La petrolera YPF registró en el tercer trimestre del año un incremento de sus ingresos del 83%, impulsado en particular por el desempeño del precio y el volumen de las ventas de combustibles, aunque la producción de crudo se mantuvo estable y la de gas cayó 1% por una menor demanda.

Así lo comunicó la compañía a las bolsas de Buenos Aires y de Nueva York, tras la reunión de directorio de este viernes que aprobó los resultados del tercer trimestre del año, durante el cual los ingresos fueron de $121.188 millones, un aumento del 83,5% frente a los $66.00 millones de igual período 2017.

Los resultados operativos antes de depreciaciones, amortizaciones y perforaciones exploratorias improductivas (Ebitda) alcanzaron los $36.800 millones, es decir un incremento del 116%.

Dentro de las principales causas que determinaron la variación en los ingresos, la compañía destacó los incrementos en precio y volumen de las ventas de gas oil que aumentaron 89,6%, las de naftas que lo hicieron un 69,7%, precisó el informe al mercado.

Las ventas como productores de gas natural se incrementaron el 73,8%, como consecuencia de un aumento en el precio promedio, mientras que los volúmenes vendidos se mantuvieron constantes; en tanto que al segmento minorista se incrementaron 101,3% a través de su controlada Metrogas.

Las ventas de fuel oil en el mercado interno disminuyeron 85,1%, debido a una baja en los volúmenes comercializados a las usinas de generación eléctrica, en tanto que subieron las ventas de GLP crecieron 153%, las de jet fuel un 127%, productos petroquímicos 76,2%, carbón 189,8%, fertilizantes 86,4% y lubricantes 44,1%.

La empresa aclaró que cuando se analiza el comportamiento de los precios de los combustibles en dólares, el precio promedio de la nafta muestra una caída del 8,8% respecto del mismo trimestre del año anterior y el gasoil, del 4,1% en el mismo período.

En igual plazo, el precio promedio de Brent presentó una variación del 44%, al pasar de 52,11 dólares promedio en el tercer trimestre de 2017 a 75,22 dólares promedio en el actual.

En este tercer trimestre, los principales costos fueron un 71,1% superior a los del mismo período del año anterior. El resultado operativo, en tanto, alcanzó los $12.685 millones, significativamente superior al resultado del 2017, cuando se registró una utilidad de $ 3.050 millones.

Por el lado de la producción, mientras el crudo se mantuvo estable, el gas registró una leve caída del 1%, que se explica fundamentalmente por una menor demanda observada durante este trimestre.

En el período, hubo una disminución en la producción de NGL (-44,6%) producto de una parada técnica de la planta de Compañía Mega, que sustenta la baja en la producción total de hidrocarburos de la compañía (-4,3%).

No obstante, la producción neta de shale de la compañía sigue mostrando buenos resultados con 57.500 barriles equivalentes de petróleo día, lo que representa un aumento del 58,3% respecto del tercer trimestre de 2017.

La compañía, al cierre de este período, tenía 659 pozos activos con objetivo Vaca Muerta con un total de 12 equipos activos y 11 de workover.

Finalmente, las inversiones en el tercer trimestre fueron de $27.232 millones al crecer 71,2%, y se destacan, entre las mayores inversiones del Upstream que subieron 80,4%, las actividades de desarrollo para la producción de hidrocarburos.

En el downstream hubo un incremento de inversión de 50.4%, se destaca la actualización de los complejos industriales de YPF para la producción de combustibles premium y en línea con las nuevas especificaciones para el cuidado del medio ambiente y la reducción de emisiones.