Llegó el dólar Qatar, que encarece los gastos en dólares con tarjeta como consecuencia de la aplicación de una nueva percepción del 25% a cuenta de Bienes Personales sobre esos consumos en dólares. Así, el nuevo tipo de cambio que surgirá para pagar estas obligaciones en pesos es de $314, poco más de un 14% más alto que los $ 275 que cotizaba hasta el momento del anuncio.

Tal como relata el director de CyT Asesores Económicos, Camilo Tiscornia, lo que sucedió es que "el Gobierno logró acumular reservas tras la llegada de Sergio Massa al Ministerio de Economía, con la implementación del dólar soja por un mes, pero, ahora, las tienen que cuidar porque en los meses que vienen no van a entrar prácticamente dólares del campo". Esto es debido a que se adelantó parte de la liquidación el mes pasado y porque la cosecha de trigo no viene bien entre otros factores.

Ante esa realidad y teniendo en cuenta se espera una salida de u$s2.000 millones de reservas por turismo de acá a fin de año, incentivada por el Mundial de Fútbol en Qatar, la llegada de esta medida era una noticia que se esperaba que llegue hace tiempo, pero ¿cuáles son las primeras repercusiones en el mercado?

Dólar Qatar: un tipo de cambio más

"Es un dólar más de todos los que tenemos", dice a iProfesional el operador de PR Casa de Cambio, Gustavo Quintana, quien considera que "habrá que ver si tiene el efecto deseado por el Gobierno, que es disminuir la demanda en el mercado oficial".

Y es que, tal como señala el economista Federico Glustein, es muy probable que con este paso, por un lado se desalienten los gastos en dólares con tarjeta, pero eso hará, por otro lado, que "quienes crean que es un tipo de cambio caro, vayan al dólar blue a buscar las divisas que necesiten para viajar". No es lo más deseable, claro está, pero paradójicamente, eso ayudaría a perder menos reservas dado que las cuentas del blue y el oficial no se cruzan.

Sin embargo, ese no sería el único efecto rebote que tendría la llegada del dólar Qatar en los otros tipos de cambio, ya que el economista Christian Buteler advierte que, tal como estamos viendo en los últimos días, la irrupción de este nuevo tipo de dólar presione al alza sobre los mercados alternativos. De hecho, el blue saltó desde los $272 hasta los $281 en tres días (fin de semana extra largo de por medio).

Con la suba del dólar tarjeta, pueden dispararse los dólares alternativos.

El dólar Qatar podría volver a ser el más barato

"Eso puede llevar a que nuevamente el dólar tarjeta sea el más barato, pero en un nivel más alto que el que manejaba hasta ahora", diagnostica Buteler, quien aclara que esto no sucederá de inmediato, pero sí en el mediano plazo.

Así para Glustein, esta decisión del Gobierno genera más ruido en el mercado, que ya tiene mucho de por sí, porque es un tipo de dólar más que se suma a los casi 20 que ya tenemos los argentinos y señala que esto "muestra a las claras que la medida del dólar soja sirvió en su momento, pero requiere de un dique de contención para que su efecto no se diluya".

Y en este punto la considera una medida necesaria para el Gobierno, sobre todo teniendo en cuenta las exigencias de reservas del Fondo Monetario Internacional (FMI) en materia de reservas. Para cumplirlas, es esencial que se guarden los dólares del Banco central (BCRA), según su visión.

Suba del dólar tarjeta: ¿es una medida regresiva para el ingreso?

Sin embargo, opina, por otro lado, que "es una medida regresiva para el ingreso" porque anticipa que quienes crean que es un tipo de cambio caro, van a ir al dólar blue, pero aquellos que tienen mayor poder adquisitivo verán como un beneficio interesante de seguir gastando en dólares con tarjeta la devolución del Impuesto a las Ganancias.

"Para quienes no pagan ese tributo o lo hacen en un porcentaje bajo no es un tema y buscarán comprar dólares en otros mercados, por lo que a la clase media/media alta que puede guardar dinero para viajar es a la que más afecta esta decisión de aplicar un tipo de cambio diferenciado", explica Glustein. Así deja en claro por qué lo considera regresivo.

Pero el objetivo del Gobierno no es pensar a quiénes afecta esta medida, sino que tiene el foco puesto en cuidar las reservas. "Y uno de los frentes a atacar es el de viajes porque se están yendo muchos dólares por ahí. En el mercado de cambios, se pierden alrededor de u$s1.100 millones por mes en el rubro servicios, que incluye al turismo emisor", ilustra Tiscornia.

El BCRA logró acumular dólares, pero tiene que preservar la acumulación que pudo alcanzar.

Dólar Qatar: una medida que llega tarde

Es por eso que, para Buteler, es una medida que llega tarde. ¿Por qué? Porque señala que, en agosto, se gastó lo mismo con dólar tarjeta que en julio, cuando suele ser un mes de bajo nivel de gastos en turismo. Y explica que esto se debe a que "hace dos meses que se venía hablando de este tema, por lo que el que pudo cancelar los gastos de un viaje lo hizo ahora para evitar esto".

Pero, por otro lado, Tiscornia apunta que la implementación del dólar Qatar también presiona sobre la inflación porque advierte que los precios se van a fijar con ese tipo de cambio, por un lado, y, por otro, porque anticipa que, en la medida en que el precio quede arriba del blue y del MEP, se incentivará la demanda en esos mercados y los pueden hacer subir cerca de $314.

Lo que viene para el dólar

Estas son las primeras observaciones del mercado sobre el dólar Qatar, con el que el Gobierno busca resolver una problemática que tiene el BCRA y es que el funcionamiento de pago de tarjetas de crédito lo obliga, de alguna manera a subsidiar los viajes de los argentinos al exterior, un fenómeno preocupante y muy dañino en un contexto en el que se ve forzado a controlar las importaciones, recortar gastos para reducir el déficit fiscal y tomar distintas medidas que ayuden a fomentar las exportaciones para garantizar la acumulación de reservas.

¿Tendrá éxito o no? El consenso en la City pareciera ser que es "un parche" y no una solución a largo plazo para un problema mayor, como es el desdoblamiento cambiario. Si bien la mirada que aporta suele ser un termómetro que ayuda a ir delineando tendencias, tal como señala Quintana, aún es muy temprano para diagnosticar efectivamente el resultado que tendrá y "habrá que esperar unos días para ver qué pasa en concreto".