Mientras siguen vigentes las consecuencias del último aumento de luz en momentos en los cuales miles de personas se quedaban sin suministro energético, el Gobierno acaba de dar un nuevo paso para aumentar también las tarifas de gas a partir de abril próximo.

Lo hizo mediante la publicación en el Boletín Oficial de esta jornada de la convocatoria a una audiencia pública en la cual se discutirán las propuestas de incrementos establecidas en el marco del acuerdo de renegociación tarifaria negociado entre las autoridades nacionales y las transportadoras y distribuidoras de este servicio público.

De acuerdo a la Resolución 1/2019 del Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas), las audiencias se llevarán a cabo el próximo 26 de febrero y, en el caso de Capital Federal, tendrán lugar en el Centro Metropolitano de Diseño, mientras que para el interior se habilitarán centros de participación virtuales en Neuquén, Tierra del Fuego y Bahía Blanca.

En la audiencia se discutirán las propuestas de subas tarifarias ya acercadas por las empresas al Energas que, en el caso de Metrogas, será del 35% de promedio para aplicar al servicio que le ofrece a sus 2,5 millones de clientes distribuidos entre la Capital Federal y varios partidos del conurbano bonaerense.

Con este escenario de fondo, la empresa cuyo capital accionario es controlado por YPF, será representada por nuevos ejecutivos a la audiencia pública, teniendo en cuenta que hace unos días renunciaron su presidente y vicepresidente, Marcelo Adrián Nuñez y Patricio Da Re, respectivamente.

En este sentido, la empresa designó a Fernando Oscar Ambroa como su máximo ejecutivo, y a Dante Kogan para acompañarlo en la gestión. Ambos planean mantener los pedidos de aumentos que Metrogas ya le acercó al Enargas a fines del año pasado y que plantean readecuaciones con un piso del 35% y un techo de hasta un 60%, según el perfil de los usuarios.

Hasta ahora, las tarifas de gas se incrementan por varios motivos como la reducción de los subsidios al precio, la recomposición de los ingresos de las distribuidoras y transportadoras que se acordó en diciembre del 2016 por cinco años y que les asegura un margen de rentabilidad del 12% al 13% y fondos para nuevas inversiones.

También influyen los ajustes por precios mayoristas semestrales y una compensación para los transportistas y distribuidores por haber aceptado distribuir en tres cuotas semestrales los aumentos pactados con el Gobierno para el quinquenio.

En el caso de Metrogas, ya el año pasado había calculado una suba de un 38% para los clientes que consuman más de 1800 metros cúbicos anuales y de hasta un 46% para la mayoría de los usuarios. En tanto que para los comercios e industrias la suba podría trepar al 60%.

En este marco, durante la audiencia pública de fin de mes y de acuerdo a lo establecido por la resolución del Enargas se pondrá en debate la aplicación de la llamada Metodología de Adecuación Semestral de la Tarifa, que también abarca a lo que cobran Transportadora de Gas del Sur (TGS); Litoral Gas; Gas Natural Ban; Camuzzi Gas Pampeana y Camuzzi Gas del Sur.

Se trata del traslado a los precios que pagan los usuarios del valor del gas comprado a las petroleras y la consideración de las diferencias diarias acumuladas correspondientes al período estacional en curso.

También se considerará la creación de un Punto de Ingreso al Sistema de Transporte en Escobar y de una ruta de transporte GBA-GBA y sobre la tarifa de redes abastecidas con Gas Licuado de Petróleo (GLP).

La base de la audiencia pública respalda lo acordado por el Enargas sobre la metodología de adecuación semestral de las tarifas de gas acordadas con las empresas del sector en el marco de las actas de renegociación de los contratos de concesión.

Como parte de ese convenio, el organismo puede introducir mecanismos no automáticos de aumentos en la distribución “a efectos de mantener la sustentabilidad económica-financiera de la prestación y la calidad del servicio”, según se establece en la resolución oficial.

También se anticipa que los aumentos comenzarán a regir a partir de abril próximo y se le pide a las empresas que presenten ante el Enargas los cálculos correspondientes a las subas solicitadas “a fin de que esta Autoridad Regulatoria realice una adecuada evaluación considerando otras variables macroeconómicas que permitan ponderar el impacto en las economías familiares, que no se limite al conjunto de asalariados, tal como se previera en un inicio, sino que considere niveles de actividad, salariales, jubilaciones, entre otras cuestiones”.

Una vez analizado el pedido, el ente reconocerá o no en las tarifas finales a los usuarios del precio promedio ponderado de los contratos negociados, siempre que la licenciataria acredite haber contratado por lo menos el 50% de sus necesidades del período respectivo.

La normativa recuerda además que a partir de ahora los aumentos serán estacionales y semestrales, abarcando los períodos del 1 de abril al 30 de septiembre de cada año, y del 1 de octubre al 31 de marzo del año siguiente.

Se obliga también a las empresas a llevar una  contabilidad diaria separada del precio y del valor del gas comprado e incluido en sus ventas reales, y de la diferencia entre este último valor y el del gas incluido en la facturación de tales ventas. Y se establece que si en el transcurso del período estacional, la suma de los montos mensuales no difiriere en más de un 20% de las ventas acumuladas del mismo período, será incorporada al ajuste de tarifas del período estacional siguiente. Adicionalmente se traslada a lo que pagan los consumidores el precio que las distribuidoras abonan a las transportadoras de gas.

Por otro lado, el Enargas propondrá durante la audiencia pública la creación de un denominado Punto de Ingreso al Sistema de Transporte en la localidad de Escobar y de la de crear una ruta de transporte GBA-GBA y establecer el cuadro tarifario pertinente.

Esto se debe a un estudio realizado por el Enargas sobre las condiciones de abastecimiento de gas existentes a raíz de las inyecciones de Gas Natural Licuado (GNL) regasificado proveniente de la Flotating Storage and Regasification Unit (FSRU) ubicada en Escobar.

En este caso, varios de los subdistribuidores le informaron al ente que las tarifas reconocidas para sus localidades abastecidas con GLP no alcanzarían a cubrir sus costos.