Más de 5 millones de argentinos trabajan en condiciones de desprotección y la tendencia va en aumento
Más de cinco millones de trabajadores en Argentina se encuentran en condiciones de desprotección laboral, según un índice elaborado por el Instituto Argentina Grande (IAG), que analiza la situación del empleo en el país. Este indicador permite medir la cantidad de personas sin aportes previsionales, estabilidad laboral, maquinaria o capital propio para emprender, ni calificación específica, y proyectar el impacto de un posible escenario de recesión económica sobre este sector.
Según el informe, en un universo de aproximadamente 14,3 millones de personas ocupadas en Argentina, un 43,9% se encuentran en esta categoría de trabajo desprotegido, lo que equivale a más de cinco millones de trabajadores. En contraste, un 40,6% del total de ocupados corresponden al empleo privado estable, mientras que un 17,8% integran el sector público.
El análisis del último año refleja un crecimiento en la tasa de trabajo desprotegido. Entre el tercer trimestre de 2023 y el tercer trimestre de 2024, esta categoría pasó del 42,2% al 43,9%, lo que implica que unas 211.000 personas más se sumaron a esta situación. De manera simultánea, la participación del empleo privado estable se redujo del 39% al 38,6%, representando una disminución de 58.900 puestos de trabajo de calidad en comparación con el año anterior.
En términos trimestrales, la tasa de desprotección laboral mostró un aumento de 0,2 puntos porcentuales en el tercer trimestre de 2024, con 59.000 personas más en esta condición respecto del período anterior. Este incremento se explica por la pérdida de empleos formales y la incorporación de personas en edad jubilatoria que, debido a la necesidad de complementar sus ingresos, acceden a trabajos precarios sin cobertura previsional ni estabilidad.
La proporción entre puestos de trabajo estables y desprotegidos sufrió una transformación a partir de la pandemia de Covid-19
Candelaria Rueda, investigadora del IAG, señaló que la proporción entre puestos de trabajo estables y desprotegidos sufrió una transformación a partir de la pandemia de Covid-19 y aún no ha mostrado signos de recuperación. Según el análisis del instituto, que nuclea a equipos técnicos vinculados a Gabriel Katopodis, hasta ese momento, la cantidad de trabajadores con empleo estable era similar o superior a la de los trabajadores en condiciones de desprotección. Sin embargo, desde 2021, esta relación se revirtió y el empleo precario se consolidó como predominante en el mercado laboral.
En este sentido, los datos muestran que durante 2023 se había registrado una reducción en la brecha entre ambas categorías, pero en 2024 la tendencia volvió a revertirse. Según los relevamientos del IAG basados en cifras del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), el crecimiento más pronunciado de la desprotección laboral se dio en el segundo trimestre del año y continuó en ascenso en el tercero.
El informe del IAG también destaca que la composición del mercado de trabajo argentino atraviesa una etapa caracterizada por altos niveles de informalidad y precarización. El impacto de estos cambios en la estructura laboral podría acentuarse en el contexto de una desaceleración económica o una recesión prolongada, afectando a los sectores más vulnerables del empleo privado.