La familia Triaca llegó a un acuerdo por una compensación económica con Sandra Heredia, la exempleada doméstica de la quinta de la familia que había denunciado al ministro de Trabajo, Jorge Triaca, por tenerla contratada "en negro".

El acercamiento se conoció en medio de las vacaciones que se tomó el funcionario hasta el próximo lunes, luego de que la semana pasada estallara un escándalo, con la difusión de un audio en el que el titular de la cartera laboral insulta y maltrata a la casera.

La mujer y el hermano del ministro, Carlos Triaca, llegaron a una conciliación el viernes pasado en la delegación San Isidro del Ministerio de Trabajo bonaerense, por el que Heredia desistirá de continuar el litigio en la Justicia.

Según al acuerdo al que tuvo acceso iProfesional, la denunciante sostiene que había ingresado el 12 de noviembre de 2012 como casera en la quinta de Boulogne, ubicada en Panamericana 4079, y que cobraba un sueldo de $19.500. 

Pero "con fecha 06/01/2018 ha sido despedida sin causa y reclama el pago de indemnización por antigüedad, preaviso, integración mes de despido, vacaciones proporcionales, SAC sobre los rubros mencionados, SAC proporcional y días trabajados".

En el mismo escrito, Carlos Triaca rechazó los datos de la relación laboral invocados por la exempleada y ratificó que él fue el empleador, desligando a su hermano del caso. Asimismo, aseguró que "ha registrado correctamente su contrato de trabajo con fecha real de ingreso 01/10/2015".

Explicó al respecto que la inscribió en la categoría laboral de "casera" con una remuneración mensual de $9.826,50, con asignación de vivienda y gastos. Pero el monto de la indemnización no se dio a conocer.

Heredia declaró la semana pasada a los medios que había trabajado en negro hasta 2015, cuando fue blanqueada, y que realizaba tareas en el sindicato marítimo SOMU, donde fue designada como delegada de la intervención, según ella, para "compensar" su ingreso de casera. 

"Soy delegada en el SOMU. Él (por Triaca) me coloca ahí. Tengo contrato hasta el 12 de febrero. Él me dijo que mi prioridad era la quinta. Si yo estaba en el SOMU y había un evento tenía que irme volando para la quinta (del ministro)", dijo Heredia en una entrevista en Radio Con Vos.

La mujer cobraba $28.000 en mano por sus tareas en el gremio, y otros $10.000 por el servicio doméstico en la quinta, más la casa y la comida.

Desde la cartera laboral, sin embargo, señalaron que el contrato era "formal" y que el acuerdo "confirma que el ministro de Trabajo no mantenía relación laboral con la señora Heredia".

El funcionario continúa sus vacaciones, luego de recibir las críticas de todo el arco político por la incoherencia de que el responsable de la cartera laboral mantuviera contratada de manera informal a una empleada.

Desde el Gobierno salieron a respaldar a Triaca. El jefe de Gabinete, Marcos Peña, calificó como "un error", aunque señaló: "No sentimos que eso sea algo que tenga que costarle el cargo".

El otro conflicto que abrió el caso es el de las designaciones políticas en el SOMU. Heredia relató en su momento que el ministro le había conseguido un trabajo en la seccional San Fernando del gremio, que está intervenido por la Justicia y cuyo extitular, Omar "Caballo" Suárez, está preso por corrupción.

El audio de la polémica

La semana pasada se viralizó en las redes sociales un audio de WhatsApp que habría sido enviado por el ministro de Trabajo de Cambiemos, Jorge Triaca, a una mujer que trabajaba como casera en una quinta de la familia del funcionario macrista.

"Sandra, no vengas, eh. No vengas porque te voy a mandar a la concha de tu madre. Sos una pelotuda", es lo que se escucha en el audio que habría salido de la boca del titular de la cartera laboral y que fue difundido por Opi Santa Cruz.

"A mí me echaron como un perro, porque el sábado estaba en mi casa en la quinta, donde me encontraba pintando, y se acercó el cuñado de Jorge, Sergio Borsalino, y me pidió que me fuera porque ya no trabajaba más", señaló la mujer al mencionado medio.

Frente a las cámaras, Carlos Triaca respondió en su defensa que Heredia era empleada suya y que la misma se encontraba en blanco "cien por ciento". El hombre explicó que existe una demanda laboral de por medio y denunció faltante de objetos en la casa, que provocaron el despido.

Además, se disculpó por las fuertes palabras del ministro de Trabajo. Triaca había justificado su "enojo" debido a que había perdido su silla de ruedas.