Quién es Marcelo Porcel, el empresario al que acusan de abusar de los compañeros de sus hijos
Un empresario de reconocida trayectoria fue acusado de abusar sexualmente de compañeros de colegio de su hijo en el barrio porteño de Palermo. Se trata de Marcelo Porcel, hijo del fundador de Argencard, la tarjeta de crédito que fue vendida al Grupo Exxel hace aproximadamente 30 años.
Además de su vínculo familiar con el sistema financiero, Porcel fue concesionario del shopping Oh! Buenos Aires, un emprendimiento comercial del que se retiró meses atrás. En 2023, durante la presentación de ese centro comercial, brindó una entrevista a la revista Forbes, donde se refirió a su trayectoria empresarial. En esa ocasión, también se presentó como representante del Grupo Hatzalaj, una firma de capitales uruguayos y panameños dedicada al desarrollo inmobiliario comercial.
Según su perfil en LinkedIn, Marcelo Porcel figura como presidente de Campazu S.A., una empresa agrícola-ganadera en la que trabajó durante dos décadas.
La causa judicial que investiga presuntos abusos en Palermo
La Justicia Porteña investiga a Marcelo Porcel por presuntos abusos sexuales y corrupción de menores contra compañeros de colegio de su propio hijo. La causa está radicada en el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N.º 50, a cargo del juez Carlos Manuel Bruniard, con intervención del fiscal Pablo Turano.
El expediente se inició tras la denuncia de seis familias, aunque con el avance de la investigación se sumaron más casos. Hasta el momento, diez menores declararon ante la Justicia y relataron episodios que habrían ocurrido en distintos lugares: la torre Le Parc, ubicada en Godoy Cruz y Cerviño, otro departamento cercano y una oficina situada a metros del Obelisco.
La causa fue abierta el 5 de julio de 2024 y desde entonces continuó sumando pruebas y testimonios. Los chicos, todos de entre 13 y 14 años, describieron un patrón de conducta similar por parte del acusado.
El empresario Marcelo Porcel, acusado: el mecanismo descripto por presuntas víctimas
De acuerdo con los relatos incorporados al expediente, Porcel se involucraba activamente en la vida escolar y deportiva de los menores. Participaba en actividades del colegio, organizaba encuentros, se ofrecía para trasladarlos y mantenía una presencia constante, lo que inicialmente fue interpretado como un gesto de colaboración.
Con el tiempo, esa actitud comenzó a generar sospechas. Según los testimonios, muchas reuniones terminaban en su domicilio, con insistencia para que los chicos se quedaran a dormir.
Los denunciantes señalaron que los límites se fueron corriendo de manera progresiva: primero, el acceso a bebidas alcohólicas; luego, la entrega de dinero a cambio de desafíos, como dar una vuelta en ropa de interior por la oficina o consumir alcohol. Entre esos desafíos, se mencionan situaciones como recorrer la oficina en ropa interior. En la causa también consta que habría ofrecido figuritas del Mundial 2022 a cambio de beber alcohol.
Las pruebas incluyen transcripciones de chats grupales donde el empresario coordinaba encuentros y reforzaba la idea del secreto, según consta en la investigación.
Restricciones judiciales y estado del expediente
Tras la apertura de la causa, el juez Bruniard dispuso una medida cautelar que prohíbe a Porcel cualquier tipo de contacto directo o indirecto con las presuntas víctimas y sus familias. También se le impidió acercarse al colegio y al club GEBA, donde varios de los menores practican fútbol.
La investigación avanzó con allanamientos en domicilios y oficinas vinculados al acusado, donde se secuestraron celulares y dispositivos electrónicos. Según consta en el expediente, un peritaje sobre su teléfono permitió hallar imágenes de amigos de sus hijos desnudos y mensajes considerados relevantes para la causa.
A pesar de los testimonios, los informes psicológicos y las evidencias recolectadas, aún no se ordenó la indagatoria ni la detención preventiva del empresario. Tanto el fiscal como la Defensora de Menores solicitaron que se lo cite y se le prohíba salir del país, pero el juzgado resolvió esperar a que todos los denunciantes declaren en Cámara Gesell para evitar reiteradas citaciones.