Mientras la inflación no cede y repercute fuerte en los costos empresarios y los programas de controles de precios siguen sumando fracasos en frenar aumentos, una de las principales productoras de alimentos del país volvió a buscar fondos en los mercados para sostener sus planes de negocios.

Se trata de Morixe Hermanos, fabricante de harinas, polenta, pan rallado y rebozadores, entre otros artículos, que es propiedad del empresario Ignacio Noel, a su vez presidente de Sociedad Comercial del Plata (SCP).

La compañía licitó el 13 de marzo pasado una nueva serie de Obligaciones Negociables (ON) Clase III con el objetivo de canjear las ON Clase II y ampliar el financiamiento para acompañar el crecimiento de sus operaciones.

En ese marco, obtuvo 77 ofertas por $1.813 millones teniendo una sobre demanda de más del 20%, colocándose $1.500 millones a tasa Badlar más 4%, con vencimiento a 18 meses, lo cual para sus ejecutivos, "demuestra la confianza de los inversores con plazos más extensos que los de la ON Clase II".

En esta nueva emisión, Morixe buscaba un monto de hasta $1.500 millones para canjear la ON existente por $500 millones por una nueva clase a 18 meses.

A partir de la sobre demanda del 20% y el acompañamiento recibido por parte de los inversores, decidió la emisión de $1.500 millones, los cuales serán aplicados a la cancelación de pasivos y a la financiación de capital de trabajo para continuar desarrollando los negocios de la empresa.

Morixe buscaba un monto de hasta $1.500 millones para canjear la ON existente por $500 millones por una nueva clase a 18 meses

La operación no es más que un "rolleo" de la ON anterior, y como la tasa y el plazo eran lógicos pudo financiar más capital de trabajo por este camino dejando de lado líneas más caras o en dólares.

Hace unos meses, Morixe había encarado un proceso similar canjeando el 70% de la serie de ON Clase I por las que recibió ofertas por más de $600 millones.

De hecho, la segunda emisión fue sobresuscripta, colocándose $500 millones, con plazo de un año a tasa BADLAR más un margen de 1,94%.

En este marco, Morixe canjeó deuda por más de $250 millones y tuvo que aplicar un factor de prorrateo debido a la alta demanda, dejando más de $100 millones fuera de la suscripción.

Los fondos fueron aplicados a cancelación de pasivos, extensión de plazos de deuda y reducción del costo financiero con el objetivo de poder concentrar sus esfuerzos en seguir creciendo en el mercado de alimentos, donde produce y comercializa harinas de trigo, pan rallado, rebozador, polenta, aceite de oliva, aceitunas, aceto balsámico, papas prefritas congeladas, puré de papas, harina de maíz blanco precocido y avenas, entre otros productos.

El foco en nuevas categorías

En los últimos seis meses del año pasado, Morixe alcanzó una ganancia de $111 millones y logró procesar más de 86.000 toneladas de materias primas, lo que representa una disminución del 20% respecto del mismo período del ejercicio anterior.

Uuna de las principales productoras de alimentos del país volvió a buscar fondos en los mercados

Por su parte, la molienda de trigo alcanzó las 68,400 toneladas, mientras que las ventas acumuladas locales y de exportación correspondientes a líneas de productos no farináceos ascendieron a 21.681 toneladas, demostrando el continuo foco puesto sobre el lanzamiento de nuevas categorías con una mayor rentabilidad y un mayor valor agregado.

Adicionalmente, las ventas de harinas y subproductos en el mercado local ascendieron a 60.921 toneladas, representando una caída de 16,7%.

Por su parte, las ventas de harinas y subproductos en el mercado exterior fueron de 5.124 toneladas, en tanto sus ventas consolidadas reexpresadas a moneda de cierre han alcanzado un valor de aproximadamente $ 7.715 millones, mostrando una disminución del 20% respecto al mismo período del ejercicio anterior.

Dicha variación se explica en parte por la modificación de las condiciones contractuales que Morixe posee con la empresa Lamb Weston Alimentos Modernos S.A. (LWAMSA), a partir de las cuales la sociedad le presta servicios comerciales a cambio de que la empresa extranjera realice la fabricación y comercialización de las papas prefritas congeladas marca Morixe.

"En resumen, si se considera que el procesamiento de materias primas disminuyó un 20%, y la variación de las ventas reales fue de solamente una disminución del 3%, la diferencia se traduce en una mejora real de los márgenes de cada una de las unidades de negocio en las que Morixe se desempeña", asegura un documento enviado por la compañía a la Comisión Nacional de Valores (CNV).

Diversificar y agregar valor

Respecto al financiamiento, Morixe tomó fondos (que representan un 12% de su deuda financiera) de entidades bancarias que permitieron financiar proyectos de inversión que ya fueron puestos en marcha y se encuentran totalmente operativos.

"Dichos planes tienen como objetivo consolidar la estrategia de diversificación de productos agregando cada vez más valor a las materias primas, a la vez que se continuarán con las mejoras y renovaciones en líneas de producción que permitan la transición hacia un proceso productivo cada vez más eficiente", detalla el documento.

En cuanto al negocio tradicional de la empresa, harinas a granel y bolsa de 25 kgs, continúa con su estrategia de mantener y crecer en dicho segmento en la medida que el mercado presente oportunidades.

Con respecto al comercio exterior, sigue activamente con su inserción en los mercados de la región a través de nuestros representantes exclusivos para Brasil, Paraguay, Uruguay y Bolivia.

Del mismo modo, mantendrá su estrategia de afianzar en el mercado los lanzamientos de nuevos productos sobre la base de la marca Morixe, que viene estando presente en el mercado argentino y regional desde 1901.

Para este año, la empresa continúa evaluando proyectos de inversión y lanzamientos tanto para el mercado externo como para el mercado local.