Aunque la agencia de viajes Chida Holiday logró evitar el jaque en el que estuvo durante dos años por la pandemia, Ignacio Ciarrocca, uno de los socios, aprovechó las impertinencias del virus para cumplir su sueño emprendedor de fundar una marca con impacto positivo para Tierra del Fuego, su provincia de nacimiento. La búsqueda se tradujo en Wandergreen, un emprendimiento que fabrica mochilas de papel kraft y que por cada unidad vendida dona un árbol para reforestar las zonas incendiadas de la Patagonia.

Desde su fundación en 2020, Wandergreen lleva donados alrededor de 2.000 árboles a la ONG Reforestarg.org.ar. Este mes harán un nuevo recuento de ventas y, según estimaciones de Ciarrocca, estarán donando otros 1.000 árboles. "El objetivo es llegar a fin de año con 6.000 árboles plantados. Actualmente la fundación está reforestando la zona norte de la Patagonia, pero mi sueño es llegar a la isla de Tierra del Fuego y devolverle a la provincia todo lo que me dio y me sigue dando. Entiendo que llegar es un poco más complicado logísticamente, pero bueno, llevará más tiempo, pero se hará", dice comprometido el emprendedor.

Emprender con impacto social

La empresa también trabaja con la Fundación IDEL que se dedica a la inclusión laboral de personas con discapacidad. Ellos se encargan del testeo y control de calidad de los productos y colocan el material promocional en cada uno. Aunque Wandergreen no certifica como empresa B, lograr la acreditación es un objetivo que Ciarrocca se planteó para el mediano largo plazo.

Es que el triple impacto fue el leitmotiv de la marca. Si el producto cumplía con el propósito podían ser mochicas o cualquier otra cosa. Aunque, apasionado por viajar y el ecoturismo, que sean mochilas y riñoneras tuvo sentido para el emprendedor. "Pero además tenía una agencia de viajes y podía potenciar las marcas invitando a los pasajeros de Chida a que usen los productos Wandergreen", reconoce.

Un emprendimiento que arrancó con $200.000 y 50 mochilas

El emprendimiento arrancó con 50 mochilas y el emprendedor eligió el papel Kraft como materia prima por ser lavable y resistente por un lado y, no menor, vegano y reciclable por el otro. Esta tela-papel, explica, está hecha de pulpa virgen de celulosa de cultivos especiales no de deforestación y tiene el sello alemán Consejo de Administración Forestal (FSC ), que certifica la gestión sustentable de los bosques.

"El primer año fue prácticamente de prueba. Los primeros clientes fueron familiares y amigos y con su feedback fui testeando y mejorando la calidad del producto", cuenta el emprendedor quien puso $200.000 de sus ahorros como inversión inicial.

Arrancó con 50 mochilas, ahora vende 1.000 por año y ahora calcula que llegará a las 3.000

Confirmado que el producto funcionaba bien, Ciarrocca reinvirtió los ingresos que fue generando con su empresa de viajes y armó un equipo de 5 personas. "El acceso a financiamiento para las Pymes es muy complicado en Argentina por lo que tuve que manejarme con ahorros y reinvirtiendo todo; así y de a poco fuimos creciendo", cuenta a iProfesional el emprendedor que para este año estima facturar más de 40.000.000 pesos.

Ser parte de la ecuación una mochila por un árbol

La empresa, que terceriza 100% de la producción, vende alrededor de 1.000 productos por año, pero este 2023 espera triplicar las ventas gracias a que estará sumando más canales de venta.

Actualmente los productos Wandergreen se venden a través de la tienda online y las redes sociales de la marca, pero también en comercios minoristas como Alparamis, Tintha y la Tienda del Museo MALBA. "Próximamente estaremos también cerrando otros lugares importantes", adelanta sin poder dar más detalles.

A Ciarrocca le gustaría tener locales propios y espera a futuro conseguirlos, pero, aclara, no para reemplazar a los retailers con los que trabaja sino más bien para complementarlos.

Productos para clientes pro viaje y naturaleza

Los productos Wandergreen (mochilas, riñoneras, bandoleras, cobertores de notebook y próximamente materas) están pensados para clientes que como albatros errantes (logo de la marca), les guste viajar y conectarse con la naturaleza.

Pero también el emprendimiento trabaja para el segmento corporativo con productos personalizados. "La idea es que otras marcas puedan potenciar su perfil sustentable regalando nuestros productos con propósito. Hemos realizado acciones con Terma, Wyndham Hotels & Resorts, la constructora Holcim y SúperClub Santander, donde somos parte de su catálogo de productos", dice orgulloso.

Wandergreen debe su nombre a los albatros errantes que surcan los cielos de Ushuaia, lugar que inspiró a su fundador

La carpeta de proyectos de Ciarrocca para Wandergreen es inagotable. Acostumbrado al multitasking por sus trabajos anteriores como gerente de Marketing en corporaciones, le sale natural ponerse en la semana el sombrero de agente de viajes y pasar al fin de semana con el de emprendedor para pensar ya no cómo crear una experiencia inolvidable de viaje a sus clientes Chida sino más bien cómo producir bolsos, gorros, billeteras y generar una "comunidad" Wandergreen que le permita donar más árboles, tener un negocio sustentable y dar los primeros pasos a la internacionalización, otro de los puntos que lo ilusiona.