A escasas semanas de concluir el año, todo indica que la modificación de la ley de alquileres pedida largamente por inquilinos, inmobiliarias e, incluso, propietarios, quedará para 2023. Así lo interpretan en el ámbito de la comercialización, aunque no faltan quienes esperan por alguna aprobación express en las potenciales sesiones maratónicas de diciembre. Mientras tanto, los ajustes ya se ubican por encima del 73 por ciento y la perspectiva es de suba potente en la segunda mitad de noviembre.

En el sector de las inmobiliarias remarcan que la falta de unidades es una condición dominante a partir de la vigencia del marco actual. Los comercializadores no dejan de señalar la importancia de reducir la duración de los contratos de 3 a 2 años, además de apoyar la opción de que se implementen actualizaciones semestrales a negociar entre dueños e inquilinos y se quite el ajuste por inflación.

Todo esto ocurre mientras, ya en el plano de lo económico, la cotización de los pocos inmuebles disponibles para alquilar aumentó por encima del 110 por ciento. A eso hay que agregarle la evolución de las expensas, destacó, que si bien aún no reflejan la quita de subsidios al gas y el agua se dispararon por la evolución de otros costos.

Desde entidades como CUCICBA, el colegio que integra a los corredores porteños, aseguraron a iProfesional que las perspectivas para el mercado locativo siguen siendo negativas si no hay cambios inmediatos en la regulación.

La ley de alquileres sin cambios alienta más subas

"La situación sigue complicada. Según información brindada por algunos diputados, no se ha llegado a juntar el número necesario para su tratamiento. Las estimaciones que manejamos desde el Colegio Profesional Inmobiliario de la Ciudad (CPI) nos marcan que, en noviembre, los alquileres tienen un aumento del 73,25 por ciento", dijo a este medio Marta Liotto, presidenta de CUCICBA y también titular del CPI.

"Creo que ese número habla por sí solo de la dificultad que enfrenta el mercado locativo en la actualidad por el fracaso de la ley de alquileres. A menos que el Congreso avance en la reforma de esa norma, tal como fue prometido en marzo de este año y nunca se cumplió, las perspectivas no son las mejores", aseguró a iProfesional.

El inicio de noviembre fue con un aumento inédito de los alquileres.

Dada la posibilidad cierta de que el marco termine por no ser ni siquiera tratado en este final de 2022, la directiva sostuvo que el segmento espera y confía "en que la llegada del nuevo año nos permita encontrar los caminos para avanzar en las modificaciones necesarias para solucionar el desastre generado por esta norma".

"Asimismo, creemos que es necesario que se avance en políticas de consenso, como la extensión del blanqueo, la inclusión a la compra de departamentos usados para vivienda propia y alquiler como aprobó Diputados, que sin dudas ayudarán a reactivar el mercado. Por nuestra parte, seguimos a disposición de funcionarios y legisladores para trabajar en conjunto con vistas a poner en marcha políticas que busquen fomentar la actividad del sector", aseguró.

Liotto no dudó en definir a este parate que exhibe el tratamiento de los cambios a la ley de alquileres como "una demora innecesaria que perjudica a todos".

Nuevos alquileres, precios por las nubes

Factores como la inflación predominante y su efecto sobre la ley de alquileres vigente llevó a que, por estos días, en Capital Federal el valor de un monoambiente en alquiler se acerque, cada vez más y en promedio, a los 60.000 pesos.

Así quedó reflejado en un monitoreo que acaba de llevar a cabo Reporte Inmobiliario, el cual arrojó que el valor medio de un departamento de esas características en la Ciudad promedia los 57.250 pesos mensuales. La cifra en cuestión se ubica sólo un 12 por ciento por debajo de lo que cuesta alquilar un dos ambientes.

Estas unidades, señala el trabajo, "se ubica en los 65.000 pesos (promedio), mientras que la mediana de valor de los departamentos de 2 y 3 dormitorios fue en septiembre pasado de 87.000 y 120.000 pesos, respectivamente".

La oferta de propiedades en alquiler es la más baja en al menos una década.

"Desde marzo de este 2022 hasta septiembre el valor medio de un departamento de 2 ambientes fue el que más se apreció con un porcentaje acumulado del 71,05 por ciento. Apenas por debajo, los monoambientes que aumentaron en el mismo lapso el 70,9 por ciento", precisó Reporte Inmobiliario.

"El valor medio de locación de las unidades de 3 ambientes fue el que experimentó el incremento más reducido con un 54,5 por ciento entre septiembre y marzo pasado. Las unidades más grandes de 3 dormitorios subieron en ese período el 60 por ciento", se añade en el monitoreo.