ARCA pone en la mira a 10.000 cuits que explican el 70% de la recaudación
Desde este martes, la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) implementará un importante cambio en su política de fiscalización. Consistente con los anuncios del Gobierno sobre los denominados "dólares del colchón", el organismo dejará de poner la lupa sobre consumos de bajo valor para concentrar sus esfuerzos en los grandes contribuyentes.
La nueva estrategia se centrará en aproximadamente 10.000 CUIT que explican el 70% del total de los ingresos impositivos. De ese grupo, unas 1.000 CUIT representan por sí solas la mitad de la recaudación nacional, según declaraciones recientes del ministro de Economía, Luis Caputo. Con esta decisión, ARCA apunta a optimizar sus recursos y mejorar la eficiencia del control fiscal, enfocándose en quienes tienen mayor peso económico.
ARCA investiga a grandes contribuyentes: 10.000 CUIT, en la mira
Como parte de esta reestructuración, el organismo dirigido por Juan Pazos comenzó a enviar notificaciones a los contribuyentes alcanzados por los nuevos lineamientos establecidos en la Resolución General 5670. Aquellos incluidos pasarán a ser supervisados por la Subdirección General de Operaciones Impositivas de Grandes Contribuyentes, una división especializada de la Dirección General Impositiva (DGI).
Las comunicaciones enviadas informan que, desde el 27 de mayo, la gestión de las obligaciones fiscales y previsionales será trasladada a esta nueva jurisdicción. Los contribuyentes recibirán los datos de su nuevo Oficial de Cuentas Tributarias y Previsionales a través del Domicilio Fiscal Electrónico, abriendo un canal personalizado para facilitar trámites y consultas.
El tributarista Sebastián Domínguez, CEO de SDC Asesores Tributarios, explicó que la Resolución General 5670 redefine los criterios de categorización de grandes contribuyentes, adoptando un enfoque más técnico y medible. Entre los nuevos parámetros se incluyen el volumen de ventas, cantidad de empleados, operaciones en moneda extranjera, tenencia de activos, vínculos societarios y capacidad operativa, entre otros.
Según Domínguez, esta metodología busca lograr una mayor transparencia y objetividad al momento de determinar quiénes deben integrar el padrón de grandes contribuyentes. Además, se establece que dicho padrón será actualizado obligatoriamente cada dos años, aunque se podrán realizar incorporaciones extraordinarias de hasta un 10% del total, si existen motivos fundados.
Entre las novedades más relevantes, se destacan las inclusiones automáticas de ciertos perfiles de alto riesgo fiscal, como empresas obligadas a presentar el Informe País por País, sujetos con determinación de precios de transferencia, firmas con actividades complejas y los denominados Vehículos de Proyecto Único (VPU), regulados por el Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI).
Con estas reformas, ARCA da un paso hacia una fiscalización más segmentada, precisa y eficiente, alineada con una gestión del riesgo más moderna y profesionalizada. El objetivo es claro: concentrar el esfuerzo donde el impacto sobre la recaudación es más significativo.