El dólar en el mercado de futuros no afloja: qué precio pactan inversores para diciembre

El mercado comenzó a palpitar las elecciones nacionales de fin de mes, y las señales son que "se terminó el dólar barato"; los precios de los billetes financieros comenzaron a escalar con fuerza en los últimos días, en un marco en que las restricciones cambiarias volvieron a instalarse en la City. 

En medio de esta tensión cambiaria, donde se esfumó en pocos días el apoyo verbal de Estados Unidos, los analistas consultados por iProfesional esperan días de "mucha demanda y poca oferta" de dólares. Y, en consecuencia, una mayor presión.

Incluso, la nueva referencia se encamina a uibcarse por encima de los $1.500 en los que se ubica hoy el dólar MEP.

En cifras, el dólar MEP trepó en las últimas cuatro ruedas 9% y el contado con liquidación, que es la referencia de "salida" de los dólares para empresas e inversores, aumentó 10% de precio en el mismo lapso, para ubicarse en los $1.545. 

Es decir, el dólar financiero se llegó a encontrar el martes 145 pesos más arriba que el dólar oficial minorista ($1.400), una brecha del 10%. Aunque este miércoles aceleró más el comercializado en bancos, ya que avanzó 50 pesos, se estableció en $1.450 y la distancia con los financieros se acortó.

Este desfasaje en el mercado cambiario se debe a varios factores, donde juegan, fundamentalmente, las tensiones electorales y la cobertura de los ahorristas al respecto. Y se suma a la mayor demanda porque muchos trabajadores comenzaron a cobrar sus salarios, y vuelcan a dolarizar lo que pueden.

A ello se le suma un dato fundamental: mucha de esta demanda se empezó a trasladar el martes desde el mercado oficial hacia la plaza bursátil (Mep), de forma obligatoria, porque las billeteras digitales "apagaron" la venta de dólares oficiales. 

En concreto, por ejemplo, Mercado Pago y Cocos, suspendieron la venta de dólar oficial y comenzaron solo a vender Mep, hecho que llevó a que el precio de esta referencia cambiaria escale unos 50 pesos (2,7%) en la última jornada, hasta alrededor de los $1.500.

"Nos pidieron apagar", dijo Ariel Sbdar, fundador de Cocos, en redes sociales, ante las quejas de los usuarios.

Y desde un comunicado oficial de esta billetera, sumaron: "A las 12:30, el banco proveedor solicitó a Cocos cortar el servicio de operatoria de dólar oficial, el cual permanecerá suspendido hasta nuevo aviso. No se ha informado el motivo de dicha solicitud".

Algo similar ocurrió en Mercado Pago, que también, por el mismo motivo, quitó abruptamente el martes la venta de dólar oficial. Por ende, los usuarios pasaron de tener un precio de $1.400 (oficial) a tener que convalidar un precio para comprar divisas de $1.485 (Mep).

Por lo pronto, esta medida no se trató de una iniciativa del Gobierno de cerrar más el cepo para evitar que se le "escapen" dólares de las reservas, algo que sí ocurrió el viernes pasado, cuando reestableció la normativa que las personas que compren dólar oficial no pueden ir a venderlos al Mep antes de los 90 días.

En este caso, este impedimento de acceso mediante billeteras a la plaza oficial se debe a un tema de oferta y demanda, y su vínculo con los encajes que deben cumplir los bancos.

En concreto, las billeteras no pueden vender de manera directa "dólar oficial", sino que lo realizan a través de un tercero, es decir, a través de un banco intermediario. Casualmente, en los casos de Mercado Pago y Cocos es el Bind (Banco Industrial).

En medio de este revuelo, el propio Banco Central salió a comunicar: "que no hay ningún cambio normativo para la compra de dólares por parte de las personas humanas, quienes podrán seguir accediendo al Mercado Libre de Cambios (MLC) a través de los bancos y entidades autorizadas".

Por eso, la entidad monetaria aclaró que: "La compra-venta de dólares está regulada por el BCRA y sólo puede realizarse a través de entidades autorizadas. Esto significa que únicamente los bancos y las casas de cambio pueden canalizar operaciones de moneda extranjera. No está permitido tercerizar las operaciones".

Una directa alusión a lo ocurrido con las billeteras virtuales, con el "cierre" de la ventana oficial, y a aclarar que no tienen permitido operar en esta plaza. 

El dólar en el mercado de futuros supera los $1.600 para fin de año

El factor que más preocupa a los analistas es que la tensión electoral ya se metió en la discusión, a menos de un mes de la votación, y parece haberse licuado el "efecto Trump". Por ende, la incertidumbre se focaliza ahora en qué puede pasar con el precio del dólar y si pueden sumarse, o no, más restricciones.

Como referencia, en el mercado de opciones y futuros del Matba-Rofex, las operaciones convalidaron subas en el precio negociado para el dólar mayorista de más de 50 pesos en casi todas las posiciones. Así, se negoció para fines de octubre a $1.496,5 y para fin de diciembre llega a los $1.601,5.

"Creo que el ruido político y las dudas sobre qué tipo de cambio existirá post 26 de octubre es un driver para las subas en los precios. Las restricciones también influyen. Un proceso de dolarización pre electora habitual, lamentablemente", detalla Fernando Baer, economista de la consultora Quantum.

Para Pablo Repetto, jefe de Research en Aurum, es contundente: "Se termina el dólar barato que el Tesoro debería haber comprado, pero que adquirió menos de lo que se esperaba. Hay poco margen para que el dólar se mantenga relativamente bajo, hay algunas restricciones adicionales que se han puesto en las últimas semanas que hacen presumir que podría haber más restricciones para adelante".

Asimismo, este experto indica que también "está todo el proceso de demanda de dólares preelectorales, que son habituales en este tipo de casos. Para adelante, uno tiende a pensar que el esquema cambiario y monetario debe ser reemplazado por algo mucho más consistente".

En tanto, Sebastián Menescaldi, economista y director asociado de Eco Go, suma: "Existen varios motivos que presionan al alza al dólar, como que la gente está empezando a cobrar, la cobertura por elecciones y mucha inestabilidad, con un rescate incierto de Estados Unidos. A ello se agrega que la compra de reservas del Tesoro fue mucho menor a lo esperado. En síntesis, se viene mucha demanda y poca oferta, y por eso sube el tipo de cambio".

Por su parte, Federico Glustein, economista y docente de la UBA, opina: "Creo que es una situación particular de expectativas sobre la capacidad que tiene el Gobierno para hacer frente a las obligaciones y un rechazo a las medidas electoralistas que generaron desconfianza en el programa económico".

Sumado a eso, indica que "hay una presión sobre la única posibilidad que tienen las personas jurídicas para girar recursos al exterior vía contado con liquidación, pero, también, de hacer frente a la eventual falta de divisas futura y cubrirse ante un posible cambio de esquema y escalada del tipo de cambio tras las elecciones".

Por ende, Glustein considera que el Gobierno tiene que "dar respuesta a esta anomalía, pero para sostener la estabilidad post elecciones podría dejar un tipo de cambio flotante libre, y dejar techos y bandas, pero con una suba eventual que podría superar los $1.500".

Finalmente, Andrés Salinas, economista e investigador de la Universidad La Matanza (Buenos Aires), reflexiona: "La cuestión pasa por las restricciones, cuando ponés imposiciones a la compra empieza a haber brecha naturalmente. Más allá de esto, los fundamentos de las presiones siguen iguales, el Tesoro compra pocos dólares y sigue habiendo dudas electorales y sobre qué pasará con el esquema de bandas".-