinos de las mismas.

Es decir, frenar la falta de confianza que sobrevuela en el mercado con un plan sólido y tangible para salir de la crisis. Esto es adicional al anuncio de la jornada por parte del Ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, respecto a medidas que se comunicarán el lunes.

Cabe aclarar que el FMI dijo el viernes que estaba trabajando en estrecha colaboración con las autoridades para fortalecer el programa económico bajo su respaldo y expresó su confianza en que Argentina superaría sus dificultades actuales.

En cuanto a la "billetera", el Gobierno necesita en este momento poner los dólares sobre la mesa para poder calmar al nervioso mercado, y así poder dar algo de tranquilidad. Aunque, justamente, es un recurso que no le sobra en estos momentos.

De hecho, de nada alcanzó el adelanto de u$s15.000 millones del crédito del FMI, en todo agosto ya vendió en la plaza u$s2.300 millones, cifra que ni siquiera sirvió para frenar la escalada imparable del valor de la divisa estadounidense.

Para demostrar esta "fortaleza" y tranquilizar a la City, el Banco Central anunció la ejecución de tres subastas durante la jornada para controlar al precio.

La primera de ellas fue de $75 millones a las 10:50, que se colocaron en su totalidad, a un precio de $37,62.

La segunda fue a las 12:50 por otros u$s100 millones, también vendidos por completo, a un precio de $37,30.

En la tercera y última de u$s500 millones, realizada sobre el final del día, a las 14:57, terminó colocando sólo u$s75 millones a un valor promedio de corte $36,93.

Se observó que a partir de estas intervenciones, el precio del billete estadounidense comenzó a ceder de a poco. Así, comenzó la rueda cotizando a un máximo de $39, para luego empezar a descender hasta cerrar a $36,85. Es decir, el mayorista bajó 2,1% en toda la jornada, unos 75 centavos menos. 

"Un clima algo más distendido y algo de oferta privada colaboraron con la estrategia oficial para recortar parcialmente la fuerte suba del dólar en la semana", resumió Gustavo Quintana de PR Cambios. 

Por su parte, Fernando Izzo de ABC Cambios afirmó: "Con esta colocación acertada de dólares por licitación, que descomprimió a los compradores con sólo u$s250 millones, el Banco Central logró calmar la demanda del mercado y la recuperación del peso en cierta medida".

Esta mayor tranquilidad se trasladó a la plaza minorista, donde el promedio cerró a $38, según surge del relevamiento del BCRA en las pizarras de las principales entidades que operan en la City porteña.

Así, por ejemplo, el Nación cerró con una baja de 80 centavos respecto de la rueda anterior a $36,20 para la compra y $37,40 para la venta. Este fue la menor cotización de la plaza, junto a la del Banco Ciudad.

El valor máximo ofrecido en las pizarras de la City finalizó el viernes a $38,50 en las sucursales de Patagonia y Santander. Luego se ubicó el BBVA Francés, con un valor de venta de $38,49.

En la plaza informal el blue retrocedió $2,5 para negociarse a $37,5, igualmente se ubicó 50 centavos por debajo (-1,3%) del promedio minorista oficial.

Palabra del FMI

Un dato que el mercado evaluó fueron las palabras del vocero del FMI, Gerry Rice, quien confirmó que el organismo está trabajando con el Gobierno para fortalecer el acuerdo a la luz de "reciente evolución de los mercados".

Pero aclaró: "Christine Lagarde recién recibirá al ministro de Hacienda Nicolás Dujovne el martes para concluir conversaciones y presentar el plan revisado al buró del organismo". Al mismo tiempo, Rice enfatizó que "la Argentina tiene el completo apoyo del Fondo".

El comunicado del organismo, firmado por el vocero jefe Gerry Rice, aparece un día después de que el funcionario de Cambiemos anunciara que viajará a Washington con el objetivo de cerrar los adelantos de desembolsos del crédito por u$s50.000 millones firmado meses atrás y que el lunes anunciará un nuevo paquete de medidas para bajar el déficit fiscal a menos de 1,3%.

Ese ajuste es que está ultimando Dujovne con el Presidente Mauricio Macri, antes de su viaje, y que tendrá correlación a los anuncios que se realizarán el lunes que viene sobre la toma de medidas para el recorte del déficit fiscal.

"Estuve trabajando con mi equipo. Luego me reuní con el Presidente (Mauricio Macri) preparando el detalle de las medidas complementarias que vamos a estar implementando para avanzar en la reducción del déficit. Eso permite que la Argentina tenga menos necesidad de financiamiento el año próximo", explicó el funcionario el jueves a la tarde en charla con periodistas en la Casa Rosada.

"El techo del dólar va a depender de cuán bien hagamos las cosas. Estamos haciendo todo el esfuerzo para llevar tranquilidad a los argentinos", afirmó.

Y destacó: "Tenemos mucha confianza de que va a llegar a buen puerto, es el único rumbo, vamos por el buen camino".

En declaraciones a la prensa en el Salón Sur de la Casa Rosada, el integrante del Gabinete agregó: "Estamos convencidos de que la manera en que vamos a restablecer la tranquilidad de todos los argentinos es estar cada vez menos expuestos a la volatilidad del mercado necesitándolo menos", señaló.

"Pretendemos despejar todas las dudas que puedan tener los inversores y los argentinos acerca del futuro", añadió.