Colapso en el Merval: pérdidas de u$s8.000 millones y los sectores que evitaron la caída

El mercado argentino vivió un lunes negro: el Merval se desplomó y dilapidó u$s8.550 millones en valor. Aunque el rebote del martes logró recuperar apenas u$s430 millones, el impacto en los inversores fue inmediato y dejó en evidencia la fragilidad de algunos sectores y la solidez de otros.

Bancos, los más golpeados

Los bancos se posicionaron como los grandes perdedores en ambas ruedas. Su sensibilidad a factores macroeconómicos los expone especialmente: un dólar más alto deteriora balances y un apretón monetario reduce crédito y rentabilidad.

Energía y Vaca Muerta, un refugio relativo

En contraste, las petroleras lograron resistir mejor la caída, ubicándose entre las que menos perdieron y las que más se recuperaron. Los activos vinculados a Vaca Muerta incluso mostraron retornos positivos, consolidando la percepción de fortaleza del sector.

El sector energético muestra fundamentos sólidos incluso en escenarios adversos, según los inversores. Por el contrario, el sector bancario se perfila como el más vulnerable del equity argentino.

Desde Delphos explicaron que "los inversores priorizan exposición a compañías vinculadas a Vaca Muerta, donde el potencial de crecimiento y la menor sensibilidad cíclica las convierten en el segmento más atractivo para administrar riesgos dentro de una cartera de equity local".

Que dejó el lunes negro tras la derrota en las elecciones bonaerenses

Una vez conocidos los resultados electorales, las acciones líderes reaccionaron con importantes pérdidas, pese a que con el transcurso de la rueda se fueron morigerando, no obstante lo cual, sobre el cierre del mercado, el Merval en pesos perdía más del 13% y en dólares otro 16,2%. Con este resultado, en lo que va del año, las caídas son del 31.6% y 43,6%, respectivamente.

En lo que hace a la capitalización bursátil del Panel Líder, este dejó muy atrás aquel nivel de u$s50.000 millones de la última rueda para descender hasta los u$s43.300 millones, lo cual implica una pérdida de u$s6.700 millones.

Entre las compañías líderes, las mayores bajas en millones de dólares correspondieron a:

• YPF: u$s1.578
• Grupo Galicia: u$s1.047
• TGS: u$s708
• Macro: uSs689
• Pampa: u$s590

De esta manera, cinco de las principales compañías del mercado acumulan una pérdida de más de u$s4.600 millones, que representan el 70% del deterioro de la capitalización bursátil.

Luego del desplome postelectoral, el martes 9 de septiembre los mercados argentinos mostraron señales encontradas. Los ADRs y las acciones locales comenzaron la rueda con avances moderados, en un intento de recuperación técnica después del derrumbe del lunes, cuando las pérdidas llegaron hasta el 25%. Sin embargo, con el correr de la jornada, el rebote se fue debilitando y varios papeles revirtieron las subas iniciales.

El trasfondo político siguió marcando la agenda. La derrota de La Libertad Avanza en la Provincia de Buenos Aires el domingo golpeó de lleno en las expectativas de gobernabilidad. Para los inversores, la lectura fue clara: mayor fragilidad política implicaba más dudas sobre la viabilidad de reformas y compromisos fiscales.

Ese escenario, sumado a la presión cambiaria y a las recomendaciones negativas de bancos internacionales, había provocado una jornada inicial de ventas masivas en bonos y acciones. El martes, en cambio, la dinámica fue más matizada: los activos locales buscaron piso, pero la volatilidad persistió en toda la plaza financiera.

La incertidumbre, lejos de disiparse, siguió condicionando las decisiones de los operadores. La rueda dejó un saldo dispar: mientras los bonos en dólares lograron rebotar con fuerza, las acciones cerraron mixtas y el índice Merval volvió a ceder.