Santander presenta a su nuevo CEO y apunta a la transformación digital
El Banco Santander anunció el nombramiento como presidente ejecutivo de la entidad a Andrea Orcel, hasta ahora presidente del banco de inversión UBS.
Orcel sustituirá desde el 1º de enero a José Antonio Álvarez, quien pasa a ser presidente ejecutivo de la división española del grupo bancario.
El nombramiento de Orcel plantea dudas sobre si el Banco Santander podría volver a una estrategia de crecimiento centrada en adquisiciones.
La presidenta del grupo, Ana Botin, dijo que la entidad se centraría en la transformación digital y en el crecimiento orgánico del negocio.
"Ayer (por el martes) anunciamos algunos cambios. Andrea Orcel va a ser el nuevo consejero delegado del grupo. Se ha especulado si viene a cambiar la estrategia, la estrategia la tenemos clara, vamos a seguir siendo un banco como somos", dijo a periodistas en un evento en Madrid.
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"Un banco comercial en diez países, pero un banco que tiene una estrategia digital mucho más avanzada de lo que hasta ahora hemos querido contar", agregó en una presentación del banco digital Openbank.
"Andrea, con José Antonio y conmigo, nos va ayudar a ejecutar esta estrategia que está ya en marcha, que es digitalizar los bancos, realmente ser como grupo, no sólo Openbank, sino todo el grupo, todos los bancos, ser una plataforma abierta y responsable de servicios financieros única", dijo Botín.
Antes de dirigir el banco de inversiones UBS, Orcel trabajó para Bank of America Merrill Lynch.
Según informó el Banco Santander en un comunicado, “la experiencia internacional de Andrea Orcel y su conocimiento estratégico del negocio de banca comercial fortalecen al equipo del banco y nos ayudarán a continuar ejecutando nuestra estrategia, cuyo objetivo es ser el mejor banco comercial".
Orcel "conoce a fondo el negocio de la banca comercial y tiene amplia experiencia en gestión de equipos en organizaciones más horizontales y colaborativas, tanto en Europa como en América. Tendrá un importante papel en la construcción de plataformas digitales integradas para el Grupo, al tiempo que preservamos nuestro modelo de filiales".
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“Estoy muy orgulloso y contento de ir a Santander como consejero delegado y trabajar con Ana, José Antonio y todo el equipo para que Santander siga siendo una referencia de la banca mundial. Mi prioridad inmediata es reunirme con tantos colegas como sea posible y conocer su visión sobre el banco”, afirmó Orcel.
La reestructuración de la administración del Banco Santander ocurre en un momento delicado pues dos de sus tres principales mercados, Gran Bretaña y Brasil, están en proceso de cambios.
En el segundo trimestre de este año, el Banco Santander publicó que había registrado un beneficio neto de 1.690 millones de euros, en baja de 3%, en particular por el costo que significó la compra de la cartera del también español Banco Popular.
El Banco Popular, que fuera la sexta institución del sector en España y, al borde de la bancarrota, fue adquirido por el Santander por un euro simbólico en junio de 2017.
A principios de 2019, el Banco Santander presentará su nuevo plan a medio plazo, siguiendo la misma estrategia que anunció en 2015: hará foco en vinculación de clientes y construirá una plataforma digital e integrada en todo el Grupo.