La Administración Gubernamental de Ingresos Públicos (AGIP), el ente recaudador porteño, decretó una feria fiscal con alcance limitado para la percepción de los impuestos en la ciudad de Buenos Aires.

La Resolución 139/2020 de la AGIP estableció que "no se computarán respecto de los plazos procedimentales los días hábiles administrativos comprendidos entre los días 16 y 31 de marzo".

La AGIP explicó que lo que se suspende son "los plazos administrativos establecidos para los procedimientos vigentes vinculados con la determinación, fiscalización y percepción de los tributos, y la aplicación de sanciones por infracciones materiales y formales relacionadas con los mismos".

Pero aclara en su artículo 2° que quedan excluidos de la feria fiscal los plazos vinculados con la configuración de los tipos penales previstos en el Régimen Penal Tributario.

El titular de la AFIP, Andrés Ballotta, fundamenta la medida en que la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda disminuir la circulación de la población a los efectos de dificultar la transmisión del nuevo coronavirus (COVID-19), el cual ha sido declarado como una pandemia.

Ballotta afirma que, ante esta crisis sanitaria, resulta necesario resguardar a los contribuyentes y/o responsables, así como a los empleados públicos de la AGIP del posible contagio.

Esta decisión sigue a la feria judicial que definió la Corte Suprema de Justicia el pasado día 16 y la feria fiscal extraordinaria establecida el miércoles 18 por la titular de la AFIP, Mercedes Marcó del Pont.

Durante la feria fiscal extraordinaria de la AFIP, tampoco se computarán los plazos vinculados a la aplicación, cobro y fiscalización de los impuestos hasta el 31 de marzo.

La AFIP también licenció a todo su personal por abajo del rango de director y las guardias mínimas que estos establezcan para poder desarrollar sus tareas.

Los empleados de AFIP que no se desempeñen en áreas esenciales deberán trabajar en forma remota, para lo que el organismo prevé incluso inversiones en tecnología de urgencia.