El 2023 llegó con la inteligencia artificial como protagonista tecnológica y cada vez son más las empresas que apuestan a este fenómeno que hoy está -con mucha lógica- en boca de todos.

Según cifras de la CompTIA (una ONG estadounidense que reúne a miembros de la industria), el 91,5% de las compañías líderes en el mundo invierte en IA de forma continua.

Pero las empresas no son las únicas que ven el lado positivo. Por el contrario, los profesionales de distintas disciplinas analizan ventajas de poner en marcha herramientas con esta tecnología en su vida diaria.

Los contadores no son ajenos a esta nueva ola y, aunque está en una etapa inicial su adopción, saben que tiene una gran posibilidad de tornarse esencial en un futuro cada vez más cercano.

Esto nos lleva a la gran pregunta: ¿cómo afectará a una de las profesiones más antiguas? No hay que perder de vista que la contabilidad requiere años de capacitación y práctica.

Es fácil pensar que la industria es inmune a las grandes transformaciones. Sin embargo, estamos en un punto de inflexión. Y la naturaleza repetitiva y automatizada de muchas tareas contables nos ayudan a descifrar el gran valor que la IA puede aportar.

Baltasar Parcero, Analista Senior de Outsourcing de Expansion Argentina

¿Para qué puede utilizarse?

Si bien la lista puede ser muy extensa, hay al menos cinco tareas administrativas-contables que podrían mejorar sustancialmente con la aplicación de inteligencia artificial. Ellos son:

1. Automatización de procesos: la facturación, el registro de transacciones y el análisis de estados financieros, son algunas de las alternativas. Esto permite reducir la carga de trabajo de los contadores y minimizar el riesgo de errores.

2. Análisis predictivo: procesar grandes cantidades de variables puede ayudar a conocer el comportamiento futuro de las finanzas de una empresa. Estas predicciones son de gran ayuda para los contadores y directivos al tomar decisiones, así como planificar estrategias futuras.

3. Detección de fraudes: también puede ayudar a identificar patrones sospechosos en el historial financiero de una empresa, como transacciones no autorizadas, cambios repentinos en la frecuencia de movimientos o en el patrón de gastos. De esta manera, se puede detectar delitos de manera más rápida y eficiente para proteger tanto a la organización como a clientes y proveedores.

4. Mejora de la eficiencia: la contabilidad digital en conjunto con la IA puede impulsar la productividad de los contadores, lo que significa completar tareas en menos tiempo y con menos esfuerzo. Por ejemplo, automatizar el cálculo de remuneraciones y cotizaciones puede derivar en una reducción en el riesgo de cometer errores, evitando tener que invertir más tiempo en identificar y corregir las inconsistencias.

¿Utopía o realidad?: usos que pueden darle los contadores a la inteligencia artificial

5. Optimización de procesos fiscales: un software contable con funciones de inteligencia artificial puede ayudar a los contadores a calcular fácilmente los aportes fiscales que le corresponden a la empresa en el periodo vigente, y así saber si el negocio es elegible para algún tipo de beneficio. Esto ayuda a las empresas a reducir su carga fiscal, además de cumplir con las leyes y regulaciones.

Más innovación

Aplicar IA puede permitir que los profesionales dispongan de más recursos temporales y económicos para dedicarlos a otras tareas fundamentales, pero generalmente postergadas, como la innovación.

Esto plantea así un ecosistema en el que los sistemas se dedican a las tareas más monótonas mientras que el equipo humano se centra en el área más creativa, ocupándose de la gestación de ideas.

La IA y la automatización van a revolucionar la forma en la que trabajamos. Charles Darwin decía que "no es la más fuerte de las especies la que sobrevive y tampoco la más inteligente".

Ahí radica la importancia de que los profesionales no dejen pasar la oportunidad de conocer las nuevas tecnologías para simplificar sus tareas y dedicar más tiempo al análisis.

No quedan dudas que la famosa frase del naturista inglés -que tiene más de cien años de antigüedad- está más vigente que nunca: "Sobrevive aquella que más se adapta al cambio".

Baltasar Parcero, Analista Senior de Outsourcing de Expansion Argentina