Uno de los mayores laboratorios locales vende parte de su negocio en el exterior
En 2022 y tras haber obtenido algo más de $1.000 millones en el mercado de capitales local, Laboratorio Richmond, propiedad del empresario Marcelo Figueras, se preparaba para lanzar nuevos medicamentos y potenciar la expansión de sus operaciones en el exterior.
De hecho, en los años anteriores ya había desembarcado en varios mercados y lanzado al mercado argentino 10 nuevos productos, tres de ellos en Oncología – Oncohematología; dos en Infectología – VIH; tres en Cardiometabolismo; uno en Esclerosis Múltiple, y uno en Artritis Reumatoidea.
En el escenario internacional, su recorrido inició en 2016 con un plan con el objetivo de extender la regionalización de la empresa en Latinoamérica.
Ese año adquirió una participación de la empresa Expofarma de Colombia (hoy Laboratorios Richmond Colombia SAS); e inició negociaciones para la compra de la distribuidora de Paraguay denominada Medicine y de la distribuidora de Chile que operaba como Bamberg LTDA.
Asimismo, el 26 de octubre de 2016, constituyó una sociedad anónima en Montevideo, Uruguay, con el nombre de Compañía Inversora Latinoamericana S.A.
En el 2017, se crearon en México y en Perú las compañías Laboratorios Richmond México SA de CV y Laboratorios Richmond Perú SAC, ambas aún en fase preoperativas.
Laboratorio Richmond: cronología de una expansión
Durante el 2018 y el 2019, continuó con la consolidación del plan de expansión regional, completando la compra del 100% del paquete accionario de la sociedad en Colombia; del 55% del paquete accionario de la sociedad en Paraguay; y del 90% del paquete accionario de la sociedad en Chile.
En tanto, el 3 de noviembre del 2020, recaudó u$s6 millones con la colocación de dos series de ON que vencen en noviembre de 2030 para concretar las inversiones productivas y desarrollo de nuevos productos llevadas a cabo por la sociedad.
Luego, el 12 de abril del 2021, Richmond aprobó la constitución del Fideicomiso Financiero "Proyecto V.I.D.A. (Proyecto e Inmunización para el Desarrollo Argentino)", para financiar la construcción y operación de la planta de biotecnología para producir localmente vacunas, entre otras, las establecidas contra el coronavirus SARS-CoV-2, también denominado COVID-19.
El 6 de agosto del mismo año concluyó la colocación del fideicomiso, por el máximo del monto establecido de u$s85 millones, aunque el establecimiento todavía no se concretó.
Luego de ese proceso, desde la empresa informaron su objetivo de "seguir abocada a los proyectos de inversión, completando la integración de la estructura regional, y favoreciendo el lanzamiento de nuevos productos tanto en las terapias tradicionales como en la incorporación de productos biosimilares".
El plan de uno de los laboratorios locales más grandes, en stand by
Ahora, el plan de expansión regional de Richmond parece haber ingresado en un período de achique, si se tiene en cuenta que el laboratorio acaba de anunciar la puesta en venta de parte de su filial colombiana.
A través de un documento publicado en la web de la Comisión Nacional de Valores (CNV), el laboratorio que orienta Marcelo Figueras informó que, como consecuencia de un proceso de análisis estratégico, el directorio de la filial Laboratorios Richmond Colombia "ha iniciado el proceso para la enajenación de activos".
Esta operación no abarca la totalidad del laboratorio ubicado en ese país, sino que incluye el negocio de "medicamentos genéricos" y los denominados "genéricos de marca de cuidado primario" operado por dicha empresa en ese país.
El objetivo es, precisamente, la venta de estas actividades a la empresa Laboratorios Raven Colombia, subsidiaria de un grupo del mismo nombre con sede en Costa Rica que fue fundado en 1970 y que está enfocado en la producción, la distribución y la comercialización de productos farmacéuticos.
Como consecuencia de esta transacción, este holding se hará cargo de activos productivos como maquinaria y equipo de producción farmacéutica; la planta productiva donde operaba la filial; marcas, registros sanitarios, bases de datos y proyectos; contratos con proveedores, clientes y la cesión de los contratos de los empleados asignados a tales proyectos de negocio.
"Esta decisión estratégica tiene como objetivo la reducción de costos operativos mediante la eliminación de gastos fijos asociados a la producción nacional en Colombia", detalla el comunicado de Richmond.
Concentrarse en el core business, el objetivo de la firma
El proceso, entienden los ejecutivos locales, le permite al laboratorio un mayor enfoque comercial en actividades de marketing y distribución de los productos elaborados en Argentina, "promoviendo el aprovechamiento de capital para ser destinado a otras inversiones estratégicas de mayor rentabilidad".
De hecho, en el comunicado se agrega que "la transacción busca reorientar la filial colombiana hacia las actividades de comercialización y distribución de productos farmacéuticos elaborados en las plantas ubicadas en territorio argentino, prescindiendo de la línea de genéricos de manufactura local y concentrando recursos en el core business del grupo".
Detalla también que dicha reestructuración "representará un hito significativo que fortalecerá la posición competitiva del grupo empresarial, optimizará la asignación de recursos, contribuyendo a la sostenibilidad y crecimiento de las actividades en el mercado farmacéutico regional".
En la actualidad, Laboratorios Richmond es una de las farmacéuticas más importante de la región, con 90 años de historia, que desarrolla y produce medicamentos de alta calidad, operando en un contexto socioeconómico, dinámico y complejo.
A nivel local, desarrolla su actividad dentro del parque industrial de Pilar, en la provincia de Buenos Aires, donde cuenta con una unidad productiva para productos sólidos orales no segregados, principalmente destinada para líneas de infectología, sistema nervioso central y cardio-metabólico.
Posee una segunda unidad dedicada a productos de alta potencia (sólidos orales segregados), principalmente oncológicos, y un terreno cedido a la construcción de una tercera planta de biotecnología que se encuentra en etapa de finalización.
Además, en septiembre de 2022, constituyó una sociedad anónima, denominada Laboratorios Richmond División Liofilizados, que adquirió un predio para instalar otra planta productiva, también en el Parque industrial de Pilar, que se encuentra en etapa preoperativa.
Semestre positivo
Durante el primer semestre de este 2025, Laboratorios Richmond registró una ganancia de $3.194 millones, con ventas netas de bienes y servicios que alcanzaron los $53.820 millones, lo que representa un incremento del 14% respecto del 2024.
Este aumento se explica fundamentalmente por un crecimiento en los volúmenes comercializados en canales especializados, acompañado por ajustes de precios que, si bien se ubicaron por debajo de la inflación del período, evolucionaron en línea con la demanda del mercado.
"Este desempeño refleja la solidez del negocio en sus principales segmentos y una ejecución comercial eficiente", detalla un informe del laboratorio elaborado para evidenciar los resultados del balance semestral.
Por otra parte, los gastos de administración se ubicaron en $6.272 millones, marcando un incremento del 37%, impulsado principalmente por reorganizaciones y actividades preoperativas correspondientes al Proyecto Vida.
Como consecuencia, el resultado operativo ordinario alcanzó los $9.300 millones, que muestran un incremento del 53% respecto al mismo período del año anterior originado por una combinación de factores como el sostenimiento de la demanda en los principales mercados, una gestión eficiente de los costos y un estricto control de los gastos operativos, todo ello con un enfoque constante en la rentabilidad del negocio.
"Este desempeño refleja la solidez del negocio en sus principales segmentos y una ejecución comercial eficiente", se agrega en el comunicado, en el cual también se destacan "mayores inversiones enfocadas a nuevos productos de mayor complejidad y posicionamiento en el mercado, en el marco de una estrategia de expansión comercial".
Dichas mejoras también se traducen en un EBITDA del 30% sobre ventas, frente al 21% registrado en mismo período del 2024, logrado "gracias a una combinación de factores: el sostenimiento de la demanda en los principales mercados, una gestión eficiente de los costos y un estricto control de los gastos operativos, todo ello con un enfoque constante en la rentabilidad del negocio".
Para lo que resta del año, los ejecutivos de Laboratorios Richmond esperan que sus operaciones se desarrollen en lo que llaman "un entorno económico caracterizado por una marcada desaceleración de la inflación, un fortalecimiento del equilibrio fiscal y la consolidación del proceso de apertura cambiaria".
Destacan que, si bien la actividad económica aún muestra señales heterogéneas, con sectores en recuperación y otros en proceso de ajuste, la tendencia general apunta a una mayor estabilidad.
"En este contexto, la Sociedad continuará ejecutando una estrategia orientada a la rentabilidad operativa, la eficiencia en costos y la expansión regional, priorizando la sostenibilidad financiera y la adaptabilidad frente a un entorno en evolución", agregan.