iProfesionaliProfesional

Explota el dólar blue Conurbano: ya se vende a este precio récord y así funcionan las cuevas

A pesar de las recientes restricciones del Banco Central para frenar a los "coleros digitales", la práctica del puré sigue viva
23/07/2020 - 18:17hs
Explota el dólar blue Conurbano: ya se vende a este precio récord y así funcionan las cuevas

El salto que dio el dólar blue este jueves, que llegó a los $136 y se colocó cerca de un nivel récord, no deja de generar preocupación en el mercado. Sin embargo, en las afueras de la acotada City porteña el escenario genera más alerta: en el conurbano bonaerense las "cuevas" llegan a vender el paralelo a $142.

Un hecho que demuestra la sed de dólares imperante es que, a pesar del precio aparentemente exagerado del blue en el Gran Buenos Aires, en los sitios de venta se ven colas de compradores que convalidan la cotización.

¿Por qué hay una renovada actividad alrededor del blue? Los expertos señalan que el origen de esta tendencia se puede encontrar en la brecha que existe entre el precio del dólar oficial y el blue.

El hecho es que cualquier puede hacerse de u$s200 a $96,61 (cotización promedio de cierre de este jueves) y luego venderlos en las "cuevas conurbanas", donde se puede conseguir alrededor de $135 por cada billete verde (según el lugar, el precio de compra puede llegar hasta los $138). De esta manera, con el procedimiento llamado "puré", se hace una diferencia superior a los $7.000.

El recalentamiento de la cotización del dólar blue se da luego de que la semana pasada el Banco Central lanzó una avanzada contra los "coleros digitales", que supuestamente venden o transfieren su cupo personal de u$s200 a otros. Es decir, quienes realizaban "puré" de manera virtual, mediante el home banking.

Tras una serie de medidas, lineamientos para bancos y advertencias sobre sanciones, el BCRA terminó "escrachando" a un listado de más de 350 personas físicas a las que se les bloquearon las cuentas.

En el Conurbano se pueden observar colas frente a locales que en realidad son cuevas

Las "cuevas" del Gran Buenos Aires

La manera más contundente de comprobar que este incesante flujo de billetes verdes que en un abrir y cerrar de ojos se convierte en pesos se manifiesta principalmente en muchas localidades del Gran Buenos Aires. Sin importar de la fase de la cuarentena que se trate, se observan largas colas frente a locales que bajo la apariencia de ser receptoras de pagos de servicios, no son otra cosa que cuevas que funcionan sin ningún problema.

Quienes operan con ellas suelen hacerlo aconsejados por un conocido que ya operó en ese lugar y pese a que las cuevas tienen incentivos como para "hacer las cosas bien", los riesgos de que haya algún entregador que facilite una salidera siempre están.

Con su expansión territorial se logró superar una de las mayores barreras que era la de poder llegar hasta las tradicionales cuevas del microcentro porteño, a partir de las limitaciones impuestas para la utilización del transporte público por cuestiones sanitarias. Dicho de otra manera, el negocio se desconcentró para expandirse en forma radial más allá de la General Paz.

"Por lo general, si bien hay mucho movimiento de personas, la gran mayoría de las operaciones ronda entre u$s200 y u$s500 y es muy raro que alguien venga para cambiar u$s3.000 o más. Por lo general suelen ser comerciantes que tienen que afrontar gastos y no pueden abrir sus negocios", admite una persona allegada a una de estas casas de cambio clandestinas.

Cambio con entrega a domicilio

En cuanto a las operaciones que se hacen con delivery, estas bajaron mucho no solo en cantidad sino también en lo que hace a los montos. "Nadie se la quiere jugar a andar con mucha plata por la calle, así que se hacen sólo a quienes están cerca y son conocidos. La idea es poder bancar los gastos con las operaciones que aparecen", agrega la misma fuente.

El delivery también tiene su segmento de clientes
Hay otro delivery, el de dólares: en las últimas semanas diminuyó su actividad.

De hecho, en lo que va de la cuarentena, son los lugares que más público convocan, a la par de las sucursales bancarias y curiosamente de las farmacias.

Para las "oficinas recaudadoras" el negocio es más que rentable, pues manejan un spread del orden de los 5 pesos entre el precio de compra y el de venta.

En cuanto a esta otra punta, que más allá de alguna oscilación en determinados momentos, la oferta muestra cierta estabilidad que en buena medida se debe a ese flujo de pequeños vendedores, mientras que la demanda se limita a personas de mayor poder adquisitivo que ya completaron su cupo mensual de u$s200, aquellos que deben cancelar compromisos en dólares y no pueden acceder al mercado oficial o, simplemente, los que operan en la marginalidad.

Temas relacionados