Aunque es frecuente escuchar que los sistemas de salud del mundo son diferentes entre sí, si analizamos los del mundo occidental podemos encontrar muchas coincidencias.

¿La causa? Los sistemas de salud occidentales, tal como la conocemos hoy, fueron gestados por la interrelación de tres modelos que tuvieron lugar desde fines del siglo XIX hasta la actualidad:

Los modelos de financiamiento, principalmente bismarckiano y beveridgeano. El primero constituido en Alemania a fines del siglo XIX, vinculado al financiamiento a través de la seguridad social para la protección de los trabajadores y el segundo, gestado en Inglaterra en la década de 1940, el cual plantea las bases de un modelo organizacional de tipo público, nacional y financiado por el Estado.

Los modelos de organización estructural: el modelo hospital céntrico y el modelo territorial. El primero, concentrado en hospitales, mientras que el segundo se trata de una propuesta descentralizada del sistema y está vinculado al desarrollo de centros de atención primaria.

El modelo de organización de gestión: desde la década del 60´ ha preponderado el "modelo médico hegemónico". Esta definición, muchas veces de carácter crítico, hace referencia al desequilibrio en la participación en la toma de decisiones de los médicos frente al resto de las disciplinas.

Los sistemas de salud del mundo tienen diferencias, pero también tienen varias similitudes

Nos encontramos frente a un sistema de salud diseñado desde su génesis con la mentalidad de una época y para una sociedad que muta continuamente. Nuestras vidas han cambiado drásticamente en los últimos 50 años. Sin embargo los sistemas de salud no lo han hecho, así como tampoco las leyes y demás normativas que lo regulan.

Sin dudas la pandemia ha acelerado la transformación digital en la salud y ha sido el puntapié para que muchas compañías de la industria adopten nuevas herramientas e inviertan en tecnología. Al mismo tiempo, allanó el terreno para que muchas organizaciones de tecnología orientadas a la salud (HealthTechs) surjan o crezcan. Este nuevo escenario evidencia que se están gestando las condiciones para un cambio de paradigma en los sistemas de salud.

Hacia un cambio de paradigma: la transformación del modelo de financiamiento

El cambio inicial está comenzando en el sector privado.

El avance de la tecnología permite el desarrollo de una oferta que hoy comienza por módulos prestacionales específicos. Distintas empresas empiezan a ver la oportunidad de generar módulos de cuidados nutricionales, psicología y coaching. Sin embargo, compañías no relacionadas directamente al sector, también están empezando a ofrecer sus servicios de estudios complementarios, como genética, diagnóstico o segunda opinión, a través de distintas plataformas en modelos b2c.

El modelo de financiamiento de la salud se está transformando

Por otro lado, el rol de alguno de los sectores que habitualmente no se vinculan a la salud, está cobrando relevancia. Es el caso de los bancos y las fintech que, impulsados por tecnología y aprovechando el desarrollo de canales de venta de prestaciones (seguros para casa, autos, etc.) están ganando protagonismo en la comercialización de prestaciones médicas.

Adicionalmente, el teletrabajo está trayendo cambios en la atención médica: cada día son más las personas que realizan su labor para lugares diferentes a los que residen y lo que nos obliga a reinterpretar los marcos normativos y el modelo de organización internacional de la salud. Aunque hoy la perspectiva de cobertura tiene un carácter nacional, es posible que en el corto tiempo se intensiven los convenios internacionales.

El modelo de organización estructural: una nueva modalidad de atención

En relación al modelo de organización estructural, uno de los principales cambios es la aparición de un nuevo sector de atención: el hogar.

Considerando que los costos de internación en una clínica pueden variar entre 500 y 2.500 dólares por día, según el caso, la posibilidad de la atención domiciliaria obliga a repensar la atención hospitalaria y las prestaciones que deben darse en ese entorno. Por otro lado, el desarrollo de la internación domiciliaria está demostrando ser una modalidad de atención en crecimiento, siendo cada vez más las personas que reciben altas prematuras recibiendo diferentes servicios en domicilio.

Sin embargo, la perspectiva hospitalaria no alcanza solamente al ámbito de la internación. Hoy en día, los hospitales cumplen función en otros dos sectores relevantes: la guardia y la atención de consultorios externos.

La primera, es la que siempre supuso no poder desvincularse del espacio hospitalario, puesto que el criterio de atención de guardia supone la urgencia o la emergencia. No obstante, este punto no es real, ya que diferentes estudios demuestran que hasta casi un ochenta por ciento de las consultas que se realizan a una guardia podrían ser atendidas en el ámbito extrahospitalario. Por esta razón, en el último tiempo e impulsado por la pandemia, el espacio de guardia se comenzó a resignificar con la posibilidad de recibir atención o mínimamente ser "triaggeado" de manera virtual.

Al referirnos al ámbito de consultorio externo estamos obligados a abarcar la problemática desde la atención de hospitales y las que se realizan en los centros de salud. Ambos dos, si bien difieren en el modelo de organización física, comulgan muchos puntos.

En vista de esto, el avance de la tecnología también propone al igual que cuando se refirió a la internación domiciliaria o la guardia virtual, la posibilidad de promover la atención en domicilio. Es importante destacar que esto no es la ruptura de la relación profesional de la salud -paciente, sino la reconfiguración de la misma a través de una modalidad mixta – presencial y virtual-. En estudios publicados recientemente en Inglaterra, más del setenta por ciento de los pacientes que recibieron atención domiciliaria refieren optar por repetir ese procedimiento.

Desde ya que el desafío próximo a afrontar es entender cómo estas dos modalidades deben dinamizarse, ya que una no es el remplazo de la otra, sino el complemento. Para esto, al igual que como sucede con la guardia virtual, es importante el desarrollo de guías de recomendaciones.

Para completar esta perspectiva, es importante destacar que la conformación del hogar como un espacio de atención no solo tiene un enfoque de costos. El tiempo de permanencia en una unidad clínica debe estar siempre justificada, puesto que las personas que permanecen sin un riesgo beneficio adecuado, pueden contraer las denominadas enfermedades nosocomiales. Esta a diferencias de las contraídas en ámbitos comunitarios habitualmente son más complejas y resistentes a medicamentos tradicionales

La transformación del modelo de organización de gestión

En lo que refiere al modelo de organización de gestión es importante abarcarlo desde la perspectiva de modelos inter y multidisciplinarios. Tal y como mencionamos previamente los modelos sanitarios han abordado un problema complejo principalmente desde la perspectiva médica, siendo que la organización de la salud, requiere el abordaje de diferentes disciplinas. En línea con esto, resulta importante entender que producto de la necesidad de resolución de problemáticas cada día más complejas, aparece una progresión hacia los modelos antes mencionados. El abordaje interdisciplinario en el sector de salud, hasta hoy solo se veía en algunos ámbitos particulares.

Posiblemente, los espacios de rehabilitación, sean el ejemplo existente más paradigmático de la interdisciplina. Pero esto no impresiona ser impresiona suficiente. El sistema de organización de salud requiere un abordaje complejo donde no solo es importante la participación de los médicos y de otros profesionales de las ciencias médicas, sino de otras disciplinas diferentes. Entre estos se pueden destacar economistas, licenciados en recursos humanos, ingenieros, sociólogos, etc. Por último y a fin de resolver de manera correcta las distintas problemáticas afrontadas en el sector salud, es importante entender que a veces los abordajes deben realizarse con carácter de interdisciplina y en otros casos de multidisciplina. Es decir, hay algunas problemáticas que deben resolverse con participación de múltiples disciplinas de manera simultánea; siendo que en otros momentos es importante hacer una división de tareas por especialidad.

Por otro lado, saliendo desde una perspectiva de perfil teórico una de las cuestiones que sobresalen al analizar el ámbito de salud es la falta de aprendizaje que el sector ha tenido de otras industrias. Si bien las cuestiones de fondo son completamente diferentes, cuando uno las compara al sector salud con industrias tales como el retail, se evidencia la diferencia en calidad de procesos y la usabilidad de los sistemas de estos últimos. Con sus diferentes matices, la experiencia de una compra en línea, es claro que ha superado, por ejemplo, la gestión de solicitud de estudios complementarios en el ámbito de la salud. Por esta razón, impresiona que los avances tecnológicos logrados por otras industrias, podrían tener un impacto positivo en la implementación en los sistemas de salud.

A modo de conclusión se puede establecer que los modelos hasta ahora conformados en los distintos países de Latinoamérica, tiene un modelo de financiamiento, de organización estructural, y de gestión conformados hace varias décadas y sin grandes variaciones. La necesidad de evaluar costos, el desarrollo de la tecnología y la necesidad de una actitud proactiva del sistema; permite pensar en una transformación del sector salud en el corto plazo impulsados por la demanda – representados en los pacientes – y la oferta -representado en las distintas organizaciones del sector-. La transformación es inminente, las condiciones están dadas.