FINANZAS PERSONALES

Bonos y acciones 2026: en qué conviene invertir en el último tramo del año

Tras un sorpresivo triunfo electoral del oficialismo y un acuerdo clave entre Argentina y Estados Unidos, la cartera de los inversores se modifica
Por Mariano Temperini | Team Leader de Banca Digital de PPI
FINANZAS - 17 de Noviembre, 2025

Estas últimas semanas el mercado se mostró eufórico. Tras un inicio marcado por el pesimismo, el giro electoral de octubre desató un "rally" que quedará en la historia reciente de las finanzas locales. La victoria del oficialismo, percibida por los inversores como un mandato renovado y una señal de apertura al diálogo político, transformó el panorama de la noche a la mañana.

En cuestión de días, el índice Merval experimentó su mayor suba histórica en una semana en el mes de octubre. El apetito por el riesgo argentino regresó con una fuerza inusual, impulsando a los bonos hard dollar (Globales y Bonares) a alcanzar sus máximos valores desde la reestructuración de la deuda.

El Riesgo País se derrumbó cientos de puntos básicos, un salto sin precedentes que refleja una mejora en la percepción de sostenibilidad de la deuda. El optimismo no se limitó a la renta fija en dólares.

En el frente de los pesos, los bonos ajustables por CER (inflación) comprimieron sus tasas a niveles de un dígito, un signo claro de que el mercado interno comenzó a anclar sus expectativas en una trayectoria de estabilización y desinflación más firme. Esta expectativa generalizada se sostiene en dos pilares fundamentales: la expectativa de reformas estructurales y la necesidad del Tesoro de acumular reservas.

Reordenamiento de carteras

El panorama para inicios de 2026 sugiere un cambio de estrategia para los inversores: pasar de la especulación a la exposición estructural. 

Renta Fija en dólares (Soberana):

Estrategia: Aumentar la exposición a los Bonos Globales y Bonares de mayor plazo (vencimientos más allá de 2030), ya que estos son los que mejor capturan la potencial baja del Riesgo País y el regreso de Argentina a los mercados de deuda.

Renta Fija en dólares (Sub-Soberana):

Estrategia: Mantener una parte de la cartera en Bonos Corporativos y Bonos Provinciales de buena calidad crediticia. Se sugiere buscar oportunidades en la deuda provincial, donde la relación de rendimiento frente al bono soberano se haya ampliado, como en el caso de ciertos bonos de la Provincia de Buenos Aires o Córdoba, y bonos corporativos de empresas ligadas a energía y telecomunicaciones (ej. YPF y Telecom).

Renta Fija en Pesos:

Estrategia: Priorizar la protección contra la inflación a través de Bonos ajustables por CER en el tramo medio de la curva.

Renta Variable (Acciones):

Estrategia: Aumentar la ponderación en acciones líderes del Merval. El foco debe estar en el Sector Financiero (Bancos), que se revalorizan con el optimismo de los mercados emergentes, y en el Sector de Servicios Públicos (Utilities), cuyos múltiplos de valuación resultan atractivos ante la perspectiva de un esquema regulatorio más estable.

La euforia de finales de año puso los cimientos. El desafío de aquí a 2026 es que las señales políticas se traduzcan en leyes y hechos concretos. Si Argentina logra sostener el círculo virtuoso de consolidación fiscal, remonetización y reformas, el mercado de capitales está listo para entrar en un ciclo expansivo de mediano plazo.

Te puede interesar

Secciones